Flirt. Nuevas Especies.

Capitulo 18.

La puerta se cerró un poco fuerte por lo que me desperté, me fije de inmediato en que no era mi habitación y recordé lo sucedido la noche pasada. Antes de preocuparme por flirt me pregunte porque estaba en la cama si me quede dormida en el sillón de cuero, recuerdo muy bien que ahí me acomode. Otra cosa importante era porque un brazo rodeaba mi cintura y porque algo duro largo y grueso se apretaba en mi trasero.

-¿Buenos días? –Me dijo, al parecer temiendo mi reacción.- Oye nena.. Sientes mi erección, es tu culpa por decir que no tenías bragas bajo el puto vestido.

-Ja! –La verdad me hizo gracia, no me sorprendeque solo haya escuchado eso- ¿Cómo es posible que solo recuerdes eso?. Te dijemuchas cosas importantes. Me ofendes por no recordar todo lo que te dije, erancosas muy especiales que deberías de recordar, idiota. Ahora, apártate de mí,no necesito tener tu erección clavada en mi trasero.

Cuando se apartó, me puse boca arriba para sentarme pero el se colocó sobre mi, el estaba desnudo y pude ver su pecho casi sano, no tenía ni puntos y la cicatriz fresca no estaba cubierta por ninguna gasa. Descendió a mi y cuando fui a apartarlo de mi tomo mis muñecas.

-¿Qué crees que haces?

-¿Qué dijiste que no recuerdo? ¿Por qué tu habitación huele a un macho? Y por último pero no menos importante ¿Por qué no llevas bragas?

-Primero –Le dije, ya estaba enojada. ¿Era mucho pedir una relación llena de calma con el? No podíamos estar untos al parecer siempre terminábamos peleando. Mi hermana diría que es atracción sexual no satisfecha.- Quítate de encima. Segundo, que mi habitación huela a un macho no es asunto tuyo, al igual del porque no llevo bragas bajo el vestido. Y lo que dije lo puedes olvidar.

El olor a macho en mi habitación se podía explicar, hace unas noche Greene se quedó durmiendo en la casa conmigo, no estaba permitido pero nunca se fijaron en esas cinco veces que se quedó conmigo, la última fue hace unos dos o tres días, por lo que seguía su olor en la habitación no ventilada, además de que tenía ropa de Él conmigo. Flirt no tenía por qué pedir explicación sobre eso y yo tampoco se las daría solo para complacerlo.

Lo de las bragas bueno, ya sabemos que fue porque Salí de la casa apresurada, asustada y azorada. A la par de nerviosa.

Intente moverme de nuevo y la reacción de el fue besarme, obvio que al principio me resiste y no me iba a rendir, hasta que me hizo cosquilla en la cintura y me reí, aprovecho ese momento para enredar su lengua con la mía. Un poquito resignada me fui rindiendo y comencé a seguirle el juego, el me soltó cuando me tenía donde quería, mis manos se quedaron sobre la almohada y las de el viajaron por mi cuerpo, gemí cuando me tomo de la cintura, donde el vestido estaba amontonado, y comenzó a acercarse a mi centro, como pude uní las piernas y voltee el rostro para dejar de besarlo.

-No flirt.

-Pero que hi...

-Nada –Le respondí con un tono normal, necesitaba salir de aquí, de debajo de su cuerpo- Tengo que hacer unas cuantas cosas de los niños, te veré luego.

El no se apartaba de mi, solo me miraba esperando no se que y yo solo miraba a otra dirección, sentía sus labios rosando mi mejilla pero no se movía de lugar.

-Necesito hablar contigo. –Me dijo.

-Otro día ¿Bien?

-¿Me dirás quien es el macho y que fue lo que dijiste que no escuche? –Negué con la cabeza- Nena, no hace falta que te diga que me tienes loco, que te siento mía y desde ayer todo eso se intensifico. No quiero llegar y entrar a tu vida para hacer de ella lo que me de la gana, pero si eres mía no quiero otros machos en tu vida.