Capítulo 63 - Enemigo Oculto

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Capítulo 63

Un Enemigo Oculto

-¡jajajaja esto es genial! ¿¡Cómo lo hace jajaja!?

-¡su alteza por favor le dije que no saque la cabeza por la ventana!

Íbamos camino al palacio real y aunque debería estar hablando de dinero con la princesa esta no paraba de emocionarse por todo y hasta nos preocupó a todos por salirse por la ventana mientras íbamos rápido en una calle recta

"actúa como una niña con juguete nuevo..."

me hubiera gustado regañarla pero debido a su estatus tengo la obligación de mostrarle respeto así que por lo pronto le susurré a Daniel que la mantuviera quieta, el automóvil obviamente cuenta con cinturones de seguridad pero no sirven de nada si se tira por la ventana... La verdad es que pese a lo mucho que agradezco que la princesa apareciera simplemente quiero cerrar el trato de una vez e irme a casa, en especial porque esta princesa es demasiad hiperactiva en inconsciente, podría lastimarse y preferiría que lo hiciera después de haberme pagado

-¡oye oye que tan rápido puede ir esta cosa! -dijo la princesa

-bueno, es mucho más rápido que cualquier carruaje común y podría sobrepasar a un caballo normal pero un jinete a toda velocidad sería más rápido

La primera vez que hicimos pruebas de velocidad me gustó mucho el resultado y de hecho el prototipo llegó a ser más rápido que el producto final, sin embargo le pedí a Yael que redujera la velocidad punta debido al desgaste de las piezas en movimiento y la alta posibilidad de volcarse, hasta le pedí que hiciera más ancha y pesada la base para evitar esto

Pese a que era de noche aun no era ni la media noche por lo que había bastante gente en la calle y como era obvio llamamos mucho la atención, algunas personas se asustaron mientras que otras intentaron seguirnos por curiosidad, los más persistentes lograron seguirnos hasta el palacio pero no pasaron del portón vigilado por los guardias. Nunca había estado dentro de los muros del palacio pero había visto el interior algunas veces al pasar por el portón principal, no había mucho que ver puesto que en lugar de tener un gran jardín o un camino de estatuas simplemente había un gran espacio vacío, es como si alguien hubiera construido una enorme plaza con un suelo embaldosado y en medio hubiera puesto un palacio. Una vez dentro por fin pudimos detenernos tranquilamente, al bajarnos la princesa comenzó a fijarse más detenidamente en el exterior del vehículo mientras desbordaba emoción

-parece que le gusta no es así su alteza? -dije

-¡me encanta! ¡Definitivamente lo quiero!

-¡por supuesto su alteza! ¿Qué tal si hablamos del precio?

-¿Qué tal 80 monedas de oro?

-¿¡Que!?

-eso costó mi último carruaje, tenía adornos de oro pero eran horrorosos, este me gusta mucho mas, ah quizá es muy poco? ¿100 monedas entonces?

No me podía creer la cantidad que estaba ofreciéndome, era mucho más de lo que habría esperado conseguir en la subasta y por supuesto el más sorprendido fue Yael quien estaba a punto de cometer una estupidez

-n..no ¡su alteza eso es dem...!

-¡eso es justo lo que iba a pedir! -interrumpí -¡después de todo es único en el mundo!

"¡Yael cierra la boca!"

-¡perfecto pues iré a buscarlo y regreso!

La princesa se metió al palacio para buscar las 100 monedas de oro lo que me dejó pensando en algo, ¿con cuánto dinero viajan las princesas? Seguro que llevan consigo un cofre lleno de oro y joyas...

Reencarnado en una Niña ElfoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora