MARVEL One - Shots

Steve Rogers

"Regresa."

Advertencia: No

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— Se separaron... ¿no lo sabias?

Mi mirada estaba en blanco, mi corazón estaba roto ¿Dónde estaba él?

— Escapó.

Volví de nuevo en si.
¿Dónde está? ¿Cómo está? ¿Por qué no me dijo nada? 
Maldito Rogers.

— Sabes dónde está?— pregunté recibiendo sólo silencio.
— ¿Fury, dónde está?— no soportaba que no contestará, lo necesitaba, dijo que volvería... solo detendría a Tony y regresaría a mi lado, conmigo. Lo prometió.

Me levante lanzando mis poderes alrededor de la sala, estaba furiosa... estaba sola otra vez, Steve era el único que me entendía, la única persona que me importaba, ¿a dónde pudo haber escapado? Ahora no solo estaba furiosa, estaba triste. Me sentía sola, como si me hubiera abandonado, mintiendo con la promesa que se iría por poco tiempo y regresaría.

Ya había pasado un mes, un mes sin verlo, sin sentirlo, sin besarlo. Lo extrañaba, no lo podía ocultar ni mentir al respecto.

Llegue a la puerta de mi departamento, y noté que la puerta estaba abierta.
— Mierda.— susurré entre dientes, alguien había abierto la puerta mientras yo no estaba. La abrí lentamente a la vez que con la otra mano sacaba mi arma de mi pantalón. Mientras hacía estas dos cosas, parecía que el tiempo iba lento; la puerta no había sido forzada. Entre completamente a mi departamento. La unica persona que tenia las llaves era...

— ¿María?— dijo Steve levantandose del sillón.

Mis ojos se inundaron de lágrimas. No me podía mover, estaba completamente inmóvil; viendo cada de sus movimientos, los quería memorizar por si se volvía a ir. Lo extrañaba demasiado, ¿Cómo negarlo? Mi vida entera frente a mis ojos.

— Te extrañe dema..— lo interrumpí estampando en su cara mi mano con una cachetada. — Esta bien, tienes todo el derecho de estar enojada... tarde en cumplir lo que te prometí.— fue entonces cuando mi corazón reaccionó en vez de mi cabeza y lo besé. Todo mi amor resumido en un beso, una acción. Lo amaba, no había duda. Lo necesitaba más de lo que pensaba. El beso fue interrumpido por la falta de aire. Separamos nuestros labios juntando nuestras frentes.

— Sabes que esta vez no te dejare siquiera alejarte un metro de mí, ¿cierto?— dije abrazándolo por la espalda, el apretó mi cuerpo contra el de él mientras besaba con delicadeza mi cabeza.

— No intentare alejarme.— susurró para después sentarme en el sillón.

Esa noche dormí sobre su pecho, sabía que esta vez no volvería a irse de mi lado.

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Estoy aburrida y comencé a arreglar todo los errores ortográficos que tenía y a mejor la estética de la escritura. Claro que no lo cambie todo así que confórmense con lo qué hay, chao los amo.
Aunque ya no suba nada jaksjsj
06/04/Cuarentena