Somos Distintos [EN EDICIÓN]

8| JUICIO

8| JUICIO

Alysson

Las esposas empiezan a doler más mientras bajamos unas escaleras que parecen nunca acabar.

-¿Qué crees que me hagan? -No puedo evitar preguntarle al chico que Axel llamó Izem. Él se sobresalta, ha estado todo el rato muy callado pero me mira de reojo cada dos segundos con cierto nerviosismo. Yo solo tengo mi típico vómito verbal-. ¿Será algo muy malo o tendrán piedad de mí? ¿me perdonarían? ¿podría pagar fíazan aquí?

Él frunce el ceño, ahí la negación no dicha a mis últimas preguntas.

-A lo prime-mero no lo s-é. -Se aclara la garganta-. La última vez te encerraron en... los calabozos, con eso puedes hacerte una idea de lo que viene.

La sola idea me da escalofríos.

-La ReinaMadre le dijo a Perrie que no iría al calabozo, ese es mi único consuelo. Porque ¿qué podría ser peor?

Él me mira incómodo como pensando en que si debe hablar o no. Escuchamos muchas voces amortiguadas por las paredes cuando nos detenemos frente a una puerta angosta.

-Sabes... eso no debería consolarte.

Lo dice al tiempo que abre y quisiera poder reaccionar pero los bullicios de las personas sentadas en rampas que rodean de forma circular toda la sala se hace mas fuerte al verme entrar y no me permiten pensar con claridad.

-¡No debe estar aquí!

-Su comportamiento es inaceptable.

-¡Debería ir derechito al calabozo!

Izem me guía a un puesto al lado pero que esta mucho más bajo que el que ocupa la ReinaMadre, la cantidad de personas que llenan la sala es aterradora y cada vez siguen incorporándose más y más desde otra entrada. Esto es un juicio, un juicio de verdad y mi corazón se descontrola con cada minuto que pasa, la idea me preocupaba pero ahora me pone los nervios de punta.

-¡Silencio en la sala! -habla un hombre canoso y de piel oscura ya bastante mayor-, ¡orden!

Las personas empiezan a dejar los gritos para pasar a los murmullos y finalmente hacer silencio. El hombre vuelve hablar.

-El día de hoy se presenta por segunda vez el caso de Alicia Harries, por motivos de robo de material privado de la organización, levantamiento rebelde contra la misma y daños al colectivo.

Los gritos indignados de muchos se vuelven hacer presente, ni siquiera me molesto en corregir al pobre viejo por llamarme Alicia en vez de Alysson, las personas están como locas y no creo que haga una diferencia a mi favor.

-Los delitos ya mencionados han sido probados, y cuenta como testigo con el diez porciento de los miembros de la organización, de igual forma se volverán a presentar. Pasé la parte acusadora.

Muchos se quejan mientras otros miran confundidos. Sé que viene la parte fea pero no me imaginé de quién se trataría. Hace un gesto de respeto a la ReinaMadre y me mira.

-La señorita Harries es culpable del primer delito mencionado, robo de materia privada y es algo que se puede comprobar con las grabaciones de esa noche.

Pasan en en el medio de la sala una especie de holograma dónde se muestra lo mismo que ví en el cuarto del tiempo. Lo que grabó las cámaras de seguridad esa noche pero no me fijo en ello, ya lo ví y no será menos decepcionante ahora. Lo que si estruje un poco mi corazón es ver quién está al mando de dicha demostración.