Este es para Eli Zaid. Espero que te agrade :3 Estoy por terminar los dos que me faltan con Yugy, esperen por favor n.n
Me jodía, en serio me jodía ir de visita a casa de Tammy. Desde que mamá y papá han tenido que redoblar turno en el hospital a causa de los accidentes aparatosos que parecen no tener fin en Los Angeles, es mi deber, como hermana mayor, ir todos los días por Kat a casa de Tammy, quien la cuida por las tardes al ser amiga de sus hijas, mientras todos en casa trabajamos. Yo soy la primera en desocuparme, así que, saliendo del trabajo, salgo disparada a recoger a mi hermana, forzándome todos los días a ver la cara de niño bonito extra virgen que tiene su risueño y estúpido hermano. Si no fuera tan idiota, tal vez habría sucumbido a los encantos del muchacho hace algún tiempo. Es innegable lo muy guapo que es, pero también el hecho de que tiene tan fascinada a Kat que tengo que sacarla de su casa casi con la ayuda del FBI. Mark esto, Mark aquello, Mark lo otro... Kat no habla de otra cosa que no sea todo lo que hizo con Mark.
-No te vayas Kaaaat...-canturrea. Aquí vamos de nuevo
-Lizzy, déjame quedarme-tironea de mi mano sonriente
-Estás hecha un desastre Kat. Tienes tarea que hacer, y esos permisos los da mamá, no yo
-Mark me ayudó con mi tarea. He terminado todos mis deberes-sonríe espléndidamente y yo me masejeo el puente de la nariz-Anda Lizzy...
-Sí, Lizzy, anda...-le secunda él. Lo fulmino con la mirada y trato de no patearlo en ese segundo
-Kat, por el amor de Dios, tengo que bañarte y llevarte a la escuela antes de ir al trabajo porque mamá y papá no volverán a casa hoy. Vienes conmigo ahora mismo y es una orden, sube al auto-resignada, hace un lindo pucherito mientras se despide de Mark con un abrazo y un grito a Tammy y sus hijas que se asoman desde la cocina. Aprovecho que me he quedado sola con Mark y le arrebato su pequeña mochila, mientras él mantiene esa sonrisa que quiero molerle a golpes
-Para ti, soy Elizabeth. Próxima vez que vuelves a decirme Lizzy, y te rompo la mandíbula
Impactado por mi agresividad, se queda boquiabierto en la puerta, mientras subo al auto y arranco. Durante el camino, tengo que soportar una anécdota más de cómo Mark no se despegó de Kat mientras hacían todo juntos.
***
El insistente timbre me despierta. Quien quiera que sea, las 3 de la madrugada no es una hora prudente para casi querer derribar mi puerta. Como puedo, llego a la sala y abro la puerta, encontrándome con un empapado Mark que se aferra en sus brazos a algo que no logro saber qué es. Afuera la tormenta parece no querer parar. Me permito burlarme un poco de él, antes de permitirle entrar sin mediar palabra. Cierro la puerta y toda socarronería se esfuma cuando una algodonada presencia salta del regazo de Mark y viene directo hacia mí
-¿Qué demonios haces bajo la lluvia, encanto?
-Oh vamos, me sonrojas
-Tú no, idiota. Esta preciosura-chillo tomando al perrito del piso y alzándolo. Corrección, perrita
-¿No te importa que esté empapado?-pregunta mientras seco a la perrita
-¿Ves que te ofrezco una toalla o algo?
-Ugh, supongo que la dulzura no es algo que compartas con tu hermanita
-Cierra la boca y explícate antes de que te eche de aquí y me quede con esta linda nena
-Es mía, yo la rescaté-enarco una ceja-Venía de ver a mi...-hace una pausa y traga saliva, mirando hacia el suelo-de ver a una conocida. Escuché el sonido de la perrera y vi que metros adelante, ella y sus hermanitos eran perseguidos, junto a su mamá. Los escondí debajo de un auto, pero ella salió corriendo y tuve que correr para atraparla antes que la capturaran. En la fiesta de cumpleaños de Kat yo fui quien trajo a mis sobrinas, así que reconocí el vecindario y tu casa fue el único lugar seguro que vino a mi mente. Lo siento-finaliza. Suspiro y espero no arrepentirme de lo que voy a decir