I'm in [WinkDeep]

Capítulo 2

Para suerte mía, cuando llegué a casa, mamá estaba hablando por teléfono con una amiga, así que me ignoró por completo y no me regañó por la hora que había llegado. Por lo tanto saqué una manzana de la refrigeradora y me fui a mi habitación. Últimamente he tenido mucho sueño y no pude evitar quedarme dormido enseguida.

Abrí los ojos pesadamente, anoche por el modo en que me dormí apenas toqué la cama, así que no me tomé la molestia de cerrar las cortinas, por eso ahora los tenues rayos de sol entraban por la ventana y me daban de lleno en la cara. La pereza que sentía en mi cuerpo era infinita. La semana recién estaba empezando y yo ya quería faltar, para que lleguen las vacaciones aún quedan varias semanas y no me queda de otra que resignarme y seguir asistiendo a la universidad.

Miré el reloj de mesa y aún faltaba 5 minutos para las 7 de la mañana y mis clases eran a las 8, pero no tardaría mi mamá en venir a despertarme. A decir verdad habíamos desistido de la idea de que yo tenga un despertador porque ya he dañado como 10 de esos. Mi despertar no es tan bueno y delicado por eso cuando escuchaba ese maldito sonido lo tiraba contra el piso o la pared, a donde sea que apunte aún en mi letargo, y mi mamá optó por la opción de que ella sea quien me despierte.

Ni que le fuera a lanzar un golpe a ella.

Hay veces que estoy en la casa de Jinyoung y una llamada en su celular me despierta, y la mayoría de las veces quien lo llama es Myungji, ya he tenido algunos problemas con él por el sonido, incluso le dañé un celular porque lo arrojé contra la pared de su habitación. En mi defensa diré que estuvimos teniendo sexo toda la noche y el día anterior no había podido dormir porque tenía que concluir con mis tareas de la universidad, así que cuando comencé a sonar lo agarré y lo arrojé, en esos momentos yo simplemente no estoy en mis 5 sentidos así que no me doy cuenta de lo que hago. De hecho, me volví a dormir luego de eso y un fuerte grito fue lo que me despertó. Jinyoung gritó mi nombre muy fuerte que me resultó imposible no despertarme ante eso. Después vi su mirada muy oscura y fue cuando reaccioné, miré hacia la pared y luego observé el piso y el celular yacía destrozado sobre él.

Sonreí al recordar eso. Jinyoung no me habló por 2 días hasta que le fue difícil estar sin sexo y me buscó de nuevo, su castigo fue un poco cruel ya que me estuvo torturando y no me dejó correr hasta que él se haya cansado de usar mi cuerpo como le diera la gana. Pero él se compró un celular mejor del que tenía y ahora lo cuida mucho porque se dio cuenta que yo no destruí su celular a propósito en un ataque de celos, como creyó al principio, sino que así soy con cualquier aparato que me despierte, porque también le he dañado 2 despertadores pero esa historia no es importante ya que no sé enojó.

Incluso ahora me sorprendo que ayer no lancé su celular cuando me despertó pero mi cuerpo estaba entumecido que no podía no moverme, y cuando me despabilé y reaccioné fue que noté la llamada que estaba entrando en el celular, por eso opté por arrastrarme en la cama para poder observarlo.

Seguí dando vueltas en mi cama esperando a que aparezca mi mamá, hoy pude despertarme solo y eso de por sí, es un milagro. Supongo que mi cuerpo no estaba tan cansado ya que ayer dormí en la banca de ese parque, que por extraño que parezca, no me resultó incómodo.

—Jihoon, despiértate —mi mamá abrió la puerta de mi habitación—. Báñate y baja a desayunar.

Sabía que mamá no me perdonaría ni 1 minuto, es tan puntual como uno de esos malditos aparatos despertadores. Con toda la pesadez del mundo, me levanté y me dirigí al baño.

Después de 15 minutos de haberme bañado, vestido y arreglado para ir a clases, me encuentro desayunando. El trayecto a la universidad son 20 minutos, razón por la cuál no me apresuro en comer. Papá también baja a desayunar y nos metemos en una afectiva conversación familiar.