Capitulo 17

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Me separe rápidamente de Joey y giré mi rostro encontrándome con Jacob sonriéndome y a la vez frunciendo el ceño.

–¿Que hacías?– preguntó confundido y mire a Joey quien a la vez me miraba confundido.

–Tenía algo en el ojo– fue lo primero que se me vino a la mente y Joey me miro aún más confundido.

–Menos mal– me sonrió– me preguntaba si podríamos salir esta tarde, ya sabes, tú y yo, como en los viejos tiempos– mire a Joey quien me miro un poco enojado según lo note– ¿que dices? No creo que a tu amigo le importe.

–Yo...– ni siquiera termine cuando vi a Joey irse sin más.

–¿Que dices?– insistió y sonrío al mirarme a los ojos, justo como lo hacía cuando estaba loca por el.

–Te contesto más tarde, ¿si?– el asintió confundido y me fui corriendo detrás de Joey.

–¡Joey!– le grite pero solo me ignoro y continuó caminando– ¡Joey!– le volví a gritar.

Se detuvo y lo alcance.

–¿Porque saliste así de la nada?

–No quiero estropear tu momento mágico con aquel chico– dijo algo... ¿celoso?

–¿Momento mágico? ¿Estás bromeando?

–No ______, el y tu tenían algo, no quiero estropear su hermosa relación, gracias por la ayuda, lo del juego...– le interrumpí.

–¿Podrías dejar de decir estupideces?– frunció el ceño– el y yo fuimos algo el año pasado, ya no más– me miro directo a los ojos, tratando de encontrar algo, rogaba por qué pudiera encontrar que no estoy mintiendo.

Ni siquiera se porque me afecta el que se enoje conmigo.

Hice una mueca al ver que no dejaba de mirarme, está intimidándome.

Sonrío un poco.

Suspiré al verlo tan cerca, al apreciar sus hermosos ojos, azules alrededor, verdes con caramelo en el centro, algo raros pero a la vez hermosos, seguido de su nariz y luego sus labios... sus labios, de los cuales estaba por tocar con los míos hace un poco.

–Supongo que ya está todo bien, ¿no?– dije con una pequeña sonrisa. El sonrió y asintió tomándome de la mano.

–Vayamos a divertirnos– hizo una seña con su mano jalándome a alguna parte.

Sonreí.

Ni siquiera se porque sonreí o porque lo describí de aquella forma, algo estúpido está pasándome.

Entramos al parque de diversiones y sonreí al ver la montaña rusa.

Adoro tanto subirme a las montañas rusas.

–Vayamos a la montaña rusa primero– dije sonriendo de la emoción.

–Ni loco me subo– comencé a reír al escuchar su respuesta.

–No seas agua fiestas Joey, te prometo que te recompensaré con algo.

–¿Un beso?– abrí mis ojos sorprendida y el sonrió con mi reacción.

–No.

–Entonces no me subo– cruzó sus brazos y bufé al oír eso.

–Por favor– le rogué– no quiero subir sola.

–Un beso y me subo– lo fulmine con la mirada.

–Está bien, no te subas, iré yo sola– comencé a caminar hasta la montaña rusa y de repente me jaló.

–Tu ganas, me subiré contigo– aplaudí emocionada.

–No te vas a arrepentir.

Por suerte la fila de espera estaba corta, me divertía tanto ver la cara de Joey al ver la montaña, este será el mejor día de todos, de tan solo ver su cara asustada, me alegra el día y hasta la semana.

Llego nuestro turno y miro dudoso.

–No seas miedoso– me burle de el.

Tome su mano para que tuviera confianza y me miro dudoso, lo jale hasta subir al carrito y esperar lo mejor.

'Minutos después'

–¡Debiste ver tu cara!– dije sin parar de reír.

–No es gracioso– me fulminó con la mirada y reí más.

–¡Ama!– imite sus palabras y reacción cuando estábamos en la montaña rusa y estalle en risa– es el mejor día de todos– me reí.

–No es gracioso– repitió y entramos a un puesto para balancear zombies.

–Si lo es, pagaría lo que fuera por volver a ver esa reacción que tuviste– me reí.

–Por eso no quería subirme _____, gracias– sonreí.

–De nada– le guiñe un ojo y rodeo los ojos– ¿que hacemos aquí?

–Matar zombies– dijo obvio.

–No sé cómo usar una de estas cosas– sonrío tomando la pistola y disparo al zombie, sonriéndome porque sabía que le había dado justo en la cabeza.

Suspiro y sonrío colocándose a mi lado.

–Pones tu mano así– tomó mis manos y las coloco– apuntas– apuntó hacia el zombie– y disparas, fácil– disparo y me sonrío.

Regreso a su lugar y observe como mataba a un par de zombies del juego, sonrío un poco al notar que lo estaba observando, esa sonrisa ya me trae loca.

Uno de los encantos de Joey Birlem, el Chico del 18 B.

Y solo al mirarlo a los ojos y ver esa hermosa sonrisa, supe que Loren tendría razón... Seré la primera en perder el juego, y la primera en caer bajo sus encantos.

Stupid Kid|Joey BirlemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora