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Jimin sabe que Yoongi le dio a Jihoon la autorización para invitarlo de vuelta, pero todavía se siente incómodo y nervioso mientras se acerca a la puerta. No está seguro de lo que va a ser ver a Yoongi, o cómo debe actuar, y, oh Dios mío, ¿y si él abre la puerta? Jimin no sabe lo que va a hacer. Él realmente suspira de alivio cuando Jihoon es el que lo deja entrar, sonriendo emocionado y dándole un golpe amistoso en el
hombro derecho antes de tirar de él en un abrazo rápido.

"¡Finalmente! ¡No te he visto desde nunca!"

"Estuviste en mi casa hace cuatro días", dice Jimin mientras sigue a Jihoon adentro.

"Sí, pero, tu habitación no tiene aire acondicionado y es asquerosa," Jihoon responde, mirando a Jimin mientras sube las escaleras.

Jimin se detiene en el escalón inferior por un momento, distraído por la visión de Yoongi dormido en el sofá. Aunque sabía que Yoongi, de hecho, vivía con Jihoon, no había previsto verlo tan rápido. Normalmente, Yoongi está fuera o encerrado en su habitación. Aparte de en las cenas familiares, Jimin raramente lo veía por la casa, incluso cuando eran amigos falsos y amigos cercanos. Había una división específica de Jihoon y Jimin, y Yoongi y Jimin, y cuando Jimin estaba con Jihoon, Yoongi estaba, la mayoría del tiempo, durmiendo en su habitación.

Yoongi se ve hermoso cuando está dormido, como Jimin se había dado cuenta hace algún tiempo, pero al verlo ahora le trae una oleada de sentimientos que Jimin pensaba que habían desaparecido. Es extraño. Él los ha experimentado todos, en diferentes momentos y en diferentes intensidades, pero es la primera vez que entiende, y jod-

"Hey," Jihoon le llama desde el rellano, "¿vienes?"

Jimin mira a Jihoon con sorpresa y asiente con la cabeza. Le lanza una última mirada a Yoongi antes de subir las escaleras y entrar en la habitación de Jihoon.

Están allí por sólo unos minutos antes de que Jimin estalle. "Creo que estoy enamorado de tu hermano".

Jihoon no parece sorprendido o molestado por la declaración, simplemente sigue jugando con el juego en sus manos, "Tal vez deberías decirle eso a él, en lugar de a mí."

A Jimin no le había ocurrido esa idea.

"¿De verdad? No creo que sea una buena idea."

"Él no vino a casa llorando después de que vuestra falsa relación se acabara por nada", Jihoon no llama a Jimin un idiota, pero sus ojos lo dicen fuerte y claro.

"Sí, y probablemente me odia", dice Jimin, y pensar en eso hace que su estómago se apriete dolorosamente.

"Estoy bastante seguro de que no te odia", afirma Jihoon.

"¿Y si él dice que no?" Jimin se detiene.

Jihoon le da a Jimin esa misma mirada cansada, la mirada de eres-un-idiota-y-no-sé-ni-por-qué-me-molesto que tanto él como Yoongi han perfeccionado, "Él no lo hizo la primera vez."