Bajo El Mismo Techo

Capítulo 6

– Eres aburrida. – le dijo Blum a Maggie en cuanto escucharon la puerta cerrarse.

– Ryan me llamó. – reaccionó, con la sola mención de ese nombre, sintió como todo su ser se consumía por diferentes sentimientos. – Parecía que de verdad quería hablar contigo.

–¿Lo hizo antes o después de dejar a Melanie en su casa? – le soltó, ya estaba bastante más calmada, pero aún intentaba controlar ese huracán de frustración con el que había vivido toda la noche. – Fue un asco conmigo hoy. No quiero verlo más.

– ¿Qué hizo para que estés así?

– ¿Borracha?

– No, triste... Aunque borracha también. – ambas rieron.

Blum no era de beber mucho, ya que el alcohol le hacía efecto rápidamente, pero le gustaba beber.

– Me mostró que la eligió a ella. – dijo respondiendo a la pregunta de su amiga. – Vino con Melanie al bar a comer. Yo fui su mesera... Él solo fingió que yo no era la chica que había dicho que quería dos semanas atrás.

– Eso es un asco, pero ¿No crees que hay cosas que quedaron inconclusas entre ustedes?

– Cualquier persona se daría cuenta de eso, Maggie, pero el no sabe lo que quiere. Ya estoy harta de estar detrás de el como una estupida. 

– ¿Y tu, Blum? ¿Sabes lo que quieres?

– No, tampoco. Pero el fue mi mejor amigo ese es el problema.-miró a su amiga con ojos cansados. – Tal vez era mejor de esa manera... Tal vez no quiero que volvamos a ser amigos. Tal vez ya no lo quiero en mi vida aunque estar sin el me destroce.

– Hablenlo, será lo mejor.

– ¡Ey! – habló de pronto Blum haciendo que Maggie se sobresalte. – ¿Qué tal tu cita con Jon?

– Estaba super nerviosa y el llegó un poco tarde pero fue genial.

– Cuéntame qué pasó.

Maggie se contentó de que su amiga preguntara; había estado esperando este momento desde que llegó a su casa.

Le contó todo con detalle. Blum la escuchaba atentamente y estaba muy feliz de que los planes de ella se hicieran realidad de tan buena forma.

–¿Besa bien? – preguntó cuando estaba finalizando el relato. Ya no estaba tan borracha.

– Es... Si, besa muy bien.

– Estoy feliz de que te besara.

– Yo también, y me puse súper nerviosa al principio porque no podía dejar de mirar sus labios y el miraba los míos pero no nos animabamos. Fue muy tierno.Me gusto que fuera casual.

– Si, son tiernos. - la abrazo.- Me alegro muchísimo esperaste tanto para esto y ahora está sucediendo no lo puedo creer. Es bellisimo.

– Exacto. – Hubo un silencio en el que Maggie miró a Blum. – Espera... ¿Realmente querías dormir con Daniel, Blue?

– No me gusta cuando me dices Blue... – se sentía una niña pequeña.

– Lo se, y está bien porque te estoy regañando. Blum apenas lo conoces, no debes irte a la cama con el primero que toca a tu puerta cada vez que Ryan te lastime.

– Técnicamente yo toque a la suya. – Maggie negó con la cabeza y rodó los ojos. – Entiendo tu punto de cualquier manera, estaba triste...

– Estabas despechada. – aclaró su amiga.

Sabía que todo había sido por despecho, parecía que sus ganas de tener sexo aparecían cuando Ryan le rompía el corazón; no era un buen momento para sacar a relucir la historia de cómo dejó de ser virgen, historia de la cual no estaba segura de sentirse orgullosa.