Solo tú

Capítulo 1

-¡Mmm!- gimiendo en la boca de un moreno mientras lo besaba - ah...no, espera - mansajeando las nalgas del rubio, sumiendo su dedo en la entrada del otro aun con su ropa de siempre - ¡Z-zoro te digo que pares!-

-¿Qué pasa?- diciendo con esa voz ronca que lo vuelve loco.

-A qui no lo hagamos nos escucharan todos.-

-Entonces hare todo lo posible para que no gimas- con una sonrisa pervertida y sabia el rubio que el moreno lo haria en donde quieran que estén, no le importaba las personas que hubieran pero él siempre se lo hiba a ser.

- <<Este idiota, como le hará para que no gima si sabe que grito a morir>> - pensaba nerviosamente aunque le gustaba la idea.

-Sanji- diciendo su nombre y acercándose a sus labios para depositarle un beso demandante, le encantaba ver a su pareja rindiendose ante él, haciendo batallas de lenguas para ver quien ganaba y la derrota se fue hacia el rubio.

Agarrandole la cintura y llendose hacia las piernas para alzarlas y ponerlas en su cadera teniendo mas probabilidad de apretarle las nalgas, caminando y topandose con la pared dejando los labios y dirigiéndose al cuello para deborarlo mientras que le va quitando el traje de la parte superior.

Mientras que el moreno hace su trabajo él rubio le apretaba los hombros ahogandose con sus gemidos para que nadie los escuche, sintiendo como le besaba un pezón y el otro lo pellizcaba- bastardo...no ahg no hagas eso- él otro no le hacía caso y se fue hacía el otro pezón pero estabes mordiendolo- marimo idiota.

-Pero bien que te gusta que haga esto- cuando termino de hablar él rubio lo hiba a insultar pero se escucho la puerta abrir y entraron dos personas.

-¡¿Donde estaran esos dos?!- decía una pelinaranja un poco molesta por no encontrar a Zoro y a Sanji.

-Calmate Nami de seguro deben de estar abajo uno tomando sake y el otro con un cigarrillo- estabes era una morena alta de cabello negro- dejémoslo y vallamos a divertirnos-

-Esta bien- se fueron las dos para la fiesta-

Ellos se mantuvieron callados aunque él moreno provocando al rubio para que se le saliera un gemido y lo escucharan.

-Acaso quieres que nos descubran- decía molesto por lo que estuvo haciendo su pareja.

-Sabes que me encanta meterme en problemas-

-Si pero no lo hagas con mí...aaah-

Le había metido un dedo en su entrada no se dio cuenta por la mini discusión que tu vieron- ah...marimo espe-

-Solamente relajate- moviendo su dedo en circulos y lento para que no le doliera tanto al otro, viendo como suprimia sus gemidos, ya que vio que se había acostumbrado metio un segundo dedo haciendo que le doliera un poco.

-¡Me duele!-

-Solo un poco mas y ya- metió un tercer dedo emitiendo embestidas en este, paso un poco de tiempo y los saco- ¿listo?-

-Sí- preparandose a lo que viene se agarro un poco mas fuerte sintiendo como el pene del otro rozaba su entrada y comenzaba a entrar- ¡Aaaah! ¡Mmm!-

Zoro vio como su pareja estaba por gritar con el dolor que sentía hací que le tapo la boca y para que se distraiga comenzo a frotar el miembro del rubio viendo como se concentraba y se calmaba un poco- calmate muy ¡ahg! muy pronto lo vas a gozar- lo metía lentamente y ya cuando estuvo todo dentro se quedo esperando para que el otro se acostumbre.

El rubio movió sus caderas en señal de que ya podia seguir, las embestidas eran lentas, se combinaba el dolor y el placer en ese momento, Zoro le quitó la mano de la boca para escucharlo.

-No grites as todo lo posible en hacerlo silencioso ¿entendido?-

-Ssi- suspiro- ah mmari... marimo mas rápido-

-¿Cómo se dice?-

-Mas rápido...joder mas ra-rápido porfavor-

-Sorisa- como tú digas mi príncipe- las embestidas se volvían mas fuertes y placenteras el dolor se había ido ahora solo queda disfrutar.

-Ah ngh mmm- haciendo todo lo posible para callarlos- ¡nyah! ¡mmm! ... Ah ¡aah! ¡Zoro!¡Ghn!-

-Idiota- le tapa otra vez la boca viendo como la saliba comenzaba a escurrir por su mano- <<¡Maldición!>>- lo besó y absorviendo la saliba de éste saliendo un poco de la comisura de los labios de los dos.

Las embestidas eran rápidas el rubio ya iba a llegar al clímax igual que el moreno pero antes de eso quería econtrar ese punto.

-¡Mgh!... ¡Nh! ah ¡¡¡Aaah!!!- su cuerpo comenzó a temblar y su voz se hizo un poco aguda, tratando decontrolarla.

-Lo encontre, se siente bien ¿verdad?-

El rubio asintio con la cabeza- solo tú me haces sentir así...-

Continuará.