YLLIANA
Todos en algún momento hemos querido tener un guardaespaldas, de esos que te cuidan del peligro y arriesgan sus vidas por cuidar la tuya, aquellos que tienes que pagarle una buena cantidad de dinero solo para que te protejan. Sí, yo creí que solo pasaban en las películas o incluso en el mundo real, siempre y cuando seas millonario y no te importe pagar una fuerte suma de dinero, solo por proteger tu preciada existencia.
Hasta el día de ayer mi vida era normal, una estudiante que hace poco había ingresado a la Universidad, una chica cerca de cumplir los 20 años. Sí, esa era mi perfecta vida. Hoy en frente de mí se encuentra un sujeto diciéndome que la vida que he llevado es una farsa, que no pertenezco a este mundo, y que debo tomar mi responsabilidad como princesa en el reino de Camelot.
Por favor, alguien que me despierte porque lo que escucho en estos momentos es una gran mentira. Yo una princesa del Reino de Cemelot, un reino que solo existe en la mitología, el Reino y la fortaleza del Rey Arturo, el lugar que se desconoce su ubicación. Cielos, no se quien está más demente, yo por pensar que puede ser verdad o la persona que me está hablando de una historia sin sentido.
—¿Me estas escuchando Ylliana?— decía el sujeto bonito mientras me observaba con sus hermosos ojos azules, debo admitir que era lindo, pues su apariencia física lo demostraba, era alto, de tez blanca, bonita sonrisa, cabello claro, es decir, era un chico perfecto, que no parecía pertenecer a este mundo.
—Claro, te escucho, pero no logro procesar toda esta historia... dime ¿solo estas aquí para decirme esto? Tu esperas que yo te crea, ¿quién eres? Y en serio ¿Por qué me dices todo esto? ¿Cómo sabes mi nombre?— me miró directamente a los ojos y sin una pizca de vacilación me respondió.
—Ylliana, te estoy diciendo la verdad, yo vine a ponerte al tanto de lo que tienes que hacer de ahora en adelante, tú tienes que tomar tu deber como princesa en el Reino de Camelot ¿es difícil entender?— se alejó de mí dándome la espalda.
—Está bien, asumo que me dices la verdad, que soy una princesa, pero aun no me has respondido a todas mis preguntas— Sí, esa era yo, una chica arrogante con un mal carácter si trataba de resolver algo. Yo tengo una estatura promedio, piel blanca, ojos color miel, y mi cabello es largo y castaño.
—De acuerdo, responderé a tus preguntas, yo soy tu guardián, guardaespaldas o como lo quieras llamar, mi nombre es Ian y debo llevarte al mundo que perteneces— dijo con la poca paciencia que le quedaba, creo que este chico es más arrogante que yo, pero si algo era cierto, es que no soporto que me den órdenes y más aun con una historia totalmente fuera de lo normal.
—Lo siento, pero no puedo ir, recién ingreso a la universidad, mis amigos y mi familia, no los puedo dejar solo porque me lo ordenan. Yo nací aquí, toda mi vida he vivido aquí. ¿Qué esperas que haga?— respondí indudablemente a lo que podría ser mi imaginación.
—Princesa, ¿crees que tu lugar es aquí? vamos, piensas que todo este tiempo has tenido una familia de verdad, déjame decirte que si tú te vas nadie lo notara. Todo, absolutamente todo, siempre ha estado arreglado— decía mientras se sentaba en la silla que estaba cerca de la ventana de mi habitación.
—Dime entonces, ¿por qué de todos estos años recién apareces diciéndome esto? ¿Quién te envía?—le dije aun confusa por lo escuchado.
—Ylliana, como futura heredera al trono, debes venir conmigo a Camelot, mi Rey, tu hermano te necesita, tu ayuda lo beneficiara, se aproxima una guerra y debes colaborar con el Reino, tus poderes...—dijo en cuanto lo interrumpía.
—¿Mis poderes? ¿Me estás diciendo que tengo poderes? Que suerte la mía, ahora que más me dirás ¿Que puedo escuchar los pensamientos? —decía esto último acordándome de la vez que escuché decir al profesor del colegio que estaba harto de su vida, lo cual solo debió ser mi imaginación.
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Dos Mundos
RandomLa vida de Ylliana Beker, dará un giro inesperado al enterarse que es una princesa del Reino de Camelot. Ella deberá enfrentarse a la guerra que decidirá el futuro de todos, con ayuda de sus amigos tratara de detener al peligroso James Torres, quien...