Pedazos De Ti...

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Dos días después de estar viajando

Marrie

Habíamos llegado. Les mentiría al decirles que es horrible. Es el lugar más hermoso que jamás había conocido. Se sentía genial, bajarme de aquel avión después de semejante noticia y respirar... Ese aire tan fresco, tan nuevo que me hacia por un instante olvidarme de todos mis problemas pasados y presentes.

Kane a lo lejos  por el area de la piscina se veía hablando con los arquitectos e ingenieros y demás empleados sobre la casa y las cosas que faltaban. Lo que estaba hecho de la casa era bastante, era grande, espaciosa y tenía, terraza, piscina, cancha de baloncesto y una de tenis en proceso , etc, etc. Una mansión con todas las comodidades.

Yo estaba desde la ventana de mi cuarto, observando el panorama. Desde que llegué no nos hemos dirigido la palabra, me he encerrado y solo abro cuando me traen la comida,no me ha tratado mal, en realidad ha estado bastante sumergido en sus pensamientos y eso en cierta parte me preocupa, más porque sé que sabe lo de mi embarazo y no sé qué carajos le pasa por su cabecita.

De la nada volví de estar metida en mis pensamientos y cuando regrese a mi realidad, no me había percatado que me le había quedado mirando y supongo que por mi mirada intensa se volteó a verme y su rostro estaba tan serio, tan sin sentimientos, sin esperanzas a pesar de que tenía todo lo que tenía incluyéndome a mi. No era feliz...

Le quité la mirada de inmediato y entré al cuarto. Estaba en una bata blanca de seda  debajo de ella nada ya que me iba a bañar. Últimamente ahora que sé del embarazo creo por eso es  que me incomoda la ropa, me dan unos calores y una inquietud inmensa.

Entre al baño , quite mi bata, y quede desnuda ante un gran espejo que hay en el baño, toqué mi estómago y sonreí... Pronto sería una pequeña elevación que pronto a lo meses se convertirá en una panza prominente.
Estaba tan feliz tener un hijo de agostte en mi.

- pequeño pedazo de ti... Decía entre mi. Mientras tomada mi panza y la sobaba suavemente. Me metí al baño y el agua llenó mi cuerpo de paz y tranquilidad, mojé mi cabello que ya me va más de los hombros. Lo estoy dejando crecer.

Cuando salí, estaba kane en la puerta...

-te gusta la casa? Me pregunta nervioso.

- Sí, es muy grande y bonita.

- y tu cuarto?

- es demasiado. Le dije mirándolo fijo.

-nada es demasiado para ti. Lo dijo acercándose a mi, tomándo un mechón de mi cabello. Yo no me moví, solo algunas lágrimas se me  salieron. Todo esto era una locura.

-no tienes que llorar. Tienes culpa de que te ame pero no tienes culpa de mi obsesión por ti. Lo comprendo, pero no te puedo dejar ir y eso me obliga a tenerte aquí. Me rehuso a verte con él, a que vayan a tener un futuro juntos y que tengan un hijo al cual criar y amar. Quiero que ese sea mi destino y sí, le robo todo lo que él tiene solo por ser feliz. Por la felicidad que yo no puedo tener.

-Eres egoísta. Y por eso jamás te voy a querer. Me removí de su agarre. No queria seguir teniendo esa conversación sin fundamentos. Maldito

-Serás mía... Y ese hijo también. Me tomo del brazo y me miró profundamente.

-jamás... Me deshice de su agarre. Estaba algo molesta y me dio una punzada en el estómago. Me agaché del dolor y el lo notó. Caí de rodillas al suelo frío del cuarto  y el corrió a recogerme. Me puso en la cama y llamó a la doctora.

-mi bebé. Me decía en silencio...


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