Muy temprano en la mañana, antes de que pudiera salir el sol ella se despertó y se arregló lo más rápido que pudo y salió en busca de su amiga. Volvió al lugar de la noche anterior, donde encontró su zapato favorito, el cual escondió para que nadie pudiera verlo, y llamarla para ver si esta ocasión si respondía o aparecía.
Llego cuando apenas iba saliendo el sol, al bosque aún seguía muy borroso, casi no podía ver por la niebla y siguió el camino que su amiga la enseño, llegó al río y busco el zapato que había encontrado, estaba justo en la orilla del río, mojado y un poco lleno de tierra, y musgo. Lo sacó de entre unas piedras y empezó a caminar por toda la orilla gritando su nombre "MEREDIT" y diciendo que había encontrado su zapato rojo, pero ella jamás contestaba, la única respuesta que obtenía era el sonido del río corriendo y el eterno silencio del profundo bosque, en ocasiones escuchaba ruidos extraños como pasos o ramas que se rompían, creía que era el viento pero también podía ser otra cosa.
Estuvo todo el día recorriendo el bosque, pero sin meterse en sus profundidades ya que, según las historias de Meredit, en ellas habitaba un monstruo temible, su historia iba así:
Un día un leñador iba pasando por el borde del río, esa noche fue la más fría que jamás se había visto, la niebla era mucho más espesa que otros días y era casi imposible de ver, el iba con su farol en la mano derecha y sus herramientas, principalmente su hacha, en la mano izquierda, iba muy confiado pues nunca nadie había oído hablar de aquel feroz monstruo, se dice que esa noche el leñador quiso saber como eran los árboles de lo más profundo del bosque y no siguió el camino ya marcado, pero, dejó sus cosas ahí exepto su hacha, se la llevo empeñada en su mano derecha y prosiguió a paso veloz, llegó a una zona donde los árboles eran enormes, medían lo que un coche de ancho y el se ilusciono con cortar uno de esos bellos árboles, sacó su hacha y puso el lado más afilado en el árbol, cuando de repente se escucharon unos pasos, las ramas se rompían con forme se movía el viento y todo el bosque se empezó a mover, las ramas de los árboles tronaban y chocaban unas con otras, los animales desaparecieron de repente, pero los pasos seguían, al leñador no le importó lo que sucedía a su alrededor y prosiguió a talar el árbol cuando por sorpresa sintió una mano en su hombro, el volteo ligeramente lleno de miedo y cuando vio a los ojos a la bestia se desmayo. El monstruo lo cargo todo el camino de vuelta y lo dejó en el río, la corriente lo llevó hasta un lugar en donde muchas mujeres salen a lavar la ropa.
A la mañana siguiente las mujeres lo encontraron y lo llevaron al médico, estaba desmayado por el miedo y cuando despertó sintió un horrible dolor en la mano, la levanto para ver que era lo que sentía y empezó a gritar como loco al ver que su mano derecha había sido cortada, cuando vio a detalle la herida supo que había sido con su propia hacha. Indignado y molesto decidió ir de nuevo al bosque para enfrentar a aquel monstruo que le había quitado su mano y su hacha, fue en la noche, cuando apenas atardecia y se llevó otra de sus hachas, siguió el camino que había tomado la última vez y en poco tiempo llegó a aquel lugar, a lo lejos vislumbro el mismo árbol que quería cortar y fue empuñando su hacha con la mano izquierda pero antes de poder tocar el árbol de nuevo empezó a moverse el bosque, ahora el sonido de las aves retumbaba por todos lados, las ramas se rompían y caían a su alrededor y cuando puso su hacha en el árbol justo a su lado calló algo, al voltear a ver que era se espantó y soltó su hacha dejandola caer al piso, bajo la mirada y ahí estaba su mano, aún llena de sangre, el retrocedió asustado y tropezó con una de las raíces de aquel árbol, intentó pararse pero las raíces empezaron a jalarlo, no podía escapar y cuando miro arriba para tomar aire vio de nuevo al monstruo y nunca jamás se volvió a saber de él.
Muchos dicen que el monstruo le arrancó la cabeza y se llevó su mano como recuerdo.
Otros dicen que en ese mismo árbol se ve la forma del leñador dentro aún de las raíces.
Pero lo que si podemos decir es que jamás volvió de aquel bosquecillo.

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El monstruo dentro de Anna
Mystery / ThrillerAnna es una niña de 12 años, cuyos sueños son demasiado raros y varios psicólogos no han podido saber que es lo que sucede, pero todo cambia desde que lo dejan libre.