Narra Juan.
- Amor... Despierta...
Abrí mis ojos. Anabella me sonrió y me besó la mejilla. Sonreí, acariciando su cintura.
- Buen día Nena...
- Buenos días... Tengo el desayuno listo. ¿Vamos?
Me senté en la cama, refregando mis ojos.
- Mmm... ¿Es mucho?
- De todo. Tostadas, café, té, algo de fruta y panqueques... ¿Por? ¿Quieres que lo traiga?
- Me gustaría. Pero no, me levanto. Tengo trabajo.
Bostece y estiré mi cuerpo, haciendo sonar algunos huesos.
- ¿Es necesario que vayas? Te notas muy cansado. Tomate el día para descansar y desconectarte un poco de esa empresa.
Suspire.
- Hay muchas juntas importantes que ya pospuse por demasiado tiempo. Tengo muchísimo trabajo atrasado.
Anabella bufo molesta.
- Bien.
Se levantó de la cama y se fue.
Me levante y fui a la cocina. Me ducharia después de desayunar, asi ya me voy.- ¿Por qué te molestaste?
Bese su cuello y la abracé por la cintura.
- Porque al final siempre estas ocupado. Ya no tienes casi tiempo para mi, y esto no pasa sólo por el sexo. -Se volteó- Te la pasas trabajando, vives estresado y hablando de tu trabajo. Quisiera que te desconectes un poco y estés junto a mi, pero noto que es políticamente imposible.
Me empujó y se fue hacia la mesa.
- No digas que no tengo razón, porque es así.
Me senté delante de ella.
- Vamos a hacer algo... -Me miró- Hoy vamos a salir... Y veré si puedo tomarme un descanso...
- ¿Y donde piensas ir?
- No se. Pero quiero que te vistas linda, y ya sabes que tipo de ropa interior llevar.
Se sonrojó y se sirvió unos panqueques. Imité su acción.
- Amm... Okey.
Mordió su labio. Sonreí y seguí desayunando.
- Lo siento...
- Ya no molesta tanto... Pero no quiero que vuelvas a hacer eso todo el tiempo.
- Okey...
Terminé mi desayuno y fui a bañarme.
Al terminar, me puse mi traje, me peine y bajé. Ya con mi maletín y celular en mis manos.- Adiós Nena. Recuerda lo que dije.
Le di un beso.
- Adiós Juancho. Ten un buen día.
Juancho... Sonaba bonito proveniente de sus labios.
- Eso espero -Sonreí- Nos vemos esta noche.
Me dio otro beso y me fui.
Narra Anabella.
- ¿Que pasa?
- Nada... Solo... Pienso.
- ¿En?
Sonrió malicioso.
- En que quiero facilitar el trabajo...
Subi una ceja.
- Quitate las bragas.
Abrí mis ojos de par en par.
- ¿Qué? Estas loco.
Sonrió.
- Vamos, quitatelas y damelas. Apuesto a que están húmedas.
Me sonroje.
- ¿Como demonios piensas que hare eso? Y mas en público.
- Mete tus manos por debajo de ese negro vestido, y bajalas normalmente. Haz como si levantaras algo del suelo.
- ¿Y que hago cuando me las saco?
- Me las pasas por debajo de la mesa. Hazlo.
Me fije que nadie estuviera viendo y metí las manos por debajo del vestido. Llegue al borde de mis bragas y comencé a bajarlas, Todo esto sin dejar de verlo a él. Es una locura.
Termine de bajarlas y las saqué despacio. Sonreí apenada y las pasé por debajo del mantel de la mesa. Él sonrió mas y tomo agua.
- Tenia razón.
Metió su mano al bolsillo, guardando mis bragas.
- Eres un...
- Me ayuda a bajar el estrés.
Sonrió.
Seguimos comiendo. Me sentía molesta por no tener mi ropa interior. El vestido estaba hecho para que no lleve sostén, y Ahora sin bragas estaba malditamente incomoda.
- Al final me tomaré un tiempo de la empresa... Un socio mío se encargara.
Sonreí.
- Genial. ¿Cuanto tiempo?
- No se... Unas dos o tres semanas... Quizás un mes. Quiero viajar, relajarme un poco. Estar con mi familia, contigo... Y además seguir pensando las cosas de la boda.
- Dije que eso puede esperar.
- Si no lo hago ahora, no lo hare mas.
Juan pidió la cuenta.
- Quiero que pruebes un vestido... Quiero verte ya con un vestido blanco.
Sonrió y pago la cuenta. Nos levantamos y salimos del local.
El frío recorrió mi cuerpo, apenas cubierto por un vestido. Lo miré mal, él rió y abrió el auto. Subí y suspire.- Ya entraras en calor.
Guiño un ojo. Reí.
- Te odio.
- Se que me a.. Amas.
Sacudió su cabeza. Reí nuevamente y bese sus rosados labios. Su lengua recorrió mi boca, y la mía la suya. Acaricie su mejilla, y finalmente mordí su labio.
- Si, te amo. ¿Esta claro ya o no?
- Mas clarito que el agua.
Me besó de nuevo y nos fuimos.