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El silencio marcaba su determinada presencia, sus labios permanecieron sellados durante todo el transcurso. El de cejas prominentes no podía evitar sentir cierta incomodidad, sin embargo lo entendía, no era un buen momento para bromear o debatir sobre algo. El noruego no estaba de humor, y casi podía distinguir sus ojos cristalizandose por momentos.

Sin duda, sería un largo viaje...



-Me sorprende que aún no me hayas sermoneado- habló por fin el de cuernos.

-Pensé que te molestaban.

-Ahora si que necesito razones para no instalar una bomba en la oficina de ese imbécil.

-Tampoco se me ocurren razones para no hacerlo, incluso yo lo desearía. Solo puedo decir que no es el mejor momento.

-¿Cómo no lo va a ser? En un principio me pareció atractiva la idea de regresar a la armada, por supuesto, mientras no amenazaran con explotar la ciudad entera en caso de no ir.

-Entendelo, están en alerta, saben que mínimo lo tenes en consideración. Podrás estar con él, pero aún no.

-Es fácil para vos que estás todo el día con Patryk.

No contestó, y de todas formas no había mucho que decir.

Tord comprendió el significado de ese silencio, resignado, dio un pesado suspiro cerrando sus párpados.


Y así, la noche no tardó en llegar, encendió su móvil esperanzado a que el británico no lo haya bloqueado. Para su fortuna, incluso estaba en linea.


¿Tom?

Se rápido.
Tengo mejores cosas que hacer.

Estoy seguro de eso.

¿Cómo pudiste engañarnos tanto?
¿Enserio? ¿Cumplir tus metas en la ciudad?.
No pense que "tus metas" eran ir a una armada comunista.

¿Y enserio crees que quería irme?

¿Cómo no, commie?.

Te prometo que volveré...
Solo, por favor, teneme paciencia.

Por supuesto, te volveré a ver cuando bombardees el país en la tercera guerra mundial.

Es estúpido explicarlo ahora.

Entonces no me hables nunca más.

Si así lo deseas, no te molestaré más.
Debo irme, buenas noches.


El británico lanzó con odio el celular, dijo cualquier cosa menos lo que en realidad quería. Se había alegrado tanto al ver su mensaje, pero claro, tenía que arruinarlo. ¿Y si realmente no lo hablaba nunca más?.

-Sos una mierda, alguien de digna a preocuparse por vos y lo tratas así. Como si no fuera a conocer a alguien mejor...- murmuró observando su reflejo en un pequeño espejo que poseía.

-TOM, SI NO VENÍS NO ME HAGO RESPONSABLE DE QUE TE QUEDES SIN COMIDA- gritó Edd.

Por insultarse a si mismo no pensaba quedarse sin comida, sin embargo antes de abandonar la habitación, decidió tragarse su orgullo y tecleó en el chat:

No quise decirte todo eso, por favor no dejes de hablarme.

[No se acostumbren a los capítulos serios xd]

Hechizado|| [TomTord] (Terminada) (Final de mierda alert)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora