Sin Aliento.

Capítulo 10

¿No han sentido que lo tienen todo en un instante, que es tan perfecto, tan magnífico que el mundo se podría acabar allí mismo y estarían satisfechos de haber disfrutado de ese momento? Pues yo sí, justo ahora, admirando esos ojos azules que se iluminan al verme.

Nunca me sentí tan a gusto, tan en el lugar correcto...

- Buenos días pequeña - Me sonríe con ternura esa perfección hecha mujer.

- Buenos días - Me acerco dándole un delicado beso sobre sus labios, saboreando ese gusto dulce y adictivo que tiene...

¿Cómo pasó el tiempo tan de prisa?

Hoy era mi último día con mi diosa particular, no sabía como sentirme, sinceramente no quería alejarme, era ridículo ya que antes de ella todo estaba bien, ahora mismo siento que sin ella nada lo estaría... Más bien es simple: No quiero un después de ella.

- ¿De nuevo a la luna? - Pregunta acariciando mi mejilla.

- Sin duda, alguna de esas que hay en el universo de tus ojos... - Abre la boca levemente y se sonroja.. ¡Oh si! No tengo idea de donde salieron esas palabras pero me daré una palmadita por ello.

- Wow - Ríe nerviosa... ¡Es adorable! - Yo, eh.. ¿Pedimos algo para desayunar?

- Creo que nunca te había visto tan nerviosa - Me levanto, olvidando por completo que estoy desnuda, dejando mi torso al alcance de su mirada que no pierde tiempo en devorarme...

- Ciertamente creo que nunca me había puesto así jamás - Se muerde el labio inferior y sin disimule recorre cada parte de mi piel descubierta.

- ¿Te gustan las vistas? - Sonrío, no puedo evitar ruborizarme pero no me cubro como suelo hacer...

- No lo dudes... - Se acerca y me besa - Creo que tú serás mi desayuno - Se lanza sobre mi, empieza a dejar suaves mordidas en mi cuerpo que me hacen reír y excitar al mismo tiempo.

- ¡Oh Dios para! - Estoy que lloro de risa por sus ataques, ella se detiene y me mira detenidamente, pasa la yema de sus dedos por las facciones de mi rostro, acariciando con lentitud, como tratando de memorizar cada detalle... Mi corazón empieza a latir desbocado, creo que incluso ella puede sentirlo porque tiene esa sonrisa tan increíble que llega a sus ojos.

- Eres tan hermosa pequeña que si le pidiera al mejor artista que me hiciera un retrato tuyo, nada alcanzaría a trazarte tan perfecta. Creo que ni las memorias de ti en mi cabeza pueden hacerte justicia. - ¡Señoras y señores podría ir al circulo cromático a sustituir al rojo y nadie se daría cuenta!

- No se como me dices algo como eso así sin aviso - Me tapo la cara, ella quita mis manos y me da un beso que me hace flotar.. Si, ella es talentosa.

- Solo te digo las cosas que me causas pequeña, realmente es una locura si lo piensas... Llevamos poco de conocernos, aunque siento que es desde hace mucho más, no sé que pensar, no sé si es correcto sentir lo que siento, no sé si es simple ilusión... - La miro intrigada.

- ¿Qué sientes? - Susurro, ella solo me abraza recostándose sobre mi pecho.

- ¿Qué no siento? A veces creo que es una locura mirarte y solo querer tener mis sentidos dispuestos para ti, algo que nunca sentí realmente con nadie.. Es aterrador de cierta manera. - Yo asiento sonriendo.

- No eres la única ¿lo sabes? - Besa el valle entre mis senos y sonríe afirmando. Yo enredo mis dedos en su cabello tirando de ellos hasta tenerla ante mi y besar sus labios.