Jong In pareció sorprendido, había pensado en eso, pero que se lo dijieran era algo completamente distinto, era escuchar algo que no quería.
- ¿Gustar?, lo besé, supongo... ¡Dios! ¡ si me gusta!-
- ¿Lo besaste?, lo siento creo que significa que te casarás con él-
- A todo esto, no le caes bien, Jane es su favorita-
- Jane apesta para mí.-
El moreno la miró confuso, mientras metía en su cabeza a Kyungsoo, y el tiempo que pasaron juntos, haciendo el trabajo, llegando a la conclusión de que si tan sólo supiera que le gustaba, o que hizo gustarle, intentaría borrar o arruinar ese momento.
- Estoy segura que te gusta cuando está detrás de ti, como si fuera ese juego del ratón y el gato,Kyungsoo te persigue y tú finjes que no te gusta.
- Bueno, creo que me gusta un poco cuando lee esos libros y le brillan los ojos-
- ¡ay! Jong In, ¿eres tan cursi?, ¿por qué no se lo dices entonces tonto?
- Él sólo esta entusiasmado porque hablamos un poco, no creo que le gusten los chicos como yo... soy malo demostrando afecto y además sigo atrapado cosas de niños . ¿vamos por un café?-
Hye soo frunció el ceño tomando su celular y tecleando algo
- Conozco a un amigo que ve a un terapeuta ¿haz ido a alguno?-
-Mi madre no sabe de esto, son problemas pequeños que se arreglan si dejo de ver a Kyungsoo-
- ¿De qué hablas?, así no es el plan.- sonrió, y se dio cuenta que se sentía más ansiosa de lo normal- Vas a ir, es un amigo, tú vas a superar todo y vas a estar junto a tu chico con ojos redondos-
- ¿no oiste? dijo que iba a ir con Sehun, él es su amigo-
-¿Por qué?, una persona tan cruel con una tan inocente.
Él no lo era, no era inocente,lo recordó.
Jong In , se había tardado mucho en la mañana, la alarma había sonado pero ni siquiera la escuchó. Estaba llegando atrasado, y aunque todavía quedaban siete minutos.
Se sentía como un poco del asco, Sehun había tratado de que fuera de parte de él a pelear con un niño que vivía al lado suyo porque según él, estaba muy cansado como para salir de casa. Jong In se rehusó porque entre ese chico Chanyeol, primero era demasiado alto, y segundo le caía bien, al menos tenía que hacer algo por su cuenta alguna vez, eso era lo que más le molestaba hace tiempo, él no entendía porque ese niño lo había comenzado a molestar, no entendía porque tenía que mantenerlo encerrado en una jaula en dónde él decidiera su próximo movimiento. Muchas veces quiso preguntarle a su mamá, pero ella estaba ocupada con cosas importantes, y a veces aunque ese lo golpeara, incluso se le olvidaban los golpes cuando veía a su madre sonriendo por sus buenas calificaciones.Volviendo al problema actual, estaba seguro que hoy iba a ser la peor golpiza del año, una que no podría cubrir con el maquillaje de mamá.
Ya estando en la entrada, pudo notar el nudo en su garganta pero intentó que eso no le afectara, tenía trece años ya era un niño grande, al menos eso le decía su madre. Vio a Chanyeol entrando con un montón de libros en la mano, incluso uno que llevaba con la boca.
- Hola Jong In-
Él correspondió el saludo con una sonrisa, y se dirijió a su salón. Todo estaba en silencio hasta que entró, se escucharon algunas risitas, las ignoró pensando que se trataba de otra cosa. Su sorpresa fue grande, cuando vio esbozos y escrituras en su banco.
Negro. Pobre. Asqueroso. Vuelve a tu país.
Cada uno de los mensajes escritos por algunos de sus compañeros, y firmados. Rápidamente se fijó en uno que destacaba : Do Kyungsoo, superficial como los otros, arruinas la raza, ¿como te haces llamar coreano?. Se sorprendió por todo el odio que le tenían, él ni siquiera había hablado con la mitad del salón, al menos de la clase de literatura. Se sintió terrible,porque esto era aún peor que Sehun lo golpeara, estudiar rodeado de personas que lo juzgan a sus espaldas, que ni siquiera dan nada para defenderlo, aunque sea por compasión o empatía, ni siquiera el idiota de Kyungsoo, sonriendo como siempre, con sus amigos, como si no tuviera idea de los rayones escritos en su mesa, como si todo fuera perfecto para él, como si ese mensaje fuera una broma hecha para el defectuoso,como si fuera un juego.
Jong In, tomó un borrador de su estuche, y rápidamente comenzó a borrar los rayones, con fuerza y resentimiento, especialmente por ese chico cínico y detestable, una lágrima rodó por sus mejillas, sin embargo no dejó que cayera ninguna más.- ¿Crees que sea buena idea lo del café?, creo que mejor voy a casa a pasar la tarde- ocultó las manos en los bolsillos de sus pantalones
- ¿Jong In? ¿estás bien?-
Sintió como el nudo en su garganta se formaba, y las manos comenzaron a sudarle, como si se sintiera más nervioso de lo normal, se sentía triste de nuevo, como un niño, desvió la mirada hacía la cafetería y sonrió forzadamente.
-Claro, ¿vamos?- su voz sonó más grave de lo normal, ella lo notó pero no dijo nada.
-Vamos-
Caminaron en dirección a la cafetería, mientras que cambiaban de tema a la mala suerte en el amor de Hye soo.
Sabía que con eso iba a hacer reir a su amigo, valía la pena.- ¿Por qué todos me tachan de sabionda?, sé que soy inteligente, no sé porque me lo repiten-
Jong In la miró desconcertado, pero sonriendo.
- ¿Que hay del chico del último año?-
- No querrás saber quién es, es una larga historia, llena de poemas, cantos en la media noche ¡Voy a luchar por nuestro amor Hye soo!-
el moreno rió y comenzó a elegir una de los sobres de azúcar, ofreciéndole uno a su amiga.
-¿Por qué los eliges?, ¿no son lo mismo?-
-Algunos tienen triángulos en los sobres, esos tienen más- ella rió por un momento, pero paro de reir, luego de ver el semblante de su acompañante- y entonces se llama...-
- Se llama... mira ahí está Kyungsoo-
-¿Dónde?- giró su cabeza drasticamente, encontrándose con los ojos del chico- ¿por qué nos está mirando?-
Él también lo escaneó un poco con la mirada, llevaba su uniforme planchado, algo no usual. Y tenía el cabello un poco más corto que ayer, su mano estaba cargada en su mentón, y ni siquiera disimulaba que lo estaba mirando. ¿Por qué?, ahora mismo debería sentir rabia, desprecio.
-¿No es obvio?, esta celoso-
Jong In rió bajo, pero luego puso una expresión desinteresada, todo porque notó al otro chico riendo de lo que fuera que le había dicho el chico que iba a él pegado como chicle, y luego con Sehun mientras su vista llegó de nuevo a sus ojos, él le respondió frunciendo el ceño, mientras volvía a ver a su amiga.
- Me dejas sostener tu mano-
Hye soo hizo una mueca, pero luego lo observó con los ojos repletos de insistencia, y pensó en que si necesitaba sólo agarrar su mano, aunque tuviera millones de gérmenes, para ayudarlo entonces lo haría.
- Tú capuccino, yo mokka, tu pagas-
Ella tomó la mano de Jong In, y rió junto a él como si le hubiera contando el mejor chiste de su vida.
El celular de Jong In vibró en su bolsillo.
En mi casa, mañana, es proyecto de a dos, no traigas a tu amiga.
Trató de ignorar el mensaje, aunque le causara gracia, y pensó en la opción de visitar un terapeuta porque hasta este punto estaba muy confundido, se cuestionaba, como podía estar estar teniendo ensoñaciones de los labios horribles del chico sabiendo que no era lo que aparentaba.
Se distrajo, miró los cafés enfrente suyo, sacó su billetera dispuesto a pagar pero Hye soo sonrió palmeando su hombro.- Vamos a sentarnos, deja de poner esa cara, al fin me libre de Yook-su rostro se volvió serio- si quieres mi opinión, si no te apresuras el chico robot te lo va a robar, antes de que pestañees.-
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Dark Skin
FanficJongin se siente terrible porque las personas lo juzgan por ser moreno y a Kyungsoo, su compañero, lo halagan sin que tenga una cualidad en especial.