Capítulo 6

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Auschwitz, 20 de diciembre de 1942


Ese día se terminaba Janucá, la fiesta judía, y pronto empezaría Navidad. Como cada día, Caroline se dirigió a los hornos, a continuar con su macabra tarea. Poco después de que Irma le dijo que debía trabajar allí, una guardiana fue encargada de vigilarla. Se llamaba Liesel Fischer, y no era tan mala como los demás guardianes.Era el anticristo de Irma. Eso en privado, claro. En público parecía que no tenía corazón. Siempre que podía le llevaba comida, comida que luego Caroline compartía con Erika, los niños, Stana y Jo. Cada vez que le llevaba algo, se lo agradecía con lo único que le podía dar: palabras bonitas.

Ángeles entre las cenizasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora