-¿En verdad nos iremos?- la pregunta ya hace días que se repetía en a que ya casa.
-Te he dicho ya muchas veces que si- el jefe de la familia respondía con cansancio- lo tenemos que hacer, me han ofrecido trabajado en otro lugar, tenemos que ir.
-¿Sabes el daño que le causaras a tu hija? Hace poco mas de un año su llegamos aquí, y ahora nos iremos, ¿Como se supone que se lo diré?- la pregunta se quedo sin respuesta cuando su hija entro a la sala, viéndolos con un poco se extrañeza, preguntándose que pasaba- Hija....
-¿De que hablaban?- su voz, con un poco de molestia, se hizo presente. El silencio reino en la sala, siendo mas que una respuesta para su hija- ¿Cuando me lo dirían?- ahora su voz con molestia pregunto.
-Hija....
-¿¡Quieren que de nuevo abandonar lo que tengo!?-los gritos se hicieron presentes en a que ya habitación.
-No es algo que podamos decidir, tenemos que ir por mi trabajo
-Siempre tu trabajo es el mas importante, ¿acaso te importa lo que tengo aquí? No te importo antes, como te iba a importar ahora.
-Es una orden, nos mudaremos en un mes- hablo en padre con una voz autoritaria que cayó a Valeria y a su madre.
La orden estaba dicha, su mudarían en un mes, sin posibilidad de volver.
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Besos sabor café
RandomSus miradas se cruzaron, sus cabezas pegadas y sus manos un poco separadas, ambas sabían lo que querían, ambas tenían miedo. Con movimientos lentos sus manos se fueron acercando hasta que se tocaron y el frío se convirtió en algo cálido, algo que no...
