7. Un odioso puerco

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 —¿Qué haces puerco? — pregunté mientras me sentaba junto a él.

—Mira papi— dijo mientras sonreía y levantaba una hoja.

Al ver a un pollo gigante de la mano con un cerdo no pude evitar reírme a carcajadas, haciendo que él frunciera el ceño y me viera molesto.

—¡Shuga hijo de puta! — me pegó, haciendo que lo viera con algo de asombro.

Se puso de pie con sus pequeños brazos cruzados sin soltar el dibujo.

—Este eres tú— señaló el pollo, —y este soy yo.

—Que artista— me burlé.

—Que feo, papá malo. Mejor dibujo a la galletita conmigo— me sacó la lengua y se sentó nuevamente en el suelo, dibujando una galleta con un puerco, pero después hizo un cerdo devorando una galleta.

—Ese no— le quité el último que hizo.

No sé si era mi podrida mente, pero para mí claramente eso era un "te quiero comer Jungkook".

—Que no me quites mis dibujitos— zapateó intentando quitarme el dibujo, pero bastaba con subir el brazo para que él no lograse alcanzarlo.

Comenzó a saltar inútilmente.

—Bien puerquito, debes hacer ejercicio, excelente trabajo— me burlé al verlo ya con las mejillas rojas.

Se detuvo y comenzó a llorar, ese horrible sonido taladraba mis oídos, el drama que hacía era increíble.

—Ya, basta toma— dije en un intento desesperado de que se callara, pero continuó llorando, —Cerdito, deja de chillar por favor— cubrí mis oídos, pero nada, eso comenzaba a desesperarme, —Te llevaré a comer helado con ese niño nariz de tucán si haces silencio— rápidamente se repuso, limpió sus lágrimas y me tomó de la mano, para decir un "Vamos" con una sonrisa de oreja a oreja.

Niño manipulador.

—Nah, solo bromeaba, no iremos a ningún lado— en cuanto recordé que la heladería más cercana quedaba a unos 300 metros, deseché la idea, me daba pereza caminar.

Hizo expresión de comenzar a llorar otra vez y sin dudarlo salí de mi apartamento junto a él.

Corrió hacia la puerta de su amigo, novio o lo que sea, una señora le abrió y él le pidió permiso de salir con su hijo.

Tan pequeño y ya en esas cosas, ese pequeño cerdito de grande me traería problemas, desde ya lo siento.

La señora me vio algo dudosa pero asintió.

En cuanto el otro niño salió, tomó a mi hijo de la mano y se acercaron a mí.

Ya cuando su madre no nos estaba viendo, lo aparté de Jimin.

—No toques así a mi hijo niño tucán— le alejé la mano.

Ambos me vieron confundidos y unieron sus manos nuevamente.

—Entonces dale la mano a alguien, como a mamá Jin.

Rodee los ojos y continuamos el gigantesco recorrido a la heladería, algunas personas observaban a los niños con ternura.

—¿Son sus hermanos?— me preguntó una señora.

—No, el más pequeño es mi hijo— que entrometida.

—Que afortunado, su hijo es adorable.

Observé a cerdito con desagrado, para nada, era un niño bien feo como los demás, todos son feos, pero comparado a su amiguito nariz de tucán era menos feo.

En cuanto llegamos a la heladería, me sentía demasiado cansado, por lo que pedí un bote entero de helado para mí, y los niños uno con forma de gusano.

La joven que estaba detrás del mostrador vio a los duendes con ternura en cuanto hicieron su pedida.

—Jimin, estás muy gordo para comer tanto.

El niño me sacó la lengua y me ignoró.

—¿Son amigos? — le preguntó la muchacha.

No por favor...

—Es mi novio.

—Pero están muy pequeños— rió.

—Lo mismo digo— me apresuré a decir.

—No le hagas caso, mi papá es un amargado, está celoso de que él no tiene uno— dijo orgulloso de lo que dijo, sacándome la lengua nuevamente.

Iba a replicar algo, pero corrió a una zona de juegos infantiles que había en el lugar.

Vi a la chica burlarse de mí, pero se detuvo en cuanto la vi mal.

*****

Hola, perdón por tardar tanto, pero he estado bastante ocupada por el colegio y estoy en examenes, seguramente los finalizo el miércoles, entonces voy a intentar actualizar.


Papi Shuga // Jimin & Yoongi //PausadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora