A los cuatro años, Jungkook no era un niño muy sociable. Los niños de su clase apenas notaban su existencia, así que el pequeño vivía en paz en su mundo. A veces fantaseaba sobre cómo sería tener un mejor amigo, alguien con quien pasar las tardes jugando y comiendo fruta. Jungkook no comía dulces, porque su padre le dijo que sus dientes no crecerían bien si lo hacía. Y Jungkook era muy obediente, así que nunca se le pasó por la cabeza desobedecer a su padre.Cuando todos los niños salían al jardín a jugar, el se iba al despacho de su madre. Su madre era profesora en su escuela, por eso Jungkook no se sentía tan solo en las horas libres. Y aunque al principio su madre le dijo que tenía que hacer amigos y pasar menos tiempo en su despacho, los ojos de cachorrito y las lagrimas de cocodrilo acabaron convenciéndola.
Como un día cualquiera, Jungkook se dirigió al despacho de su madre. En las manos llevaba su cuaderno de dibujo, emocionado por enseñarle lo que había hecho en clase. Al estar delante de la puerta, se puso de puntitas y agarro el pomo de la puerta, consiguiendo así que la puerta se abriera con facilidad. Los primeros días le costaba mucho abrir la puerta, ya que sus brazos no eran lo suficientemente largos como para alcanzar el picaporte. Pero Jungkook había crecido este mes, así que por fin podía entrar al despacho con más facilidad.
Cuando la puerta se abrió, se encontró a su madre arrodillada delante de un niño, el cual lloraba silenciosamente. Notó que tenía barro en el pelo y un rasguño en la rodilla. Y aún así, Jungkook pudo ver lo bonito que era debajo de toda esa suciedad.
—Taehyung, necesito que me digas los nombres de los niños que te han hechos esto—habló su madre con un tono suave, el mismo que utilizaba con el cuando lloraba.
Aquel niño no respondió, mantuvo la mirada en el suelo dejando caer las lagrimas de sus ojos. Jungkook abrió un poco más la puerta, llamando la atención de su madre. Se avergonzó, porque su madre siempre le decía que si había alguien con ella en el despacho el tenía que esperarse fuera. Sus mejillas se sonrojaron y se encogió de hombros.
—Jungkook, cariño, ¿porque no te llevas a Taehyung a la enfermería mientras yo hago una llamada?—dijo la mujer con una sonrisa.
Jungkook miró a Taehyung, el cual aún seguía llorando. Jungkook era muy listo, así que sabía perfectamente el camino hacia la enfermería. Se acercó a Taehyung y tímidamente le agarró la mano. El de cabellos castaños miró por fin a Jungkook, con los ojos llenos de lágrimas y las mejillas rosadas. Tiro suavemente de el para que empezara a caminar y Taehyung lo siguió sin rechistar.
Jungkook no quiso soltar la mano de Taehyung durante el corto camino, le gustaba lo suave que era su piel a pesar de estar manchada de tierra. Quería preguntar que le había pasado, pero no quería que el niño bonito llorara otra vez. Cuando llegaron a la enfermería, Jungkook se detuvo delante de el mirándolo con una expresión seria.
Taehyung lo miraba con curiosidad, poco a poco calmando su llanto y limpiando sus lágrimas. Taehyung era demasiado hermoso como para llorar, pensó Jungkook. Recordó lo que hacia su madre cuando el estaba triste y pensó que si lo hacía con Taehyung este ya no lloraría. Así que se inclinó y rápidamente dejo un beso en su frente.
Jungkook pensó que solo había empeorado las cosas cuando vio que Taehyung lo miraba sorprendido, así que prefirió salir corriendo antes de que el niño se pusiera a llorar.
Lo que no sabía es que ese beso sí que había funcionado, y Taehyung llevó una sonrisa en su rostro el resto del día.
🐰
Llevaba diez minutos corriendo por el vecindario y ya sentía que le faltaba el aire. Estaba dispuesto a empezar a hacer ejercicio diariamente, harto de sus brazos flacuchos y su plano torso. Si quería que Hoseok lo notara, tenía que cambiar su aspecto a uno más atractivo.
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FAKE BOYFRIEND ✧ kookv
Fanfiction❝ Necesito que finjas ser mi novio ❞ En donde Jungkook finge ser el novio de Taehyung. fake boyfriend | © bistaec romance | fluff | kookv [150917]