Suzuya:
Desperté y Moon no estaba a mi lado, supuse que habría ido a comprar dulces o que estaría entrenado así que fui a la sala de entrenamiento pero esta estaba vacía. Caminé hasta la salida para ir a buscarla y todas las personas que me encontraba por el CCG me miraban apenados y no entendía por qué hasta que una de mis compañeras me lo dijo.
¿?: Siento mucho lo que ha pasado con Moon.
Suzuya: ... ¿qué?
¿?: Oh, ¿no lo sabes? El gobierno se la ha llevado para usarla en un experimento, modificarán su ADN.
Me quedé en shock, no sabía que hacer. Noté como mis piernas empezaban a temblar y, de repente, me caí al suelo.
Mi compañera se agachó delante mía y me dijo que lo sentía para después poner una de sus manos en mi hombro. Al sentir aquel tacto recordé a Moon y la rabia se apoderó de mi cuerpo. Salté sobre ella tirándola al suelo mientras le gritaba.
Suzuya: ¿¡Dónde está!? ¿¡DÓNDE LA TIENEN!?
¿?: N-no lo sé...
Salí corriendo hacia la habitación donde se encontraban todos lo expedientes para comenzar a sacarlos todos buscando el de Moon. Cuando logré encontrarlo empecé a leerlo hasta encontrar las palabras "paradero desconocido". De repente sentí una punzada en el pecho y aquel expediente se me calló de las manos, ¿eso se siente cuándo no quieres perder a alguien?
Escuché como la puerta se abría detrás mía y unos cuantos guardas de seguridad aparecían por esta.
Moon:
Me encontraba apoyada en la pared de aquel cuarto, me encontraba cansada y algo mareada como para moverme. Acababan de inyectarme unas cuantas cosas y, a pesar del dolor, no podía dejar de pensar en Suzuya.
La puerta se abrió y un hombre algo más mayor que yo entró en el cuarto.
¿?: ¿Sabes? Eres una chica muy atractiva...
Moon: Vete a la mierda...
¿?: ¿Crees qué tratarme así en tu estado es buena idea? *cierra la puerta*
Moon: Déjame en paz...
Él se acercó a mi cuerpo y pasó su mano por mi pierna.
Moon: ¿Qué te crees que haces?
¿?: Divertirme...
Moon: Lárgate.
¿?: *sonríe* Oh, no... yo no me voy.
Se acercó más a mi y levantó la bata que cubría mi cuerpo y, cuando intenté gritar el tapó mi boca. Se bajó los pantalones y me quitó la ropa interior.
Cuando acabó yo estaba llorando, me daba asco y dolía. Él se reía mientras se subía los pantalones.
¿?: Me he divertido mucho, pequeña.
Pasó su mano por mi mejilla y, de repente, esta cayó al suelo para después ser seguida por su cabeza. Su cuerpo se desplomó en el suelo y, con la visión borrosa, pude ver a Suzuya, el cual me abrazó rápidamente.
Suzuya: Shhh... ya está... no volverá a hacerte daño.
Moon: S-suzuya...
Suzuya: Dime.
Moon: Me... me han convertido en un ghoul...
Después de decirle eso, mi llanto se volvió más fuerte y él se alejó de mi con una mirada diferente, como si no me conociera.
Suzuya: ¿Qué...?
Moon: N-no sé como... pero ahora tengo kagune... lo siento, lo siento mucho.
Suzuya: ¿P-pero te alimentas de humanos?
Moon: No... pero han dicho que seguirán inyectándome cosas...
Él se acercó a mi y secó mis lágrimas.
Suzuya: Vayámonos.
Moon: ¿Qué?
Suzuya: Aquí no podemos quedarnos... vayámonos fuera de la ciudad, lejos.
En ese momento la idea me pareció perfecta, estaba deseando perder todo aquello de vista. Salimos de aquel cuarto y caminamos por los pasillos mientras observaba todos los cadáveres que Suzuya había dejado a su paso; decapitados, atravesados por su quinque, con la yugular cortada por uno de sus cuchillos, con alguna extremidad arrancada... las paredes y el suelo estaban manchados de sangre y Suzuya iba delante mía. Ahora estaba más tranquila que antes, con Suzuya me sentía segura.
