El frío mañanero se comenzaba a sentir, las luces de las calles ya no estaban encendidas por lo que dicha habitación pasaba a ser iluminada por la clara luz del día. Sentía su cuerpo caliente, a pesar del gran frío que hacía su cuerpo estaba totalmente cubierto y como si de un fantasma se tratase, un exaltado JongIn abrió sus ojos deshaciendo cualquier lazo con la persona que yacía a su lado. Chanyeol dormía, cualquiera que le viera se enamoraría de él con sólo verle dormir y más al tener un semblante tan tranquilo, el cual sólo se veía cada vez que sus ojos se cerraban.
Un suspiro fue lo único que se logró percibir, la mente del menor era un lío en ese momento, pero una parte de él se sentía tan tranquilo al notar que todo estaba en su lugar; el mayor estaba a su lado, con él.
Su mirada se desvió hacía la mesita de noche que estaba a un lado y frotándose los ojos, tomó con rapidez su móvil para ir revisando con urgencia cada uno de los mensajes de textos que compartía con el más alto. Todos eran de hace tres días, conversaciones comunes en dónde Chanyeol le preguntaba que si quería algo de cenar, que si le extrañaba tanto como él lo hacía, que si había comido, que si había descansado lo necesario, entre otras. JongIn no entendía y volviendo su vista a aquella mesita, notó una botella de agua junto a un vaso y unas pastillas, ¿Qué había pasado?
"Hasta que despiertas. Ya me estaba asustando, creí que debía ir en busca de alguien para que viniera y te despertara, ¿Cuánto más pensabas tenerme así?". Comentó un soñoliento Chanyeol, abrazándose cariñosamente a la cintura de su ahora despierto novio.
"¿Qué ha pasado?". Cuestionó el menor, dejándose abrazar gustoso. Aunque sí, aún no comprendía nada.
"¿No recuerdas?". Chanyeol no deshizo en ningún momento el abrazo, solamente se enderezó para poder mirar el rostro frente al suyo con una ligera risita debido a la expresión de confusión del menor. "Mh... Te desmayaste cuando estábamos entrando al edificio. Claramente me asusté y creo haberte oído decir que te dolía demasiado la cabeza. Llamé a un médico y vino a revisarte. Dijo que no me preocupara, que sólo tenías agotamiento y debías descansar, dejó unas pastillas que dijo que te harían dormir, pero era necesario que las tomaras y eso fue lo que hice, te las di y ya luego dormiste, hasta hoy".
JongIn seguía con su cara de confusión y el mayor no le ayudaba demasiado, ya que ahora había comenzado a reírse un tanto más fuerte, por lo que no dijo nada y sólo le dio un pequeño golpe en la costilla con su brazo derecho, ¿Realmente toda esa historia de que su relación había terminado, sólo había sido un "sueño"?
"Entonces, ¿Cuánto tiempo he dormido?". Preguntó dirigiendo su atención al mayor, jugueteando con los mechones de cabello que descendían por la frente de éste. "Ah, todo es raro".
"Casi dos días. Ayer no despertaste, aunque hacías gestos extraños, como si estuvieras triste y aunque traté de despertarte, no lo conseguí. Luego pasé el resto de la tarde observándote para ver si hacías algo, pero siempre fue lo mismo". Chanyeol se sentía como un bebé, las caricias en su cabello le relajaban bastante y más ahora que se sentía más aliviado al tener de regreso a su pareja.
"Entonces sí lo soñé... pero era tan real todo. Incluso tu cabello estaba largo y cuando regresaba y cuando dijiste que... y las cartas, ah".
El mayor de ambos no entendía lo que el menor mencionaba y éste sólo comenzaba a estresarse con esa situación. Aún no caía en cuenta de que todo lo había soñado, pero ¿Cómo fue que todo resultó ser tan real? La única prueba era su teléfono móvil, pero no había nada de lo que él creía que había pasado. Sólo estaban los mensajes de Chanyeol, esos que le decían que por favor se cuidara y no se exigiera demasiado como siempre lo hace, pero ninguno era de alguna despedida o algo similar.