Adiction [XiuHarem]

Huyendo

Al día siguiente de mi día de descanso, cuando volví al club, al primero que me encontré de frente, sin yo quererlo para nada, fue a Luhan, iba a haber venido con Baekhyun, pero el había salido antes de casa para ir a comprarse unos pantalones nuevos por que había roto sin querer los suyos una noche que al volver a casa no lo hizo en las mejores condiciones.

-¡Baozi!-Le escuché gritar mientras entraba al club para el ensayo- ¡Que ganas tenía de volver a verte!

-¿Que es Baozi?- Le dije intentando descubrir ya el porqué del mote- Y apenas te conozco de ayer, no lo hagas sonar como si nos conociésemos de toda la vida y no nos hubiésemos visto en años.

-Es un tipo de pan chino, es redondito y esta relleno, una delicia, como tu-Me dijo y me sentí ligeramente dolido, como si me estuviese llamando gordo, cosa que aún tenía demasiado fresca de mis años de estudiante-Y respecto a lo otro hay que cambiarlo, yo quiero conocerte as Baozi, quiero que seamos más cercanos...

En ese momento tuve suerte y Baek apareció junto a otro par de chicos que también estarían en la actuación de hoy. Nos tocaba ensayar y hoy era mi día de cantar también por lo que el ensayo era indispensable, no me lo podía saltar. Además, era la excusa perfecta para huir de Luhan.

Rápidamente fui hasta mi camerino, compartido con Baek y me cambié de ropa, por un pantalón de esos cortos que nos obligaban a llevar sin ropa interior debajo y que estaban hechos de un material casi plástico que simulaba ser cuero, polipiel barata... y luego otra de esas blusas transparentes de gasa, blanca hoy, que enseñaban todo incluso siendo de manga larga de lo transparentes que eran. Después me puse unos de esos tacones altos con los que al principio sufría muchísimo pero a los que ya me había acostumbrado, y es que al menos, los más bajos eran de 7 centímetros, y eso destroza la espalda...

Fui hasta el escenario con tranquilidad cruzándome con algunos compañeros por los pasillos que iban con ropas similares o aún más provocativas, casi todos ellos con tacones, bueno...al menos los que funcionábamos como pasivas para la clientela...

En el escenario me esperaba Baek para indicarme lo que me tocaba cantar y bailar hoy, junto a tres muchachos más, y otros dos en una esquina excesivamente musculados que supuse serían los del pole dance de hoy, ya que era la temática de hoy para la actuación especial de las 12 de la noche. A mí me tocaba actuar desde las 9 hasta las 11 solo hoy, y luego dar servicio de camarero, cosa que haría a lo largo la semana, en su mayoría, hasta que se me curase la herida.

Mientras calentaba mi voz y ensayábamos algunas canciones vi a Luhan observándome de una forma bastante indiscreta, lamiéndose el labio inferior como si yo solo fuese su presa, cosa extraña teniendo en cuenta que la apariencia del chino era incluso de ser más pasiva que Baek, y eso ya era decir. Terminamos el ensayo en cuanto llegaron Sehun, y otro de los encargados, Jackson.

-Chicos, a partir de hoy os tenéis que lucir bien para la subasta de la semana que viene, sé que muchos lleváis esperando esta oportunidad al no ser escogidos hace seis meses en la última, pero puedo decir con confianza que esta vez hay el doble de personas atendiendo la subasta-Dijo Sehun- Y casi todos, o todos, los que queréis salir, podréis hacerlo.

-Además- Dijo Jackson, que ahora era rubio, ya que la semana anterior era castaño, y la anterior pelinegro- Debo recordaros que el salir con un contrato a largo plazo significa mayor dinero, pero no mayor comodidad, ellos serán vuestros amos y amas, y debéis obedecer en todo para poder ganar ese dinero, y ni siquiera os planteéis escapar, no quiero tener que recordaros lo que pasó la última vez que uno escapó del amo inadecuado. Si queréis abandonar, hacedlo antes de firmar un contrato.

Tragué ante esas palabras, imaginándome los millares de errores que podría cometer y los millares de posibles escenarios fatídicos. Sin embargo podía comprender a la perfección por qué muchos de ellos estaban tan entusiasmados con la idea. Era una posibilidad de salir del club y vivir una vida completamente diferente, en algunos casos hasta de ensueño si te tocaba un amo bueno, además que eran muchos ceros añadidos a la cuenta bancaria, pero a mí me asustaba, no me veía tan preparado como para quedarme en manos de cualquier cliente durante meses.