¿Sólo sexo?

Key (Parte 1)

Sentí sus manos apretar mi cintura con fuerza pero sin llegar a lastimarme, mientras que su cuerpo me arrinconaba lo más que podía hacia la pared de aquél salón que en esos momentos se encontraba vacío y a oscuras.

Sentí su lengua ingresando a mi boca lentamente, como tentándome, probando despacio mis labios, hasta que reuní valor y dejé que la mía saliera a su encuentro, trataba de seguir el ritmo que me estaba marcando hasta que el aire en mis pulmones comenzaba a escasear, me sentía desfallecer por todas la sensaciones que invadían mi cuerpo, mis piernas estaban temblando como si fueran gelatina, si me soltara de su cuello, estoy seguro de que caería al suelo.

Me separé sin querer hacerlo realmente, aunque todavía rocé sus labios un par de veces más.

Recargué mi frente en su pecho, debatiéndome una y otra vez mil cosas que no dejaban de pasar por mi mente y que pedían a gritos ser escuchadas.

—Woo... ¿Esto está bien? —le pregunté con la voz temblorosa, tenía muchas dudas, y básicamente, todas tenían que ver con él: Con Woohyun—. Que estemos juntos de esta forma, ¿No es malo? ¿No te sientes culpable de alguna u otra manera? —sentía que podía soltarme a llorar en cualquier momento, no quería que me rechazara o que se enojara por portarme como un niño asustadizo.

Pero muy al contrario a todo lo que había pensado que me haría, me tomó de la barbilla en un movimiento delicado y dulce, como si fuera algo frágil que hay que cuidar y proteger a cualquier costo.  

Me perdí en sus ojos y sentí el ligero toque de sus manos acariciando mis mejillas, así se quedó un instante, hasta que me dijo:

—Bummie, ¿tú me quieres? —asentí rápido y sin dudarlo un solo segundo —. Y yo también te quiero —me besó ligera y fugazmente en los labios y después en la frente. Las lágrimas me querían traicionar, ya que se estaban arremolinando con más rapidez en mis ojos para rodar en cualquier momento por mis mejillas—. Entonces esto está bien, es bueno, nos queremos, y no por hacerlo le hacemos daño a nadie.

Abrí los ojos de golpe y me incorporé en la cama, me abracé el torso, hace frío. 

¿Por qué soñé con él?

Busqué mi ropa con la mirada, al encontrarla a un lado de la cama, me levanté por ella y comencé a ponérmela.

No miré la puerta cuando se abrió.

—Vaya, has dormido más que de costumbre. ¿Quieres desayunar? Ya es un poco tarde —pasó a mi lado, movió algunas cosas, no le presté atención realmente.

—No, tengo que irme — dije serio, aún tratando de recordar más de ese sueño. ¿Qué habrá sido de Woohyun?

—Tan frío como siempre —escuché que suspiró y salió del cuarto dejándome solo.

Me tomé mi tiempo para arreglarme y limpiarme en el baño, cuando terminé, tomé mis cosas para dirigirme a la salida y colocarme las botas, Jung Shin me alcanzó antes de que saliera de su departamento.

—¿Te veo el próximo fin de semana? — me retuvo de la cintura, quité su mano de mi cuerpo, ni siquiera lo volteé a ver, abrí la puerta.

—No y no me busques de nuevo —y sin más salí del lugar, no me duele y no lo odio, pero he estado pensando en esto últimamente.

Necesito que sean las manos de Jonghyun las que estén sobre mi cuerpo, que sea él el que me toque, no siento ningún placer sino es Jonghyun con el que tengo sexo.