Desastroso Verano [Completa✔]

7. Lluvia y Historias de terror☀️

2/3 #MaratónDesastroso.

#JuevesDesastroso.

Narra Camille.

Es lunes, son las 3:00 pm, no tenemos nada planeado para hoy por lo que estoy echada en el sofá con mi lapto jugando solitario mientras los chicos disfrutan del verano en la piscina, cosa que yo no puedo hacer.

Puto yeso.

Dejo en la mesa del centro la lapto porque me arden los ojos ya que llevo usándola desde el almuerzo, siento unos pasos así que volteo y me encuentro con Liam goteando agua mientras se acerca a donde estoy.

—Espero que seques eso —digo señalando el piso mojado.

—¿Qué haces sola aquí? –—pregunta ignorando olímpicamente lo que dije.

—Estoy descansando la vista –—explico.

—¿Por qué no sales? —¿Es en serio lo que preguntas?

—No lo sé, creo que un yeso y un pie esguinzado no me lo permiten —el sarcasmo y la obviedad se filtra por mis cuerdas vocales mientras alzo mi brazo y mi pie, él se encoje de hombros como si eso no importara, se acerca a mi y no entiendo que quiere hacer hasta que se agacha y tomas mis piernas montándome en su hombro como un saco de papas mojándome toda la franelilla— ¡Liam Taylor, bájame ya! —exclamo dándole con mis puños en su trasero pero él solo se rie, salimos al patio y pienso que va a tirarme en la piscina pero me deja en una reposadera haciendo que lo mire confundida.

—Pensaste que te iba a tirar a la piscina —asiento a pesar que sonó mas como afirmación que como pregunta— Solo quería que no estuvieras sola adentro —explica.

—Pudiste decírmelo para ahorrarme esto —reclamo señalando mi short de mezclilla y mi franelilla blanca –que esta casi transparente– los cuales están empapado.

—No hubiera sido divertido —se encoje de hombros.

—¿Que se supone que haga afuera si no puedo estar en la piscina? —levanto mi mirada hacia él y sus ojos no ven mi cara sino la forma en la que la franelilla mojada se adhiere a mis pechos— Mis ojos están arriba —él reacciona y mueve sus ojos hasta los míos.

—Molestarlos con las pistolas de agua —sonríe haciendo que en mi cara se plasme una sonrisa maliciosa. Me paso toda la tarde molestando a los chicos y cuando me canso a eso de las 6:00 pm le digo a Liam que me ayude, me lleva de caballito hasta el cuarto, busco ropa y entro al baño, luego de bañarme me pongo un suéter negro y un short rosado con narices de cerditos, bajo las escaleras y mis ojos se iluminan al ver que esta lloviendo y los chicos se están saliendo de la piscina, corro a la cocina para buscar una bolsa y enrollarla en mi yeso para que no se moje.

¿Por qué te vas a mojar?

Porque no voy a desperdiciar una lluvia así.

Salgo de la cocina y esquivo a los chicos que van entrando pero cuando estoy a punto de salir alguien me agarra— ¿A donde piensas ir? —pregunta Adrien mirándome con una ceja alzada.

—En serio preguntas —digo obvia, abrió  la boca para decir algo pero lo interrumpo— El yeso no se va a mojar, déjame salir —pido haciendo ojitos y puchero, el mira a otro lado— Vamos Adrien, sabes que amo la lluvia.

—No y no esta en discusión  —decide severo volteándome para que vaya hacia la sala y me hace quitar la bolsa del yeso— Me iré a duchar y espero no encontrarte afuera —advierte antes de voltearse y subir las escaleras.

Bufo y me quedo parada en medio de la sala pensando en cómo disfrutar de la lluvia hasta que se me prende el foco, corro como puedo a la cocina, abro la ventana y me siento en una silla que coloque mientras disfruto de las pequeñas gotas que caen en mi cara.