Jennifer Ross 23

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Abro mis ojos, sintiéndome rodeada por unos brazos fuertes. Drake y yo nos encontramos acostados en la cama, yo de espaldas a él, con mi cabeza recostada en uno de sus brazos, y él se encuentra abrazándome por la espalda, rodeándome la cintura con su fuerte brazo, haciéndome sentir en mi espalda el calor de su pecho y su respiración pausada detrás de mí oreja, cosa que me haces saber que todavía sigue durmiendo.

Vuelvo a cerrar mis ojos, y me acurruco más en sus brazos, inconscientemente me aprieta más contra sí mismo, sonrió. Estoy muy feliz.

Lo oigo suspirar, y me aprieta más contra si, como si fuera eso posible. Inmediatamente me comienza a dar un reguero de besos húmedos desde mi hombro, hasta mi cuello. Sonrió aún más.

-Buenos días princesa- Dice con su voz ronca, ya que acaba de despertar.

Antes de que pueda contestar me toma la barbilla delicadamente y me hace girar la cara, para poder besar mis labios. Apoya sus labios contra los míos, tomándolos y dándome un profundo beso, que me hace estremecer entre sus brazos. Me giro entre sus brazos para poder besarlo mejor, y paso mis brazos alrededor de su cuello haciendo el beso aún más profundo de lo posible.

Después de salir del bar ayer por la noche, me traje a Drake a mi apartamento, donde solo con cruzar la puerta nos convertimos en una maraña de brazos y besos. Me encanto estar con Drake, me tomo como si no pudiera saciarse de mí. Drake no comento nada sobre mi extraña actitud al salir del bar, al parecer no se dio cuenta que con el hombre que choco es el socio con la cual tenemos la propuesta

Cuando ya nos quedamos sin respiración Drake se separa de mí lentamente, junta su frente con la mía y mantiene su mano en mejilla, manteniendo sus intensos ojos azules, aun soñolientos, sobre los míos.

Por su cara se extiende lentamente una sonrisa que me hace sonreír también, y tomándome por sorpresa me pequeños besos en los labios repetidamente y de forma juguetona y yo comienzo a reír.

Cuando termina me estiro bajo su cuerpo, ya que durante la sesión de besos yo quedé recostada en la cama y el encima de mí, sin apoyar su cuerpo sobre el mío para evitar aplastarme.

-Mmmm, Buenos muy buenos días- Cierro los ojos y sonrió. Abro el ojo y pregunto-¿Cómo has amanecido?

Me abraza y me besa en el cabello. Se muerde el labio y pone cara de estar pensando.

-Mmmm, ¿Bien? ¡Qué digo! ¡Excelente! Con la mujer más hermosa del mundo en mis brazos, todo un sueño.

Me hace sonrojar. Dios Drake es tan tierno, que me hace querer comérmelo a besos.

-Drake- Capto su atención, lo miro seriamente a los ojos y luego sonrío divertida- Ya puedes dejar de alagarme ya te has metido entre mis bragas- susurro contra sus labio y luego me acerco tomándolo entre los míos besándolo con devoción.

Me toma por sorpresa y comienza a hacerme cosquilla. Comienzo a reír a carcajadas, cada vez más y más fuertes.

-No digas tonterías-Dice Drake entre dientes mientras continua haciéndome reír por un rato más.

-¡Para! ¡Ya! ¡Drake!-Digo entre carcajadas

Luego de un rato, se detiene y me mira con sus ojos llenos de emoción y una dulce sonrisa en su cara.

-Una princesa como tu necesitan que le digan cosas así, y más todos los días.

Me saca una sonrisa de oreja a oreja y llena de emoción. No sé cómo nunca me había fijado en Drake, es la persona más tierna y especial que he conocido. Me hace reír y sentir especial.

Sedúceme [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora