El despertar de Devon

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-Maldito - grito la joven mientras corría en dirección del hombre mientras esté hacia lo mismo.

-No saldrás viva - mencionó el hombre mientras tras se relamia los labios al verla - No sabía que eras extremadamente sexi - dijo propinándole un golpe a la chica haciéndola caer.

- Estúpido - escupió la chica mientras limpiaba la sangre de su boca - ¿Eso es todo lo que puedes hacer? - provocó

- Te sorprenderías al enterarte querida - dijo el hombre aún victorioso.

La joven se puso de pie y sacando de su cuerpo armas filosas corrió al hombre con intención de hacerlo trozos pero para su desgracia el logró esquivar la mayoría y dejándole algunos cortes en el cuerpo, el hombre se enfureció al ver que no había salido intacto, quería atacar pero algo se lo impidió, la chica lo tenía sujeto con la lengua como minutos antes pero esta vez no perdería el tiempo así que lo tenía del cuello apretándolo con gran fuerza mientras que poco a poco ella se elevaba hasta quedar a su misma altura, su rostro denotaba irá cuando miro al hombre el cual sonreía de una manera perversa

-Adios querida - pronuncio el hombre distrayendo a la joven mientras que clavaba sus garras en el brazo de la chica dejándole varias marcas donde salía sangre negra y la chica gritaba de dolor, el hombre aprovecho el descuido y la debilidad de la joven y el propinó un golpe directo al estómago dejándola sin aire y soltandose por fin, tomó a Luz del cabello y con gran fuerza la lanzó al suelo para después bajar y pisarle la cara.

-¿Unas últimas palabras? - pregunto el hombre en son de burla -Que lástima morirás tan pronto, quería divertirme aún más pero- haciendo una pausa - Eres una maldita perra que no dejaba de joder, así que muere - gritó el hombre mientras sacaba sus filosas garras y las dirigía al pecho de la chica.

La joven sonrió al ver como el hombre estaba dispuesto a atacar y después solamente cerró los ojos.

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Luz:

Ese maldito bastardo hijo de mierda sonreía de manera victoriosa, estaba claro que me atacó de una buena manera pero obviamente no iba a acabar así, no podía permitir que me matará dejando sola a Franky con esos dos, me prometí cuidarla y cuidar a las chicas y Devon bueno el estaba inconsciente le habían hecho un gran daño aunque realmente era extraño ¿Estaba muerto? No, no podía ser sierto el era un demonio poderoso casi se podría decir que estaba apunto de convertirse en la mano derecha del señor y de su futuro hijo Maikol, ya no podía hacer nada mi cuerpo realmente estaba herido me dolía hasta el alma tenía una sola oportunidad de atacarlo, ese perro iba a morir junto conmigo.

Mi mente trasaba un plan mientras él hablaba con esa sonrisa estúpida en el rostro y su pie hundía mi rostro.
Mire como estaba dispuesto a atravesarme sus asquerosas garras y lo ví, ví una luz resplandeciente de tras del el que me transmitía una paz y ví a otro hombre de esa misma luz de tras del primero que lo tomaba por el hombro, no sabía quienes eran y que hacían aquí pero estaba en paz mi cuerpo se sentía relajado, como si todo estuviera bien, como si no hubiera pasado esta maldita escena y me encontrará con mi mejor amiga en el mar tomando el sol.

Así que me deje llevar por esa paz que abundaba en mi cuerpo inmóvil cerré los ojos, queria morir recordando bellos momentos y dormí.

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Devon:

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