Unicornio 10.

22 1 1
                                    

- Y entoces, ¿Cual es la solucion a todo esto? - Mostrando una gran impaciencia pregunto el director. Sentado en su sillon mientras tomaba agua.

- Creo que lo mas apropiado seria escribir un articulo definiendo su relacion y explicando lo que realmente paso..., ¿Les parece? - Saco algunos materiales, una libreta algo gastada y un lapiz pequeño.

Por alguna razón algo me preocupa y no tengo idea de lo que es. Espero que solo sea idea mía y no pase nada mas.
Todos hemos aceptado la idea, las preguntas de la entrevista son:
*¿Cual es el motivo por el cual se conocieron?.
*Su relación actual ¿Como la describirán?.
*¿Como describirían al otro?.
Solo esas dos ademas de la razón por la cual Adrian y yo nos conocemos. Ha sido mas sencillo de lo que pensé, y yo que creí que las entrevistas duraban oras.
Cuando la entrevista termino el director me pidió quedarme, creo que aquí cabe mi mal presentimiento.

- Señorita Benson, tengo una noticia que darle. - El director fue a su asiento detrás del escritorio. Asentí con la cabeza indicándole que hablara. - El hombre de antes que se encontraba aquí, me ha pedido algo con relación a usted... - Me esta poniendo nerviosa, pero ¿sera que necesita algún favor?. - El me ha pedido que te diga lo siguiente : "No te acerques a el". - ¿A quien? - Ha dicho que tu lo entenderías y ha dejado este sobre. - Me extendió su mano con un sobre blanco sellado. - No creo que se trate del profesor Adrián, pues se lo habrían dirigido directamente a el. Así que, trate de comprenderlo usted misma porque se me ha pedido que no me entrometa. - Me siento aliviada pero ¿a quien no debo acercarme?

Paso una semana desde que el director me dio este sobre, he dudado mucho sobre abrirlo. Justo ahora iba a la clase de química pero me olvide de mi libro, volví al salón a traerlo. Hay alguien dentro de el salón pero no puedo ver quien es... será Bruno que vino de metido o algún padre que espera a su hijo.

me acerque para ver mi mejor y vi el sobre que me había entregado el director en manos de esta persona... por ahora misteriosa. - Disculpe ¿Quién es usted? - me atreví a preguntar.

- A si que ellos te avisaron... - Esta voz me parece que la he oído en algún lugar. - Hare lo que ellos desean... - ¿Por qué tanto misterio? - Hare como que no te conozco. - Dijo en un suspiro ahogado dejando caer el sobre al suelo y luego salió bastante rápido, no me dio tiempo de ver su cara.

Me acerque al piso para recoger el sobre y finalmente vi su contenido... es una foto de quinto, muy vieja parece que el dueño de esta foto la llevo con el a todos lados, hay otra foto la levante del piso y cuando la vi de la impresión caí sentada, es una foto mía con Rubén. Me dirigí hacia la puerta con lagrimas a punto de salir de mis ojos, pero el ya no estaba ahí. Sentí una punzada en el pecho ¿Por qué sus padres me han dicho que me aleje?.

Estaba corriendo por los pasillos buscándolo, pero era en vano, no logre encontrarle. Me senté para tomar aire y abrace la foto a mi pecho; quería hacerle muchas preguntas pero el ya no estaba, parece que recibí la visita de un fantasma.

Regrese a mi salón y me senté en el piso, realmente quería verle pero necesito respuestas... quiero que alguien me responda - ¿Por qué no podemos ser amigos? - Empecé a sollozar. - ¿Por qué no puedo estar cerca de ti y defenderte como cuando éramos niños? - lloraba con mi cabeza entre mis rodillas acurrucada sobre el piso. Escuche unos pasos y seque mis lagrimas para que nadie me viera.

- ¿Vas a quedarte ahí llorando como magdalena o quieres un helado? - Levante mi cara para ver quien es y para mi sorpresa es ¡Bruno! dándome su mano para que pueda levantarme. Nunca me había visto llorar, ¡Ni cuando éramos niños!. Además de todos ¿Por qué el seria amable conmigo?. - Entonces ¿Vienes? - Me sonrió y tome su mano para levantarme.

Caminamos hasta la cafetería y el pidió dos helados en vasito pequeños, me dio el mío y empecé a comerlo; esta buenísimo pero el día de hoy hace frio y siento que me arrepentiré de comerlo.

- ¿Puedo saber por qué llorabas? - me pregunto amablemente.

- Vi un fantasma.

- ¡Jajajajajajajaja! - Se hecho una carcajada. - ¡¿Estas loca?! ¡Esas cosas no existen! - Gritaba mientras se reía provocando que algunos de los presentes voltearan a vernos. No me lo tome a mal ya que la forma en la que lo había dicho era completamente normal que tuviera esa reacción. Pero no insistió en saber parece que no le importa.

- Yo tengo una pregunta para ti. - Dije y el asombro en su cara se hizo presente.

- Dime.

- ¿Tu y Alisson aun son amigos? - Parece que mi pregunta no le agrado para nada, miro al vacío, su mirada parece de dolor.

- Ella me gustaba... - ¿QUE? Creo que ya sabia pero su respuesta me ha sorprendido. - Le confesé mis sentimientos y me rechazo, así como solo ella sabe hacerlo... - Me siento mal por el, o sea si dice "como solo ella sabe hacerlo" quiere decir que lo humillo y trato como basura. El siempre fue grosero pero nunca se metió con los sentimientos de alguien, hasta romperle el corazón de esa manera.

- ¿Desde entonces no hablan? - 

- Le prometí que la dejaría en paz, así que no. - Tal vez no esta tan triste como esperaba o solo finge ser fuerte. Me miro, y sonrió muy amablemente. - ¿Quieres cazar al fantasma?

Los Unicornios ExistenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora