Capítulo 6: Defensores sin Armas.

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Sintieron un enorme golpe, las latas de cerveza a final de cuentas funcionaron. Los sabuesos de Tíndalo habían regresado. Inmediatamente despertaron para ver de que se trataba.

Los perros chocaban contra los círculos, tratando de romperlos, pero no lo lograban.

- ¡Mierda! ¡Ya llegaron! -gritó Lars.

- Ah, no me digas. -le dijo James de forma sarcástica.

- James, golpéalos con el puto bate. -le dijo Kirk.

- Ok, ok... 

James sacó el bate que estaba debajo de su almohada y se levantó del suelo, se acercó al borde del círculo... Un perro se le acercó e intentó morderlo y frenéticamente James se echó para atrás, estando asustado.

- ¿No que eras el más macho? -le dijo Lars.

- Uh... ¡Enano, ésto no es tan fácil! -le gritó James.

Lars se levantó, tomó una de las latas de cerveza y se la lanzó a un perro.

El perro se sobó dónde recibió el golpe e intento entrar al círculo de una forma feroz y llena de rabia; con la boca llena de espuma chorreando.

James volvió a acercarse y azotó el bate contra otro perro, pero varios perros a la vez empezaron a morder el bate. James se echó para atrás tratando de alejarlos pero no pudo. La jauría terminó destrozando el bate.

- ¿Y ahora qué haremos? -dijo Kirk preocupado.

- ¿No trajieron nada más para defendernos? -preguntó Jason.

- No, solo el bate...

- Bueno... -Jason se quedó en silencio un segundo mientras sus compañeros de banda lo miraban desesperados- ... Tendremos que irnos a dormir solamente.

- ¿Dormir? -le reprochó Lars- ¿De qué mierda nos va a servir?

- Si no podremos defendernos de ellos, solo podemos quedarnos juntos y dormir. Mañana ya será otro día y tal vez los perros se hayan ido.

- ¿ Y si no se van? -preguntó James.

- Eh... Kirk, ¿en el libro no decía nada sobre...?

- Nada. -le interrumpió Kirk- Creo que Jase tiene razón, como máximo, lo que podríamos hacer es quedarnos juntos hasta mañana.

- ¿Y si los perros atraviesan el círculo? -dijo Lars.

- Moriremos juntos. -contestó Jason.

- Está bien...

Todos volvieron a acostarse.

- Buenas noches. -murmuraron a diferentes tiempos.

 Cerraron los ojos, pero la desesperación y la angustia por no poder hacer nada al respecto no los dejaba descansar. Los horripilantes ladridos no cesaban, los perros estaban ensuciando el suelo con la espuma que salía de sus hocicos.

Era enloquecedor para ellos tener que oir esos ladridos, tuvieron que agarrar sus respectivas almohadas para taparse los oídos, con la esperanza de que pasaran horas y que todo acabe pronto.

En la tarde del día siguiente, Jason despertó, todavía estando estresado por el acontecer de aquella noche, él miró a su alrededor: Las paredes estaban totalmente destruidas, tenían agujeros por todas partes. Las ventanas estaban rotas. Pero los círculos estaban CASI intactos a su parecer.

Los perros, según se veía, ya se habrían ido.

- Oye, James... -murmuró sacudiéndole el hombro delicadamente- Despierta... Quiero que mires cómo quedó la habitación.

Metallica Vs Los Sabuesos de Tíndalo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora