MADAME ORGASMOS

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El tiempo transcurrió como manda la ley de Dios amar a nuestros prójimos como a nosotros mismos, pero ¿Qué haría ahora la Madame? Llevaba su batalla interna día tras día y más cuando sus pies se empezaron a hincharse y sus sentidos se agudizaron, al principio quería volverse loca pero no podía permitirse eso, cargaba con sus problemas internos pero al final sus misma libertad y salvación crecía en su cuerpo. Habían pasado 6 meses y si vida a partir de aquel día cuando James se macho no tomo su rumbo normal, lo que antes había sido un hermoso abdomen plano se convirtió en un abdomen abultado y tras pensar y pensar se dio cuenta que con el único que se acostó sin tomar anticonceptivos y sin condón fue con nada más y nada menos que con James y ahora esperaba en las cuatro paredes de su desván el día que le tocará dar a luz.

La tarde estaba fría por la capa blanca y fría de nieve que cubría la ciudad, Isabelle se abrigo bien pues estaba cansada de estar en casa y estirar las piernas de vez en cuando no afecta a nadie o eso dicen. Caminaba por las aceras viendo las familias en los restaurantes, las parejas en sus autos, veía la vida transcurrir, una vida completamente ajena a ella. Estaba embarazada pero con un amargo nudo que no podía tragar en su garganta  ¿Qué le haría el señor Bond cuando diera a luz? ¿Qué pasaría con su bebé? Se preguntaba así mismo con un gran dolor y pesar en su pecho mientras abrazaba a su pequeño mundo dentro de ella, primero moriría ella antes de que le pusieron un dedo encima a su pequeño hijo.

Tras caminar unas cuadras paso por enfrente de una librería y allí vio un titular y un nombre que provocó que sus ojos se achinaran "Madame Orgasmos por James..." fue lo que alcanzó a leer antes de que sus ojos se llenarán de lágrimas, sin dudarlo dos veces se introdujo a la tienda, compro el libro y se quedó a leerlo en uno de los cómodos sillones que habían en la misma.

-Recuerdo cuando vi a Madame, fue el momento exacto entre decidir vivir o morir ¿Sabes que elegí yo? Vivir para morir por ella- Leyó en voz alta mientras secaba las lágrimas que recorrían sus mejillas- Es cierto que es un prometedor escritor- Pensó con una gran sonrisa en el rostro oliendo las páginas de aquel libro u de alguna forma revivió 6 meses atrás-