Capítulo 22.

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Él anochecer se acerca, lo veo, porque él cielo parece incendiarse de colores naranjas y violetas. Me doy un baño, y esperaba él timbre sonar, estaba sola en casa, mama salio y dejo una nota: "Eliana cariño, no voy a estar dentro de unas horas, fui con Luca y Max, a ver a alguien que nos puede ser de mucha ayuda, Killian, esta contigo, cuidate.
Te ama mamá."

Y Killian había salido a traer algo de cenar. Estaba acostada en él sofá, viendo mi serie favorita, cuando después de largas horas de espera él timbre suena, me levanto para abrir, pero me sorprendo al ver que no es Killian, es un hombre, un poco más grande, no supera los 25, pero tampoco es de 17 años. De cabellos oscuros, y ojos de un grisáceo llamativo, es alto, fuerte e intimidante. Él entro bruscamente, sin decir nada, agarrando fuertemente mi brazo, y azotando me como n la pared, ¡¿Por que demonios todos hacen eso?!.

Él sujeto, agarro con más fuerza, —si eso es posible —y juro, que casi podía escuchar como se quebraban poco a poco mis huesos. Intente zafar me, pero no podía; él era demasiado fuerte; ¡otra vez voy a morir!, yo gritaba, pero él aferraba una de sus manos en mi cuello, me empujo hacia la cocina, y me tomo nuevamente de l cuello y brazo. Me recargo sobre la barra y al ver sus ojos solo podía ver ira, enojo, odio, repugnancia, y otra cosa...muerte. Busque con mis manos algo con que defenderme, hasta que me pique con algo filoso; un cuchillo. Lo agarre y lo lance hacia él sujeto apuntando hacia su cara, él chillo de dolor, y yo aproveche para salir de allí  e irme a mi habitación...¡¿Y por qué en mi habitación?!, bueno podría salir por la ventana y llamar a la policía. Me dirigí escaleras arriba, me encerré en mi habitación y busque mi celular, pero...¡OLVIDE QUE LO DEJE ABAJO!¡Pero que estúpida! ¡MIERDA!. Solo me queda optar por salir a través de la ventana. Cuando tenia medio cuerpo fuera vi como él sujeto entraba y no se como hizo para abrir la puerta pero no me importo y salte. Pero me pegue muy duro en la cabeza, en lo que mi vista se estabiliza, pude vislumbrar a una silueta masculina ir hacia casa.

Killian.

Me levante y corrí con las pocas fuerzas que me quedaban, al entrar en casa yo...me quede sin habla. ¡Oh por dios!¡Acaso él golpe me afecto!. Veo a Killian de espaldas y él sujeto que me quería matar enfrente de el, pero hay algo diferente de su espalda brotan dos grandes alas blancas.

¡Oh estaré alucinando!¡me volví loca!¡yo diría demente!

¡Els estúpida, tu novio es un Ángel recuerdas, los ángeles tienen alas!.

Ese comentario procedente de mi cabeza me tranquiliza. Volviendo a la realidad, Killian saca de nuevo ese extraño cuchillo - de -energia - angelical, o lo que sea que es. Él hace unos movimientos rápidos y ágiles, y después él sujeto desaparece y todo en casa vuelve a estar como antes, puesto por él cuchillo lleno de sangre. Killian se voltea hacia mi y en su rostro noto miedo, inseguridad, y preocupación. Me acerco a él claramente alterada.

—¡¿Pero que rayos fue todo eso?!—le digo alterada, y en un abrir y cerrar de ojos sus alas ya no están.

—yo...emm...trato de matarte — se excusó — pero debo llevarte a un hospital, tu brazo y toda tu no se ven muy bien — asiento y solo me dejo guiar hacia él hospital.

Fuimos al hospital de la ciudad, ahí me atendieron muy bien, y resulta que él sujeto me fracturo un brazo, preguntaron que había pasado y Killian les dijo que me caí de un árbol. Llega una doctora a decirme los resultados.

Eliana© (libro 1) REESCRIBIENDO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora