A Pesar De Todo

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¿Que sí estoy viva? si lo estoy pero eso no significa que mi alma lo este. Muerta en vida lo llamaría yo. ¿Qué cómo se siento?, mejor me calló. Cuando vino la ambulancia, mi padre ya estaba muerto de hecho llevaba muerto 3h, él se suicidó. De alguna manera antes de irme al instituto lo sentí, pero me negaba a admitir que él me dejaría sola en este mundo.

Y que iba hacer ahora no tenía hermanos, la familia de mi madre ya no me aceptaban y de la familia de mi padre no se nada, en realidad nunca me hablo de ella. Ahora mismo estoy en el hospital de tanto gritar, llorar y de la mala alimentación de estos días me desmaye. Estoy esperando a Sean que está hablando con las enfermeras de mi estado y yo solo estaba pensando en irme a casa, a mi cama, a llorar hasta deshidratarme. Mañana será el entierro, su deseo era ser enterado al lado de mi madre y así será.

Vi pasar a Isabel con su bata de doctora se percató de que alguien la estaba mirando.

-Hola Brooke cuanto tiempo......¿Que haces aquí?-cuando subí mi mirada, su rostro se congelo, seguro que tengo los ojos rojos e hinchados de tanto llorar.-por Dios Brooke que te ocurre-se acercó a mí y me abrazo que bien se siente un abrazo en este momento.

-Brooke debemos irnos-salto de repente Sean.

-No primero quiero saber qué ocurre- dijo Isabel muy seria, entonces mire a Sean para que le contara yo ahora no podía hablar estaba devastada. Se apartaron de mi lado, para hablar. Vi como a Isabel se le caía una lágrima, que bajaba muy rápido por su mejilla.

Se volvieron a acercar a mi e Isabel me abrazo aún más fuerte que antes.

-Que te parece si vamos a casa y así descansas un poco ,comes algo y te das una ducha.-y ahí es cuando me fijé en mi ropa, estaba llena de sangre por mis heridas y la de mi padre. Mi estómago rugía, me pedía comida. Asentí a lo que me dijo y caminé hacia la salida del hospital yo sola, sentí como Isabel y Sean iban detrás.

-Sean ¿Qué tal si vas a por algo de ropa para Brooke?

-¡Claro!...mándame tu dirección para ir luego a llevarte las cosas-y así lo hicieron intercambiaron números e Isabel mando la dirección - Vale pues en media hora estoy ahí.......Brooke ¿Quieres algo en específico?-negué con la cabeza y me subi al asiento de copiloto del coche de Isabel. Fue un trayecto largo ya que viven a las afueras de la ciudad. Isabel me estuvo hablando todo el camino, pero no escuche nada de lo que me dijo, ya que estaba sumergida en mis pensamientos. Nunca creí que mi padre fuese capaz de dejarme sola, lo hizo ya no tengo a nadie.

Estoy en la habitación del hijo menor de Isabel y Eduardo, es muy acogedora, pero prefiero mi habitación. Donde puedo ver las fotografías de mis padres, me tuve a la cama a llorar, es lo único que puedo hacer.

Isabel vino a mirar mis heridas y me trajo algo para comer. Me dijo que Sea vino con mis cosas y que quería pasar a verme. Yo asentí, quería verlo, se siente tan bien que alguien se preocupe por ti.

-Brooke.....¿Como estas? Ya se que todo lo que está pasando es horrible.....y no quiero que pienses que estas sola, porque no es así. Estoy aquí para todo que necesites, confía en mi.

Y no quiero que cometas ninguna locura- no se qué decir, lo único que hice fue darle un abrazo, fue mi manera de aceptar su apoyo. - Dejo que descanses, mañana estaré contigo en el funeral- me dio un beso en la mejilla y se fue.

Y de nuevo sola, así es como me sentía. Necesito gritar, aliviar el dolor no puedo aguantar me siento miserable en esta vida. Nadie me necesita, Sean, Isabel, Eduardo estoy segura de que hacen por pena, no creo que necesiten un problema más en sus vidas.

Soy un estorbo y una carga. Necesito sentir la cuchilla en mi piel, así que me dirijo al baño de la habitación con mi cuchilla en mano. Mi cabeza decía : "Mi corazón ya está roto cariño, vamos retuerce la cuchilla".