Mi don, Mi maldición.

Capitulo 2

Pasé toda la tarde hablando con mi madre sobre la graduación. Era tan emocionante saber que me graduaría e iría a la universidad. Era emocionante saber que la solicitud enviada a Harvar había sido aceptada gracias a mis calificaciones.

Y era más emocionante ir y estar con Stefanni y Karolay. Ellas al igual que yo fueron aceptadas. Las adoro, ellas han estado con migo desde 6° grado. Somos muy unidas. No mejores amigas, UNIDAS. Pero también muy amigas.

Eso se deba a que todas teníamos muchas cosas en común. Y algunas veces, no estábamos de acuerdo en otras cosas.

Hablaba con mi madre cuando una enfermera entró y dijo,

-Señorita Thara, tiene visitas.

-¿Visitas?- pregunté.

Ella asintió con la cabeza y se marchó.

Mire a mi madre y pensé ¿quién puede ser? Estando en mis pensamientos, el sonido de la puerta abriendo se me saco de ellos. Mire y vi unos globos de color lila. Ese es mi color favorito. También vi un cabello rubio seguido de una sonrisa radiante. Era Karolay. Ella, con su cabello rubio, sus piernas como pilares gigantes arrasan con todo.

Tras ella vi un hermoso panda de felpa. Y una hermosa piel morena y cabello negro acompañados de pequeños ojos negros. Era Stefani.

Ella, su timidez, y aveces con locos pensamientos, complementan a una amiga perfecta.

- ¡Sorpresa! - dijeron las dos en coro.

Yo reí al oírlas y dije;

- No es sorpresa cuando ya sabes que están aquí.

- Agradece. ¿Quién como nosotras? Ehh.. - Me reprendió Karolay.

Si, ella es de las personas que no le gusta hablar a las espaldas de las personas. Y es de las que si no le gusta algo que la ofendió. Te dice antes de perder el control y que sus mejillas empiecen tornarse de un color rojo. Siempre le he dicho que cuando pasa eso, es como ver a Tinker Bell.

- Como mandes reina. - le dije con un guiño.

La miré y le hice un mohín.

Entre charlas con mis amigas, mi madre se marchó y nos dejó a las tres en la habitación.

- Es una lastimas que en estos instantes no estemos en tu funeral. - Dijo Karolay descargando su trasero en el mueble de la habitación.

- ¿Porque mejor no cierras tu boquita, y me ayudas a desempacar esto?- Interfirió Stefani, al tratar de ganar la pelea contra su bolso. - o mejor, toma- lanzo el bolso a Karolay. - Tienes mas fuerza.

Yo reí a carcajadas.

- Eso es por tantas clases de Artes marciales. - Respondí a Stefani.

Karolay, con unas cuantas malas palabras y tirones. Dijo al final;

- Es cierto. Una mujer aparte de cara, cuerpo e inteligencia. También necesita fuerza. Por si algún imbécil se quiere pasar de listo. - Y sonrió victoriosa.

Stefani golpeo su frente, con la palma de su mano. Me miro. Negó con la cabeza y dijo al final;

- Una cosa babe.- Señalo a Karolay con su dedo índice. - Siento lastima por el novio que vayas a tener.

- Tienes razón. Dije riendo.

- A propósito Tha.- interfirió Karolay con un dedo en su labio inferior. - ¿Cómo se siente?

Fruncí el ceño.

- ¿Cómo se siente qué? - pregunte.

- Si, ¿qué?. - Dijo Stefani.