Intercambio de Vidas [en edición]

Capitulo 16希望 (Esperanza)[Parte 2]

Subaru

12日目 (día)

Los arboles empezaban a ser invadidos por las álgidas corrientes de aire, el otoño se aproximaba. Puedo recordar como solía pasar entretenido fuera del templo que estaba a cargo en ese tiempo por mi abuelo, donde podía deleitarme observando los arboles de cerezo cambiar en cada estación, escuchar el sonido del rio, del aire, de las ramas y hojas de los árboles moverse debido al fuerte viento, la tranquilidad y serenidad que en ese templo había.

No tenia palabras para describir lo hermoso que era en ese entonces el ocaso reflejado en el rio y como a mi alrededor se tornaba de un color que me cautivaba cada vez mas.

Puedo recordar a mi madre trabajar duro para poder darme lo mejor, cada cosa que teníamos era debido a su esfuerzo, debido a sus lagrimas y el dolor que le causaba trabajar a su edad. Recuerdo tener 10 años y acompañar a mi madre mientras pelaba frutas en el pasillo que estaba ubicado en frente de la casa el cual estaba techado para así poder apreciar nuestro alrededor sin que la lluvia no los impidiese.

Siempre culpe a mi madre porque creía que ella era la razón de que padre nos abandonara, no me percate de lo ignorante y poco que sabia de la vida en ese entonces hasta que mis acciones tuvieron sus consecuencias. Lo recuerdo como si hubiese pasado ayer... mi madre regresaba muy cansada de trabajar, ya había anochecido y siempre la recibía con un abrazo y un beso pero ese día no era uno cualquiera, era mi cumpleaños. A pesar de que no teníamos todo lo que deseábamos, teníamos lo suficiente. Siempre observa a mis amigos recibir cosas esplendidas el día de su cumpleaños así que yo también lo esperaba y mi madre hacia el doble d su esfuerzo para conceder mis deseos en un día tan especial pero ese día ese no había sido el caso.

-¡Madre, madre, as regresado! –le exclame con un abrazo, acompañado de un beso.

­Cariño, ¿por qué no estas acostado? –me preguntó ella, hincándose, colocando sus dulces manos sobre mi cabeza y besando mi frente con gentileza.

-¿No sabes que día es hoy ? –le pregunté.

-No... ¿qué día es hoy cariño? –me preguntó confusa. Al principio creía que estaba jugando conmigo pero lentamente me percate que no lo hacia, mi madre estaba perdiendo la memoria con rapidez.

-¡Madre, es mi cumpleaños! –le exclame molesto, apartándome de ella.

-¿Es hoy?, me temo.. yo.. no tengo que darte ahora pero prometo que –la interrumpí.

-¡No es justo!, me porte bien, siempre e sido un buen niño –le exclame molesto.

-Cariño yo e.. –la volví a interrumpir.

-¡Te odio! –le exclame a lo que ella me quedo observando con dolor y asombro en sus ojos-. No puedo creer que seas así con tu propio hijo, por eso padre nos abandono, por eso padre ya no te quiere, por eso no tenemos dinero, por tu culpa, ¡todo es tu culpa! –le grite muy molesto y me retire corriendo hacia la nada, antes de marcharme pude observar como las lagrimas empezaron a derramarse de los ojos de mi madre.

Estaba tan molesto con ella que no me percate de lo que había dicho, no me percate del dolor grande que causaron mis palabras en ella, ya que simplemente tenia 10 años. Empezaba a oscurecer cada vez mas así que decidí regresar a casa pero al hacerlo vi algo que hubiese rogado con toda mi alma no haber visto...

Mi madre estaba desangrándose del dolor, tirada en el suelo, jadeando del dolor debido a que una daga estaba enterrada justo en su corazón, a lo largo observe a un hombre encapuchado largándose pero en ese entonces era solo un niño y no tenia la valentía para ir detrás de el. Las lagrimas invadieron mi vista y me acerqué a mi madre, acariciando su cara con gentileza.