Delusion

▪Capítulo 1▪

Ficha del paciente.

Nombre: Gale Sivan.
Edad: 17 años.
Sexo: M.
Esquizofrenia, trastornos compulsivos.

—Aden McCleary está encargado del paciente, estará en observación para hacer su servicio social  —el doctor Ray me dirijó hacia la habitación donde tendrían al paciente 406 Gale Sivan.

Estoy iniciando mi periodo de trabajo, y esta es mi primera prueba. No estaba muy cómodo con estar en un hospital psiquiátrico, dónde hay cientos de locos dementes que podrían matarme o hacerme daño.
Pero al parecer a mi maestra Olivia no le parece peligroso.

—Aden, preséntate con el paciente, hablarás con el y más tarde te traeré sus medicamentos iniciales — la enfermera Donna me abrió la puerta y acto seguido la cerró con llave.

—Hola Gale — dije amablemente, sinceramente por lo general no soy bueno conversando.

—Hola — respondió seco y con la mirada plasmada en mis ojos.

—Soy Aden McCleary, tengo 17 años y soy tu compañero para cuidarte en estos meses — pronuncié compañero un poco más marcado, no quiero que sienta que soy su niñero.

—Pues, seguramente ya te dijeron todo de mi niño listo, para que charlar — me lanzó una mirada fría, algo que nunca antes alguien me había dirigido.

—Ya me presenté, es tu turno — coloqué mis manos en mis piernas y me senté a escuchar.

—Soy Gale, duh eso ya era obvio, Gale Sivan, tengo 17 años y tú no me agradas — se acostó en la cama y miró el techo.

—Bien Gale Sivan, y dime, ¿Por qué terminaste aquí? —pregunté con amabilidad, soy muy paciente por suerte.

—Esquizofrenia, ataques de furia, y por tratar de acuchillar a mi vecino — lo soltó todo de un sólo respiro.

—¿Por qué trataste de acuchillarlo? —me interesaba realmente.

—Jin me lo ordenó, y si no lo hacía, Mr.Death vendría por mí en la noche, como siempre lo hace, Jin me prometió que si lo hacía el se iría, y lo traté, pero me detuvieron en el acto. — me quedé casi boquiabierto.

—¿Quién es Jin y Mr.Death? —tenía miedo a su respuesta.

—Jin es mi mejor amigo, él está aquí justo ahora pero sólo yo puedo verlo, al menos es lo que él dice, y Mr.Death es mi peor pesadilla, un hombre, un hombre con un traje negro y un tridente como el de Tritón. El me persigue —cuando me contó supe que eran alucinaciones.

—Gale, Mr.Death no puede hacerte daño, el no existe, yo estaré contigo —me senté a su lado en la cama.

—¡Claro que existe!, Si no me crees, quédate hasta las 2 de la mañana, es cuando el llega... —me murmuró el final de la oración.

—Yo te protegeré Gale, el no podrá hacerte daño —puse mi mano en su hombro levemente.

—Tal vez puedas, pero Kat no te dejará que me toques — quitó mi mano de su hombro.

—¿Y quién es Kat? —deseaba que no me dijera algún otro monstruo imaginario.

—Kat es un chico al que le gusto, es muy lindo, pero realmente no me gusta —antes de que continuara le interrumpí.

—Dime como es Kat —me daba curiosidad.

—Es alto, de ojos azules, musculoso y está enamorado de mi —sonrió tiernamente como un niño pequeño.

—Entonces Kat es homosexual —pensé en voz alta.

—Si, y yo también, es otra de las razones por las cuales creen que estoy enfermo, no se han dado cuenta de que estamos en el siglo veintiuno, y que la homosexualidad no es una enfermedad, la homofobia  si lo es, y mis padres la tienen —habló rápidamente y me quedé estupefacto, mi paciente es gay —.¿Tu eres homófobo? —preguntó.

—No Gale, no soy homofóbico, mi hermana es lesbiana — ¿Por qué estaba contándole de mi vida a un paciente?.

—¡Genial!, Ojalá Kat no se enoje, me caes bien —volvió a sonreír y cerró los ojos.

—Cuéntame más sobre ti —pedí.

—Pues, me gusta cantar y dibujar, no hacía más en casa. En el colegio sacaba malas notas por culpa de Jin, siempre me distraía, y mis compañeros me lanzaban cosas, eran malvados, pero Kat me protegía. Al menos eso me reconfortaba —tomó mi mano y me sentí algo incómodo —. Pero ahora tu estás aquí, y vas a cuidarme, y no dejarás que nadie me haga daño nunca — soltó mi mano y me miró.

—Si eh, jamás dejaré que te hagan daño Gale —dije algo nervioso con la voz temblorosa.

—Ahora dime, ¿Qué te gusta hacer a ti? —se sentó con las piernas cruzadas a escucharme.

—Toco el piano, y se hacer un poco de comidas —lo último fue algo estúpido lo sé.

—Bueno Aden McCleary tal vez algún día puedas traer tu piano y tocar algo — se notaba emocionado.

—Claro, algún día traeré el teclado, pues el piano no pasaría tan desapercibido —solté una risilla.

Tocaron la puerta en señal de aviso y la enfermera Donna entró con la bandeja de medicamentos.

—Aden, aquí están los medicamentos de Gale, dale dos de estás rojas y una de las verdes, ¡No vayas a darle más de las rojas!, sólo aviso —me dejó las pastillas y se fue cerrando con llave de nuevo.

Había una cama para Gale, y otra para mí en el fondo, en caso de que el paciente se volviera loco o que tuviera un ataque debemos presionar el botón debajo de la cama del practicante ósea yo.

Le di las pastillas a Gale, y decidió dormir un rato, ese rato fue hasta tarde, y me quedé despierto hasta las 2 a.m. como dijo Gale, y unos minutos antes Gale despertó.

—¡Está aquí! —saltó de la cama y gritó.

—Gale tranquilo, no hay nadie, aquí estoy solamente yo —traté de calmarlo.

—¡No!, Debí acuchillar a Eddie, así el jamás volvería a molestarme, debí poder hacerlo, ¡Vete de aquí!, ¡Déjame! —empezó a llorar desconsoladamente.

—¡Gale tranquilo aquí estoy yo! —lo abrazé.

—¡Está detrás de ti!, ¡Va a matarme!, ¡Aden! —lo solté e hice como si pateara a Mr.Death, y ya en el piso tuve que dar un golpe en seco al frío pavimento —Aden está lastimado, sólo protégeme, ¡Protégeme!

Me levanté rápido del piso y abrazé a Gale en el rincón donde estaba "escondido".

—¿Ya se fue? —pregunté tontamente desesperado.

Gale levantó la mirada temerosamente.

—Si Aden, gracias —me abrazó fuertemente llorando.

—Ven, tienes que dormir —lo levanté y se recostó en su cama.

—Eres bueno Aden, no me agradabas, pero ahora si, y debo admitir —. Se tapó con su cobija —Que eres más guapo que Kat, ¡Pero no le digas!

Después de unos minutos se quedó dormido.
Gale me había dicho guapo...
El también es muy lindo con sus ojos verdes.
¡Que te pasa Aden, tu eres heterosexual!

Tomé mi cobija y traté de dormir pensando en lo que había pasado, mañana sería otro día.

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Portada maravillosa por: ElegantEmpire
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