Odio Amarte [Zero X Puppeteer]

Capitulo 7

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— ¡Ya era hora querida!

Al llegar a la sala me tope con nada mas y nada menos que con Emrra, ¿Que hacia esta aquí? Gruñi para mis adentros.

— ¿Hola? - la "salude" sin entusiasmo alguno, aun caminaba chueco, estúpida Nina y estúpido Nathan.

Por cierto, me vengare de ellos cuando pueda.

— Pupp me comento lo que te sucedió, así que decidi venir a ver como estabas. - estúpida e hipócrita marioneta, la sonrisa que me dedicaba era mas falsa que el cabello de Donald Trump, lo único que me provocaba era partirle esa jeta de una patada voladora.

— Pues, como veras, estoy perfectamente. - dicho esto continúe mi camino, pasando de ella.

Ya me podía imaginar como esa asquerosa sonrisa se borraba de su horroroso rostro.

No entiendo que le pudo ver Puppeteer a esta, a claro, es una mardita marioneta.

Abrí la puerta de la cocina y esquive un sándwich que iba directo a mi cara, eso ya era normal en esa cocina, camine hacia la nevera y removí el montón de basura que había en esta, al parecer Slender tenia un tiempo sin revisar esto.

Suspire y conseguí al fin algo intacto, una manzana, le di un mordisco, a pesar de que me había comido un plato de waffles hace unas horas seguía con hambre.

— Hey Zero, deberías estar en cama. - voltee mi cabeza para mirar a quien me hablaba por enzima de mi hombro, Nathan.

— ¡Tu! ¡Hijo de tu mamá! - lo señale con mi dedo índice, mientras que con la otra mano llevaba la manzana a mi boca para darle otro mordisco.

Él levanto las manos, haciendo un gesto gracioso y sonriendo demasiado irónico.

— Soy una blanca palomita, yo no hice nada. - se defendió. - fue Nina la que te clavo la guitarra.

— Y tu me hiciste lo demás. - lo acuse, sin dejar de señalarlo- ni creas que te me vas a salvar, idiota.

—  Tú comenzaste, cara de muerta. - ahora el también me estaba señalando.

Cuando me dijo aquello comencé a reír, no por el insulto, si no por el concierto que esos dos imbéciles tenían montados cuando entre por la ventana.

— ¡No te rías estúpida ingrata! - me reprocho, yo deje de reírme pero sin borrar la sonrisa burlona de mi rostro.

— Hola muchachos. - interrumpió alguien, acercándose a nosotros.

Era Puppeteer.

Y venia junto a Emrra.

Estúpidos.

— Veo que ya estas mejor, Zero. - me dijo, elevándose un poco en el aire, un pinshe espíritu tenia que ser.

— Aja. - respondí con sequedad, Nathan se río y yo lo fulmine con la mirada. - en fin, tengo que irme.

— ¿A donde vas? - me pregunto el espíritu flotante, yo solo lo ignore y salí de la cocina.

— ¡Mal educada! - me grito, solté un resoplido divertido.

— ¡ANGELS! - grite desde la sala - ¡ANGELS! - volví a gritar, escuche un "voy" y luego vislumbre a Dina asomarse al pasar unos minutos por las escaleras con el cabello alborotado, algo normal en ella.

— ¿Que? - me respondió con la voz pastosa, seguramente estaba durmiendo.

— ¿Donde carrizos dejaste mi mazo? - le pregunte, cruzando mis brazos, esa acción por muy pendejo que parezca me dolió.