Infinity

Capítulo 2

A la mañana siguiente nos despertamos, yo me fui a dar un baño y me cambie.

Me encontré con Matias en el desayuno, no pudimos evitar mirarnos de vez en cuando, era inevitable, cuando terminamos nos fuimos a la obra de construcción.

Matias y yo nos encontramos con Marcelo y como si no fuera más incómodo justo en ese momento aterrizo un helicóptero detrás de nosotros, en el venia Julián, y no se veía para nada feliz. Cuando se bajó se dirigió a nosotros.

-No quiero que vuelvas a invadir mi propiedad así como lo hiciste anoche- es lo primero que dice.

-Lo mismo te digo, ¿O cómo se supone que conseguiste el libro entonces?,¿Magia?- le espeto.

Julián sonríe

-No muñeca, se le llaman contactos.-dice arrogante

Me muerdo el labio para contener las ganas que tengo de pegarle.

-No me digas muñeca.- digo lo más de calmada.

Me mira, retándome.

Oh no...

-Por cierto, ayer te veías espectacular con ese disfraz, muñeca- dice como si de repente se hubiera percatado de la presencia de Matías y Marcelo.

Y lo peor, me llamó muñeca de nuevo.

Luego de eso, Julián se dio media vuelta y se fue, dejándome con la boca abierta.

-Tengo curiosidad de saber de qué te disfrazaste-dice Marcelo.

-¡Cállate!, ¡O no respondo Marcelo!- le espeto.

Alza las manos en señal de rendición, miro a Matías y veo que trata de tranquilizarme con la mirada, lo que me calma.

***

Ya era de noche y no podía dormir, así que agarre una manta y fui al oasis.

Cuando llegue puse la manta en el piso y me senté sobre ella. En algún momento en el que estaba sumida en mis pensamientos, Matías había llegado y no me percaté

.- ¿Cómo lo sabias?- le pregunto y sabe que me refiero a lo de mi paradero.

Él sonríe.

-Te he seguido- dice como si fuera lo más obvio del mundo.

-Ya.-digo.

Se sentó conmigo en la manta y empezamos a hablar,

-¿Sabes?, cuando no estabas conmigo siempre miraba las estrellas y me acordaba de ti.-dice.

Lo miro y no sé, pero las palabras se salen de mi boca.

-Quiero que me hagas el amor.

Matías me mira con el ceño fruncido, pero cuando ve la determinación en mis ojos, lo comprende, con eso le estoy demostrando no solo con palabras que soy suya, que quiero ser solo suya.

Matías sonríe.

-Nada me haría más feliz- me dice antes de besarme tiernamente.

***

A la mañana siguiente me desperté temprano y me vestí, desperté a Matías y recogí la manta para ir al campamento con él.

Cuando llegamos fuimos a donde estaban los demás trabajadores y se nos acercó uno.

Nos dijo que habían encontrado un túnel de bajo de la esfinge.

-No se diga más, hay que investigar.-digo con los ojos brillantes, miro a Matías.

Él sonríe y asiente.

Nos encontramos con unas escrituras egipcias antiguas talladas en la pared. Decían que nos íbamos a encontrar con varios paneles secretos y que al final encontraríamos el collar de Cleopatra.

Seguimos adelante y nos encontramos con el primer panel secreto. Para abrirlo teníamos que llevar acabo un baile egipcio que fue creado por Isis, una de las diosas de Egipto, el baile se llamaba la resurrección de la muerte. Los hombres iban a tocar los instrumentos y las mujeres iban a bailar, así que todas las mujeres nos devolvimos al campamento a ponernos unos vestidos egipcios de baile y a buscar los instrumentos...teníamos que aprovechar oportunidades como esta también para divertirnos.

***

Cuando llegamos a donde estaban los hombres les entregamos los instrumentos y empezamos a bailar.

Mientras bailábamos se abrió el panel secreto. Y cuando terminamos la danza entramos al segundo panel.

Cuando entramos nos pasó lo menos esperado, caímos en una trampa...y no solo eso, está estaba hecha por Julián y sus secuaces.

No puedo creer que hayamos caído en esto.

Julián estaba escondido con sus ayudantes detrás de unas estatuas y cuando salió nos dijo:

-Los consideraba más listos.

Bufo.

-Deberías dejar de entrometerte en donde no te llaman.- le digo como consejo

Él sonríe.

-Si lo hiciera, ¿Cómo esperas que consiga siempre lo que quiero?- me pregunta.

-Con honor- le digo como si fuera lo más obvio del mundo.-..Pero, ¿qué es lo que quieres ahora?

-Es simple.

-Pues dilo, la verdad que tengo mucha curiosidad, porque debes de quererlo mucho para haber planeado algo tan sucio como esto.- le digo.

-Cásate conmigo.- dice lo más calmado posible.

Suelto una risotada.

-Deberías ser comediante, lloro de la risa, enserio- luego veo que ninguno de los demás se está riendo y me callo de golpe-...¿Es enserio?

-No soy un hombre de bromas- dice.

Abro los ojos como platos.

-Estas de coña...-murmuro.

-Muy bien, si esa es tu decisión la respeto...todos morirán- dice volteándose para irse.

-¡¿Qué?!,¡Espera, espera!- lo detengo.

-Sofía...no- me advierte Matías.

Lo miro suplicante para que me entienda.

-No cedas ante este imbécil- dice Marcelo.

-Pero...moriremos.. ¿No es mejor sacrificarse uno que morir todos?...si estuvieran en mi lugar saben que lo harían, no me lo pueden negar.-les digo y callan, ellos lo saben.

-Parece que ya Sofía ha tomado una decisión..- y dirigiéndose a sus ayudantes-.. Llévensela, luego liberen a los demás.

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