2| MY ONLY HERO ||teen wolf [ᴍᴏᴅ]

5. Stacy y Clinton

5. Stacy y Clinton.

Samantha

—Apuesto 50 dólares a Ally —aseguré mirando a Scott y Allison escalando el muro.

—Has perdido, mi querida Sammy. Es obvio que Scott va a ganar con su superfuer...

Nuestra conversación se vio interrumpida cuando Scott cae del muro de escalada.

—Has perdido, mi querido Idiota —le susurré en el oído repitiendo sus palabras—. Después te pido el dinero.

—¿Sabes McCall? —escuche la voz de Finstock acercándose a Scotty mientras las risas de todos comenzaron a aparecer—, no sé porqué pero tu dolor me causa una alegría especial. ¡Los siguientes! ¡Pierce, Whittemore!

Oh, genial.

Avance colocándome el arnés rápidamente así me ahorro el tener que subir al mismo tiempo.

Sin embargo, la suerte no me acompaña y Shawn ya estaba listo frente al muro, esperándome.

Oh, genial x2.

—Hola —saludó sonriente y fue imposible no devolverle el gesto—. Tranquila rubia, voy a ir despacio, ya sabes... para no avergonzarte cuando te gane —abrí la boca fingiendo indignación.

—¿Estás insinuando que soy lenta por ser mujer? —pregunté con cierto tono divertido. Este se encogió de hombros ocultando una sonrisa—. Ya verás, Shawncito.

Como si fuera flash me coloqué el casco y comencé a escalar sin miedo. El castaño de ojos verdes me siguió el movimiento.

Íbamos muy parejos. No podía perder.

—Auch —exclamé llamando su atención.

—Oh por Dios, Sam ¿Te encuentras bien? —acercó su cuerpo hacia el mío dejando el peso cargado en una de sus manos. 

—Sí —sonreí y levanté la mirada dejándonos en una leve distancia—, es que... —me mordí el labio y su miraba fue a este para después desviarlos nuevamente a mis ojos—. Me había olvidado del lindo color que tienen tu ojos...

Shawn me observaba embobado su mirada cambiaba de mis ojos a mi boca. 

Cerré los ojos dejándome llevar y... 

...Quité la mano que sostenía la estabilidad de Shawn. Haciéndolo caer rápidamente a la colchoneta.

Sonreí satisfecha por mí actuación al ver que todas las risas inundaban el gimnasio y comencé a descender con lentitud.

Choqué los cinco con Scott debido a que Stilinski drásticamente cambió de humor.

—¡Stilinski, Reyes!

Stiles subió y bajó con facilidad. Al tocar el suelo, inició un baile de victoria bastante raro mientras lo único que en realidad me preocupaba era la rubia desarreglada en el muro quien respiraba pesadamente para luego lloriquear.

—Eh... ¡Entrenador! —llamé.

—Erica, ¿Estás bien? —preguntó el entrenador—. ¿Tienes vértigo?

La cara de Lydia mostró confusión.

—El vértigo es una disfunción del sistema vestibular del oído interno —explicó como si fuera super obvio—. Ella está enloqueciendo.

¿Acaso Lydia se lee Wikipedia todos los días? 

—¡Erica! —bramó Finstock.