Adiction [XiuHarem]

A la deriva

Cuando llegó la noche Sehun me llevó primero a casa para cambiarme y recoger a Baek y D.O y luego nos llevó al pub. Aún era bastante pronto pero Sehun tenía que organizar cosas y Baek y D.O tenían que ensayar, pues esa noche actuaban. Yo mientras rato me quedé en el camerino, intentando dormir un poco, pero más bien muriéndome de los nervios y la tensión al saber que hoy conocería al tal G. Dragon y me tendría que ir con él.

Mi mente a su vez divagaba hacia el hombre de la noche anterior, queriendo creer que GD era él, ya que yo nunca llegué a saber su nombre. Sinceramente creía que si ese era el caso iba a ser una semana muy entretenida, porque ese hombre también causaba estragos en mí, casi tanto como lo hacía Sehun, y eso que Sehun lo hacía tras haber estado mucho tiempo conmigo, no como este hombre que acababa de conocer...

Rápidamente pasaron las horas hasta que abrió el pub, y yo salí a ejercer de camarero mientras actuaba Baek restregándose como buena puta en Kyungsoo, quien también zorreaba con ganas en el escenario, ambos prestando atención a las señales que les hacía Sehun de vez en cuando indicándoles si había cliente ya o no.

Baek fue elegido rápidamente por un nuevo cliente del pub, pero que al parecer era otro de los conocidos del jefe y este le había recomendado al hombre a mi querido amigo y compañero. Kyungsoo sin embargo simplemente acabó el espectáculo y se puso a servir conmigo, diciéndome que Kai ya había reservado la noche y que llegaría más tarde.

Yo me mantuve nervioso todo el tiempo, casi pensando en ciertos momentos que no me iban a llamar y que no me iba a ir a ningún lado, pero esa extraña esperanza se fue inmediatamente cuando Suga se acercó a mi mientras esperaba en la barra.

- Te llama el jefe- Me dijo con su rostro aparentemente de póker, pero que se notaba mínimamente preocupado- Dice que ya llegó tu cliente y está esperando a que vayas allí.

-Ya voy- Dije un poco miedoso y mire a Sehun que me observaba desde la barra- Me voy a despedir de Sehun.

Sehun se acercó a la vez que yo lo hice y me besó lentamente como despedida, saboreando cada rincón de mi boca como si fuese la última vez que nos fuésemos a ver.

-Buena suerte- Me dijo y me dio un último beso en los labios

Tras es volví a donde Suga me esperaba

-Buena suerte esta semana- Me dijo- No te preocupes mucho y disfruta, se acabará antes de que te des cuenta.

-Gracias- Le dije y le di un beso en la mejilla que el me devolvió en los labios junto con un agarre del culo.

Fui al despacho del jefe intentando ocultar mi nerviosismo inútilmente, pues estaba temblando como un flan, hasta que llegue a la puerta y me di un par de golpes en la cara para despejarme y luego llamé y entre cuando me dio permiso.

Nada más entrar no vi al jefe, sino que vi a otra figura sentada en uno de los sofás frente a la mesa del jefe. Su silueta se me hizo familiar, y cuando se giró sentí mi corazón dar un salto, era él, el hombre de ayer, aquel que hizo que me temblasen las piernas solo con un beso, él era G. Dragon, y suspiré de felicidad, estaba tan o más bonito que ayer y para mí eso era suficiente para que todo a mí al rededor desapareciese, importándome solamente lo que tenía delante de mí, y eso era GD, con esos ojos tan expresivos y esa sonrisa juguetona que tanto me encantaba, era ciertamente una obra de arte ese muchacho, una obra maestra cincelado por los dioses e infundido con la mayor cantidad de virtudes que un ser humano pueda tener.

-¡Xiumin!- Escuche de pronto a mi jefe sacándome de mi ensoñación- Deja de estar en babia y siéntate.

Hice como me dijo, aunque mis ojos siempre acababan mirando a G. Dragon, quien sonreía incluso más orgulloso al ver lo idiota que me quedaba al mirarle.