Warrior (Camren)

Capítulo 16

Ese día no se habló más del tema entre las chicas ni más, se hizo un día familiar bromeando entre ellos, Lauren chateaba en su celular con Candece como todos los días hacía hasta que se hizo de noche y las Jauregui fueron a su casa.

Lauren directamente entró saludando a Milo quien saltaba de un lado a otro emocionado de ver a su favorita en la familia acercarse a él, luego fue por su abuela a quien abrazo, besó y se quedó contándole lo que habían hecho en casa de su tía para al final ir a su habitación.

-¿Camila me quiere?- se tiró en su cama mirando el techo- Warrior…- se levantó y buscó la carta que había escrito el día anterior leyéndola una vez más para luego sellarla y firmar en la parte trasera “Warrior”

Al día siguiente Lauren despierta al sentir un muy pequeño peso sobre la cama, pensando que podía ser su hermanita Taylor se giró con los ojos aun cerrados sintiendo una delgada pero larga lengua  por su mejilla y luego por su rostro.

-Milo- reía sintiendo aún las lamidas del pequeño pincher ahora en su oreja- asco, milo- rió y lo agarró en sus manos mirándolo sonriente- eres un perro fastidiosa- dijo riendo para luego abrazarlo cubriéndolo con las cobijas.

El pequeño perro se quedó tranquilo, dejándose llevar por las caricias de su dueña favorita de la familia hasta quedarse dormido junto a ella. Luego de 20 minutos ya Clara se había extrañado de que el pequeño perro no haya despertado a la joven y fue a la habitación, viendo linda imagen tomó una foto y luego haló la cobija de la chica para que despertara pero fue mala jugada ya que no despertó pero logró despertar al pequeño perro quien miró con enojo a Clara por fastidiar a su dueña.

-Lauren a levantarse- habló pero la pelinegra estaba aún profunda en sus sueños, agarró la cobija pero el pequeño perro se colocó a la defensiva ladrando una y otra vez- Lauren levántate- iba a tocar a su hija pero el pequeño perrito negro se interpuso gruñendo.

-¿Por qué tanto ruido?- la chica se sentó y el perro se lanzó a sus brazos lamiendo sus manos- ¿Por qué ladras perro estúpido?- acarició al pequeño mientras lo acariciaba.

-Hora de levantar que tienes clases- dijo clara y salió de la habitación de su hija mayor.

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-Kaki- sofi sacudió a su hermana- mami dice que es muy tarde, levántate.

-¿Qué?- se sentó estregando sus ojos.

-Que te levantes perezosa- dicho esto Camila agarró a su hermana tirándola a la cama haciéndole cosquillas- para…. Para Kaki- reía y reía.

-¿Quién es perezosa?- seguía haciendo cosquillas- ¿Quién?

-Tú- dijo respirando cuando podía pero la más grande volvió a agarrarla- No, No… Mamá, mamá es perezosa- reía más hasta que la soltó y se levantó- tú lo eres- salió corriendo de la habitación de su hermana.

Camila se duchó, se peinó y se arregló para ir a clases, colocándose linda a su gusto. Luego lista se observó en el espejo, sonreía y para ella eso era lo importante, su mirada pasó por todo su cuerpo y por un momento se preguntó ¿Qué ve Lauren en ella? La chica giró su cabeza mirándose de lado y luego se giró ella ¿Su cuerpo? Escaneó su cuerpo y luego levantó la blusa que tenía mirando un poco de piel extra que la resaltaba del cuerpo. Ahora si se sentía gorda, lágrimas caían por su rostro y frunció los labios. Escuchaba voces en su cabeza “Ni siquiera le gustas” “Aún eres una gorda fea” “Nadie quiere a una gorda en su vida” “¿Crees que teniendo a una profesora como Candece te querrá a ti?” “Hay más chicas que quisieran estar con Lauren, aléjate y déjale alguien mejor”