Cap 11 "llamada inesperada y una ida al pasado"

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Narra Eli:

Desperté con una sonrisa en la cara,había pasado una noche fantástica junto a Sam y la verdad no estaba ni un poco arrepentida.Giré un poco la cabeza encontrando a mi chico de ojos color infinito,dormía plácidamente abrazado a mi cintura.Bajé la vista hacia su pecho desnudo y no pude evitar que todo mi cuerpo se sumerja en un cosquilleo momentáneo ,se que lo había visto anoche pero no pude evitar el sonrojo ,recorrí sus pectorales por ultima vez y sin poder evitarlo una de mis manos viajaron hasta su tatuaje sobre su pecho del lado izquierdo y repase cada una de las líneas hasta trazar una caricia constante,levanté la mirada hacia el rostro sereno de Sam,había una hermosa sonrisa que no mostraba los dientes en su rostro acaricie su mejilla y no me pude resistir el dejar un beso que duró mas de lo deseado justo en donde se hundía en un precioso y profundo hoyuelo ,suspiré y decidí levantarme ,debía ir al baño,por lo que giré hasta estar en mi posición inicial, me escurrí con un poco de esfuerzo de entre el abrazo de Sam y me senté en la cama, él apenas se inmutó de mi escape.
Apoyé los pies en el suelo, sentí algo suave, así que me incliné hacia adelante y sonreí al ver una de las camisas de el chico de ojos color infinito, la tomé y me la puse además de mi ropa interior , no pude evitar reír por lo bajo al ver lo grande que me quedaba, arremangué las mangas hasta que quedaron unos centímetros debajo de mi codo, miré a Sam y salí de la habitación inspeccioné el pasillo, no había nadie suspiré de alivio y me dirigí al baño, hice mis necesidades y me giré hacia el espejo, lavé mi cara y mis dientes, peiné mi cabello en un moño despeinado ya lista volví al cuarto encontrando a Sam ya despierto, tenía el cuerpo levemente de costado estaba angustiado, casi podía ver las lágrimas acumuladas en sus ojos multicolor,me preocupe.

-¡Oh Dios! ¿Sam estas bien?-dije corriendo hasta el

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-¡Oh Dios! ¿Sam estas bien?-dije corriendo hasta el.
-creí que te habías ido-admitió en un murmullo apenas audible
-Sammy...-dije acariciando su mejilla, él en respuesta se inclinó mas contra mi mano cerrando los ojos.-no me voy a ir, no podría alejarme de ti-susurré observándolo
-lo sé... pero es que no te vi y entre en pánico-respondió abriendo los ojos para luego clavarlos en los míos y que nuestras miradas se hicieran una sola.

-¡Te quiero!-murmuré con una amplia sonrisa en mis labios -yo también te quiero-dijo en respuesta, suspiró bajando la mirada unos segundos para luego volver a verme-anoche

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-¡Te quiero!-murmuré con una amplia sonrisa en mis labios
-yo también te quiero-dijo en respuesta, suspiró bajando la mirada unos segundos para luego volver a verme-anoche... la pasé muy bien contigo-admitió con una pequeña sonrisa
-yo igual-acomode un mechón de su largo cabello detrás de su oreja y me acerqué hasta que nuestras respiraciones se juntaron y entonces uní nuestros labios en un beso lento y dulce, duró unos cuantos minutos teniendo en cuenta que no era un beso desesperado ni apasionado, luego de recuperar el aire perdido, Sam fue quién me besó esta vez, sin darme cuenta, me fui acomodando sobre el  haciendo que se acueste por completo acaricié el cabello que caía por su nuca, mientras él acariciaba mi cintura. Amaba besarlo, era como un vicio, una droga, algo de lo que podría depender sin darme cuenta, sus besos eran adictivos.
Una melodía un tanto conocida comenzó a sonar, era sugar de Maroon Five, me separé de Sam a duras penas y me estiré teniendo que bajar de encima de mi chico, para alcanzar el maldito celular, iba a matar a quién sea que se atrevió a llamar, pero todo eso se esfumó al ver la pantalla, el nombre Benny rezaba en la pantalla junto a su foto, como me pude olvidar de él había sido mi amigo y compañero desde que comencé a trabajar en el bar, debe de estar preocupado. Suspiré algo nerviosa, por un momento me debatí en si debía o no contestar,cerré mis ojos y los apreté unos breves minutos antes de presionar la pantalla donde aparecía el típico teléfono verde descolgado y lo lleve a mi oreja
-¿Ho-hola?-contesté dubitativa 
-¿Eli?-preguntaron del otro lado-¿Éstas bien?, ¿En dónde estás?-interrogó mi amigo abruptamente
-¡Benny!-saludé-estoy bien, am... estoy-giré a ver a Sam, ya que estaba parada en medio de la habitación, él me devolvió un gesto de confusión-no importa, sólo no te preocupes estoy bien, te lo prometo-aseguré
-Eli, me asustaste-admitió-no venias al trabajo y entonces pensé ir a tu departamento, cuando llegué y no estabas, me asusté, creí que te había pasado algo-dijo angustiado
¡Estoy bien!, sólo tuve que irme de la ciudad...-intenté restarle importancia, no podía decirle lo que en verdad pasó. No sin revelarle la verdad de nuestro mundo, de lo que nos rodea.
-¿Por qué?-insistió, suspiré abrumada, no iba a dejarme en paz hasta que le diera una respuesta que le sirva y le tranquilizara
-¡Joder Benny!-dije fatigada-estoy bien,sólo salí a ver a mi familia-inventé rápidamente, aunque en teoría había ido a verlos, aunque no en las mejores circunstacias, decidir, alejar esos recuerdos  por ahora.
-¿Y volverás?-interrogó luego del silencio que se creo cuando casi le grité que estaba bien.
-no lo sé-miré el piso triste. Él había sido el único amigo que tuve durante mi estadía en ese bar en Colorado.
-pero... ¿Nos podremos ver, aún?
-yo creo que sí,no voy a abandonarte Benny-murmuré-eras la única persona que tenía allá, y te aprecio.
-ahora estoy mucho mas calmado-admitió-bueno, debo hacer algunas cosas, te llamó luego, ¿Esta bien?-dijo rápidamente
-esta bien-acepté-cuídate mucho Cox-bromeé
-cuídate mucho Wright-siguió el juego
-¡Adiós!-me despedí
-¡Adiós!-corté y me quedé unos minutos con el celular entre las manos , observando mi fondo de pantalla, éramos nosotros dos, recuerdo que estábamos en mi casa viendo películas y bromeando.Y lo pensé, quería seguir viéndolo, porque  el era mi mejor amigo y no quería dejarlo.
-¿Éstas bien?-escuché a Sam, mordí mi labio inferior y me giré para mirarlo
-si-susurré dejando el celular en la mesita y acostandome junto a él nuevamente
-¿Quién era?-interrogó-no tienes que decirme si no quieres-agregó rápidamente
-un amigo, Benny, trabajaba conmigo en el bar-expliqué brevemente
-¿Era el tipo de pelo castaño rizado y ojos verdes?-preguntó frunciendo el ceño, voltee a verlo sorprendida
-¿Cómo lo sabes?-preguntó sorprendida
-lo recuerdo de la vez que nos conocimos en el bar
-no estas celoso, ¿Verdad?-pregunté medio bromeando, medio preocupada
-¡No, claro que no!-dijo abrazandome y depositando un beso en mi cabeza
-crees... ¿Crees que podre verlo?-pregunté tímidamente
-¿A tu amigo?-asentí-pues claro, amor-respondió sin pensarlo
-gracias, aunque algo me dice que tendré que ir escoltada por un gigante, ¿Verdad?-levanté la vista para verlo, sonrió abiertamente dejando ver un par de hermosos hoyuelos.
-mmm....deja que lo piense-bromeó a lo que reí
-¿Te dije alguna vez, que eres el hombre perfecto?-pregunté perdiendome en sus hermosos ojos
-¿Yo?, ¿El hombre perfecto?-preguntó señalándose, negó con la cabeza, una sonrisa triste surcó sus labios, tenía la mirada baja-Eli, no soy perfecto, ni siquiera....-se cortó unos minutos-ni siquiera soy puro
-¿Sam, pero que estas diciendo?-pregunté preocupada
-hay algo que no te he dicho-dijo mirando un punto en la pared de enfrente-¿Recuerdas cuando te conté sobre lo que nos llevó a hacer cazadores?-asentí-la razón de la muerte de mi madre, fue porque el demonio de ojos amarillos fue a nuestra casa y-calló unos cuantos minutos, sus ojos se aguaron-me dio de su sangre, no se que pasó luego sólo se que lloré y mi madre apareció, creyó que el que estaba conmigo era mi padre y se fue. Unos minutos mas tarde regresó y el demonio la mató-unas lágrimas se deslizaron por sus mejillas-¡Fue mi culpa!-asintió, guíe mi mano hacia sus mejillas y limpié cada lágrima
-no fue tu culpa Sammy-intenté consolarlo
-si lo fue, si yo no hubiera llorado ella estaría viva y yo-me miro unos segundos, mordió su labio inferior dubitativo-y yo no tendría sangre de demonio-me quedé unos minutos callada, procesandolo,pero mis sentimientos hacia él no cambiaron, por que eso no me importaba en lo absoluto, acaricié su mejilla dulcemente
-no te culpes, eras sólo un bebé-justifiqué-tu no tenías idea de lo que estaba pasando
-lo sé, pero por esa razón decepcione a personas que estimo y a otras las perdí... Eli, mi pasado no es el más limpió que digamos, si fue duro al igual que mi vida, pero esa parte me atormenta día a día.-admitió
-¿Qué podría ser tan malo como para que te atormente?-pregunté curiosa
-conocí a una demonio y ella me chantajeó, me hizo tomar sangre de demonio, solo para que mis poderes, los que tenía gracias a la sangre de demonio se fortalezcan y me volvió un adicto, casi mató a Bobby, jamás me lo voy a perdonar-dijo jugando con sus manos
-sigo diciendo que no es tu culpa, al menos no la mayoría-corrí un mechón de su pelo que estorbaba, me acerque despacio y lo abracé, el se aferró a mi, con mis manos comencé a  dejar caricias en su espalda. No sentía que estuviera llorando, pero sabía que un abrazo no le hacia mal a nadie.

Save me ~Sam Winchester~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora