Cap. 32. Medicinas

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Skylar p.o.v

Hace ya unos días que Jesús volvió a Hilltop, Daryl ha recuperado su moto y Morgan está haciendo una especie de cárcel. Eugene y Abraham han salido de expedición. Yo voy a salir ahora también, con Daryl, Rosita y Denise, que se le ha antojado.

-Eh mm- dice Denise- Daryl, creo que desembragas antes de tiempo, conduzco desde los 15 años, sobretodo camionetas antiguas como esta, digo antes de irme de casa, me enseñó mi hermano asique sé hacerlo- miro a Rosita y las dos ponemos los ojos en blanco.

-Daryl- digo cuando veo una rama gigante en medio de la carretera.

-Ya- contesta- tú no te bajes Denise.

-Ahí hay uno- dice Rosita.

-Ya le veo- aparto unas ramas y veo a un caminante aplastado bajo el árbol- el árbol estaba podrido- saco mi machete y mato al caminante.

Rosita abre la puerta de la camioneta y Denise sale.

-La camioneta no puede pasar- dice Daryl- vamos andando.

-Pues vale- digo y tras un rato decidiendo si ir por las vías o por la carretera decidimos ir por la carretera aunque Rosita se va por las vías.

Tras un rato andando nos encontramos a Rosita sentada, esperándonos. Retomamos el camino, yo un poco más adelante con Daryl y Denise y Rosita atrás.



Llegamos a una tienda llamada "Edison", Daryl golpea la puerta, no se oyen caminantes, Daryl y Rosita abren la puerta y Denise y yo nos quedamos atrás.

Cuando entramos a Denise le empiezan a dar arcadas.

-¿Nos enseñas lo que has desayunado?- dice Daryl con sarcasmo.

-Gachas- dice Denise- ya lo sabes.

La verdad es que hay de todo un poco en esta tienda, casi todo accesorios y llaveros.

-Eh- dice Rosita.

-Farmacia- dice Daryl.

Daryl intenta abrir la puerta con la palanca pero no puede. Después de un rato lo consigue. Hay todo tipo de medicinas.

Rosita, Daryl y yo saltamos el mostrador y entramos, nos lo llevaremos todo.

Oímos ruido y nos paramos.

-Solo hay uno- digo yo y seguimos metiendo las medicinas en las mochilas.

Denise se choca con una estantería y tira algo de cristal.

-¿Qué haces?- dice Rosita.

-Nada- dice Denise y se va.

Cuando salimos nos la encontramos sentada, llorando.

-Eh- digo para llamar su atención- has hecho bien en traernos aquí.

Denise asiente con la cabeza y se levanta. Volvemos a Alexandría, Denise y Daryl van hablando pero yo estoy sumida en mis pensamientos. Nos desviamos y vamos por las vías.

-Aquí dentro hay una nevera- dice Denise señalando un coche.

-Ya tenemos lo que queríamos- dice Rosita.

-No, no vale la pena- dice Daryl.

Denise abre la puerta del coche y el caminante se abalanza sobre ella, corremos a socorrerla pero Denise le mata primero. Después vomita. Abre la nevera, solo hay refrescos.

-Podrías haber muerto ¿Entiendes?- digo yo.

-¿Y qué más da?- dice Denise- vosotros pudisteis morir atacando a los "salvadores" pero estáis vivos, para vivir hay que arriesgarse, así va esto y eso he hecho yo.

-¿Por unos refrescos?- dice Daryl.

-No, solo por este- dice Denise sosteniendo una lata naranja.

-Oye ¿De verdad eres tan estúpida?- dice Rosita.

-¿Y tú?- se encara Denise- hablo en serio ¿Y tú? ¿Tenéis la menor idea de lo que ha sido esto para mí? ¿De lo que es para mí? Yo he entrenado para esto, no he improvisado según viene como dar puntos o la cirugía y...- mira a Daryl- dije que vinieras conmigo porque eras valiente y como mi hermano y a veces haces que me sienta segura- mira a Rosita- a ti te lo dije porque estás sola, puede que por primera vez en tu vida. Sois inteligentes y muy buenas personas y si no lo...- una flecha se clava en el ojo de Denise que cae al suelo muerta.

Levanto mi rifle y empiezo a apuntar, a donde sea, el arco lo dejé en casa. 12 hombres salen del bosque.

-¡Soltad las armas!- grita uno de los hombres y bajamos nuestras armas cuando vemos que tienen de rehén a Eugene.

-Vaya, vaya- dice el que tiene a Eugene, un hombre rubio y con media cara quemada, mira a Daryl- ¿Algo que decirme?

-¿Daryl?- digo pegada a él.

-Vaya- dice el hombre- si se parece mucho a tu novia, yo diría que son clavaditas, no hablas mucho Daryl- el hombre hace un gesto con la cabeza y nos empiezan a cachear, me tocan por todas partes: los brazos, los pechos, el abdomen, la cintura, el culo, los muslos, las piernas y los tobillos. Daryl les mira con un odio reflejado en su cara que no había visto jamás. Me fijo más en el hombre, lleva la ballesta de Daryl. Me quitan mi rifle, el cuchillo también lo dejé en casa, en cambio llevo un machete que también me quitan.

-Aún no la controlo bien- dice el hombre refiriéndose a la ballesta- da buenas coces pero...

-Debí matarte- dice Daryl.

-¿Qué dices?- dice el hombre- no he oído lo que has dicho.

-Debí matarte- repite Daryl.

-Sí- dice el hombre- estoy de acuerdo, pero aquí estamos y ahora te lo preguntarás ¿Quién empezó esto? Bueno ya sé que no tienes más que mi palabra pero, no estaba apuntando, como te he dicho, da buenas coces, no es nada personal, oye no es así como nos gusta hacer los negocios, pero fuisteis vosotros los que os pusisteis burros.

-¿Qué queréis?- digo mientras entrecierro los ojos.

-Lo siento guapa pero no he oído tu nombre- dice el hombre- yo soy D, o Dwight, como prefieras, decidlo ¿Cómo os llamáis?

-Skylar y esta es Rosita, ahora sí ¿Qué queréis?

-Bueno Skylar, no te diré lo que quiero, si no lo que tú, Daryl y Rosita haréis- dice Dwight- nos dejareis entrar en vuestro pueblo, parece un sitio precioso y después nos dejareis llevarnos todo y a los que queramos- aprieto los puños- o le volamos los sesos a Eugene y luego a vosotras y luego a él, espero que no haga falta, de verdad, no tiene por qué morir nadie más, solemos empezar con uno, así nos expresamos con contundencia, asique como lo hacemos, vosotros veréis.

-Si quieres empezar por alguien- dice Eugene- puedes empezar con nuestro amigo, el que se esconde tras esos barriles, se lo merece mucho más que nosotros.

El principio del fin (Carl Grimes y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora