Sedúceme [+18]

Jennifer Ross 11

Salgo del restaurant hecha una furia, dejando a Samantha y Stefan detrás de mí. Pero de que me ha visto la cara ese imbécil, si el muy sin vergüenza me mintió sobre Samantha, que se cree este payaso que yo soy una de sus putas y que no me molesta que se va con otras y para el colmo parece que el muy idiota parece que quedo en el mismo restaurant con esa animal cuadrúpeda.

Sé que tal vez me estoy ahogando en un vaso de agua pero es muy complicado con todo lo que pase entre mi padre y mi madre y jure que aunque sea un ligue de una noche, este tiene que estar libre en todo el sentido de la palabra.

Pero en esto me tienen que dar la razón. Por Dios, cualquier chica que me diga que no le importa que llegue una tipa a su mesa mientras, almuerzas con el chico que le gusta diciendo: "Hola Amor " y lo bese en la boca, justo cuando, minutos antes este te estaba tocando de una forma MUY INTIMA por debajo de la mesa. Primero, le digo que deje la de fumar hierva mala, segundo que se tome una dosis de autoestima.

Ok, Sé que no es un caso muy normal que tu cita te masturbe en uno de los restaurantes más caros de california, pero lo importante es que entiendan el punto.

Cuando estoy fuera del restaurant me pongo aún más furiosa por que recuerdo que fue el estúpido de Stefan que me fue a buscar y no tengo el auto aquí, decido salir caminado mientras pido un taxi no vaya a ser que se digne a salir a buscarme, pero que idioteces estoy pensando si debe estar de lo más feliz con Samantha.

Espero al taxi una cuadra después del restaurant, cuando lo veo llegar me monto inmediatamente en este y le digo que me lleve directo a Avon. Todavía sigo pensando en lo cínico que es ese tal Stefan y lo que me da más Rabia es que me allá visto la cara de pendeja si eso no se lo permito a nadie creo que fue el momento en que me sentí más humillando de mi vida, como se le ocurre invitar a dos chicas al mismo restaurant una hora después de la otra. ¡Ja! pero le salió mal el cálculo, el colmo seria que me llame después de eso y como si el mundo conspirara ahí mismo noto que mi celular comienza a sonar y veo en la pantalla el nombre de Stefan, le cuelgo mandándolo directo al buzón de voz y silencio mi celular para que no me moleste si vuelve a llamar.

Llego a Avon en unos 20 minutos, entro por las puertas dobles y me dirijo directo hacia mi oficina, decido que aunque mi almuerzo con Stefan allá sido un fracaso no voy a permitir que mi trabajo se valla a la mierda. Trabajo por las próximas 3 horas, tomo mi celular y veo que tengo 22 llamadas perdidas, 48 mensajes y 12 mensajes de voz. En ese mismo momento veo que Joshua llama y le contesto.

-Hola, Joshua.

-Hola hermosa ¿cómo estás?

-Bien y ¿tu?

-Oye, te llame para saber si te apetece salir a un beber esta noche- Lo pienso y decido no ir ya que sé que si vamos va todo su combo y eso incluye a Stefan y a Samantha.

-En realidad no, puedo tengo mucho trabajo y me quedare hasta tarde.

-Bien ¿pues nos vemos otro día?

-Otro día será

-Bien, pues cuídate muñeca.

-Bye-digo y luego cuelgo.

Decido tomar un descanso para seguir luego con el trabajo, voy a la cafetería para tomar un café, decido tomármelo allá mismo y me siento en una mesa cerca de la ventana. Ese chico Joshua es muy lindo en todos los sentido pero no voy a seguir saliendo con él ya que si salgo con él me voy a tener que ver en la obligación de soportar a Stefan cada vez que vallamos con amigo a un sitio, con Stefan viene Samantha y yo con esa tipa nada que ver mejor lejos que cerca como la hiedra venenosa pensándolo bien si Samantha y Stefan son los dos cortados con la misma tijera, hipócritas como ellos solos, aunque Stefan me ponga a 1000 voy a pasar de él, pero no antes sin pagármelas por lo que me hizo en el restaurante.