Poison ☠ (JiHan) ✨

011 (I confess)

La película avanzaba con ellos sin decir una sola palabra. 

JeongHan aún continuaba recargado con más confianza en el pecho del menor, mientras que Joshua acariciaba su espalda, como si fuese lo más natural del mundo, como si se tratara de algo que ambos ya hubiesen vivido.  

JeongHan descubrió que sus sueños no lo habían engañado: sabía cómo besar a Joshua, como acariciarlo, como disfrutar de su calor.

Entonces se cuestionó si estaba soñando. 

Joshua acariciaba los brazos del ángel cuando él respingaba debido a los screamers de la película, y por supuesto que JeongHan no perdía la oportunidad de buscar refugio en el recoveco de su cuello, disfrutando del calor y de la esencia que desprendía el extranjero. 

Ninguno de los dos estaba concentrado en la película, sino en aquella emoción de estar viviendo aquella sensación reprimida tanto tiempo. 

¿Cuánto tiempo había recreado es escena en sueños? 

Sin previo aviso, JeongHan se giró y envolvió el cuello de Joshua en sus brazos, y nuevamente ocurrió, antes de que la vocecilla en su interior lo detuviera, los labios de ambos comenzaron a saborearse mutuamente. 

El ángel quería corroborar que no se trataba de un sueño del cual despertaría a la mañana siguiente. 

Lo incorrecto se sentía tan correcto en esos momentos. 

La forma en que Joshua apretaba su cintura, el modo en que acariciaba el contorno de sus labios con la lengua, le decía que no se trataba de una fantasía recreada con sus anhelos. 

Se besaron una y otra vez; primero lento y luego revelando aquella necesidad de sentirse mutuamente. 

JeongHan dejó la timidez y mordió el labio inferior de Shua, mientras que él se atrevió a meter las manos por debajo de su playera, contactando directamente con su tibia piel. 

Los suspiros se volvieron jadeos. 

La columna del ángel era una curvatura, su rostro inclinado hacia atrás, su cuerpo suspendido, el cual Joshua sostenía con ambos brazos, mientras intercambiaban un beso más, antes de que los pulmones de ambos exigieran el oxígeno. 

Esta vez fue el rostro de Joshua el que se enrojeció cuando se dio cuenta de que la pantalla mostraba los créditos de las películas. 

Giró para mirar el rostro del ángel, sonrojado también, con los labios ligeramente hinchados y su melena desordenada. 

La mirada de JeongHan cayó con la mirada al suelo, su rostro reflejaba miedo. 

Mientras besaba a Joshua no estaba pensando, pero ahora miles de dudas le atacaron, ¿qué va a pasar ahora? ¿Pretenderían que nada pasó? ¿Cómo se sentía Joshua al ser ambos hombres? 

—JeongHan yo... —. 

—No me digas nada por favor—. 

Las palabras del rubio se arrastraron en los labios de Joshua antes de capturarlos e iniciar un nuevo beso. Éste completamente lento, tranquilo, como el primero. 

Muy en sus adentros JeongHan no deseaba escuchar el rechazo, tenía miedo de lo que fuese a decir Joshua, si iba a rechazarlo luego de haberle dado el beso más lindo de su vida, no estaba dispuesto a escucharlo, no quería una explicación, quería que el tiempo se congelara en aquel momento en que el americano acariciaba sus hebras con mucho amor y sus labios acariciaban los suyos.