Tres chicas contra la adversidad.

14. Complicaciones para pedir una pizza.

(Zzzz...Zzzzz)
Ana y yo nos habíamos quedado dormidas cuando de repente !!!!!!POOM!!!!!!. Entra María dando un portazo en la residencia.
- !Aaaaaaahhhhhhhh! - gritamos Ana y yo al unísono - ¡¡¡María!!!

- ¡Que!, os habéis quedado dormidas pensando el trabajo, anda que... si que soy dormilonas - dijo María

- Ya, y lo dice la que la tienen que despertar todos los días para que despegues la cara de la almohada - le reproché

- Bueno que se le va a hacer, a y por cierto gracias.

- ¿Por? - preguntamos Ana y yo.

- Porque me lo he pasado genial, además he podido conocer mejor a Caleb. Hemos ido a la feria y me ha invitado a un algodón de azúcar, que por cierto estaba riquiiiisimo. ¡Ah! Y he descubierto que Caleb tiene miedo a las alturas, a qué es súper mono.

- Si, supongo- dice Ana

- !Ah!, hemos estado con Andrea tomando algo

- ¿Pero no estabais haciendo lo de tecno? - me preguntó

- Si... bueno, estábamos cansadas y nos fuimos- le respondí.

- Bueno, y...¿que cenamos?

- No se, dímelo tú. Por qué yo no pienso cocinar hoy, que he estado todo el día trabajando.

María miró a Ana.

- Ah, ah, ni lo sueñes.

María bajó la mirada al suelo y se quedó pensativa.

- Y... que os parece mi plan, pedimos unas pizzas, jugamos un rato a la play y a prueba o verdad.

- Me parece bien - le respondí, Ana asintió con la cabeza.

María cogió el móvil y tecleó el número.

- ¿Hola?, me gustaría pedir una pizza vulcano familiar - habló Maria.

- Scusami ma puoi ripeterlo?

- Chicas, no entiendo lo que me está diciendo ¿alguien sabe hablar italiano? - preguntó Maria atónita.

- Yo se un poco, pero muy poco - Me ofrecí.

- Anda, déjame a mi que yo estuve dando clases de italiano- mencionó Ana, María le pasó el móvil.

-Ciao, vogliamo una pizza vulcano - dijo Ana en italiano.

- Non abbiamo una pizza al vulcano (Nosotros no tenemos una pizza vulcano) - le respondieron.

- ¡¿Como?! Si la he pedido miles de veces - dijo Ana indignada.

- Scusami, ma fai un errore. (Perdone , pero se equivoca) Vuoi prenotare?

- Dice que si queremos reservar - nos dijo Ana.

- Dile que queremos servicio a domicilio - le respondí.

- Vogliamo un vulcano a casa (queremos a domicilio una vulcano)

- Che?

- V-u-l-c-a-n-o a casa - le dijo más despacio Ana, yo me estaba partiendo de risa - este chico no entiende.

- Che?(¿que?)

- V - U - L - C - A - N - O

- Che?

- ¡¡¡¡Vulcanooooooo!!!!- le gritó Ana - Me ha colgado

- La que sabía hablar italiano ¿A ver déjame ver? - le quité el móvil.

Estuve mirando en la página en la que se había metido y el número tecleado.

- ¡Has tecleado mal el número María! - descubrí el problema.

- Osiris es verdad - nos reímos.

- Anda que llamo yo - Me ofrecí.

Pedimos la pizza y después nos pusimos a comer. Al terminar, preparamos la play y nos pusimos a jugar. Por turnos elegíamos un juego cada una y quien perdía tenía que hacer una prueba o una verdad. El primero era el Call of Duty, yo perdí y tuve que ponerme a hacer piruetas delante de la casa de los chicos. Después perdió Ana, que jugó al fifa contra mí y no tenía ni pajolera idea de cómo se controlaban los mandos. Y por llegó el juego que estaba esperando el NBA, que llevaba mucho tiempo esperando y se me da muy bien. Esta vez gané yo y María perdió, y le tocó la prueba o verdad.

- María, ¿prueba o verdad? - le reté.

- Verdad - Me respondió.

- Poco atrevida ¿no? - le sonreí.

- Mejor que lo que tú has hecho...

- Por lo menos no me han visto - le respondí. Cogí a Ana de la mano y planteamos la pregunta.

- María, ¿te gusta alguien? - le pregunté. Estuvo varios segundos pensándoselo, cuando por fin respondió.

-  ...No

- Ni siquiera ¿un poco? - le insistí.

- Que no, que no.

- Bueno vale, Ah Ana que no te hemos hecho la prueba a ti.

Le hicimos una prueba, difícil de conseguir. Tardó bastante pero lo hizo, después nos acostamos. Pero como no tenia mucho sueño, puesto que me había quedado pensando mucho en lo que dijo María sobre Caleb, me levanté y me dirigí a su habitación.

- Hola María, ¿estás dormida? - le pregunté tontamente.

- Siiii

- Vamos, que no - Me senté en su cama.

- ¿Que pasa?

- Lo que dijiste sobre Caleb..., el es el novio de Andrea.

- Ya lo sé, solo somos amigos.

- Vale, pero ten cuidado. Podríais ser otra cosa, ademas ya conoces a Ana, ella es su mejor amiga. Se llega a enterar de que le ha pasado algo a Andrea y os lleváis una torta tú, y Caleb.

- No te preocupes, solo amigos.

Le di las buenas noches y me volví a mi cuarto a dormir. Creo que a Ana también le sorprendió lo que dijo María, pero tampoco es que se hayan visto muchas veces.