Dedicado a mi mejor amiga de toda la vida, quien está a esto ][ de cambiar de bias ultimate, y yo contribuyo a la causa 😘😘😘 Feliz navidad, preciosa. Te amo 💕
-Vaaamooos... hyuuuung...-canturreaba un joven pelinegro a su amigo
-Ay, eres tan pesado-se quejó el pelirrojo antes de beber agua
-Te compraré pollo frito-sobornó pestañeando, causando una risita nasal en el contrario
-Iré a donde quieras-se rindió mientras le seguía los pasos
Hacía una tarde preciosa y despejada. Los inicios de la primavera ofrecían un cielo rosáceo al atardecer, momento en el que Jinyoung decía que podía capturar grandes cosas con su lente, más allá del cielo, y qué mejor lugar que un parque. Quizá una confesión de amor, alguien siendo feliz con su mascota, pájaros compartiendo una rama... las posibilidades eran infinitas, y el entusiasmo del pelinegro también, pero quería hacerlo acompañado de su mejor amigo Jaebum, a ese hombre le hacía falta salir de vez en cuando de la rutina de ir a su casa a ahogarse en pelos de gato después del trabajo.
Ambos fotógrafos e inseparables desde los pasillos de la universidad, se complementaban perfectamente y eran un gran equipo, cosa que los llevó a trabajar juntos para una revista minimalista, aunque a veces les daba por seguir usando la cámara, como era ese día. Ambos jóvenes caminaban despreocupados hablando de lo que habían hecho en el día, el trabajo pendiente y qué harían en el festival de primavera; mientras se adentraban en el parque y seguían conversando, llegaron a una fuente donde unos sollozos femeninos llamaron la atención de Jaebum, quien buscó con la mirada el origen de tan lastimoso sonido. Al mirar a su lado, se percató de que Jinyoung ya no estaba y maldijo mentalmente por un momento, hasta que por fin encontró a un par de amigas sentadas y abrazadas al pie de un árbol metros adelante de la fuente.
Dio por hecho que Jinyoung se había escondido para fotografiarlas, y se sentó en la fuente a esperarlo hasta que volviera. Revisaba sus redes sociales cuando escuchó unos pasos acercarse; creyendo que era su amigo, habló sin despegar la vista del teléfono:
-Quiero una malteada por haberme abandonado sin avisar...
-¿Disculpa?-la respuesta proveniente de una voz femenina lo hizo levantar la mirada, encontrándose con una chica de cabello castaño de mediana estatura. De alguna forma su rostro se le hizo familiar y al parecer era recíproco. La chica achinó sus ojos sin dejar de observarlo para después ampliarlos junto con una sonrisa-¡BumBum!
-¿BumBum?-Jaebum repitió un poco extrañado, rebuscando en sus recuerdos, hasta que supo de quién se trataba-¡Eun-ji!
Jaebum se puso de pie y abrazó a la chica con gran afecto. Su mejor amiga de la infancia, perdió contacto con ella cuando iniciaron la preparatoria y se mudó de casa. Estaba genuinamente feliz de verla y ella también.
-Estás mucho más guapo que nunca-él sonrió ligeramente apenado-Dios, necesitamos ponernos tanto al día con nuestras vidas-comentó emocionada
-No podría estar más de acuerdo-afirmó-Vayamos por un café cuando tengas tiempo, sigo viviendo en el mismo lugar, pero solo
-¿Qué fue de tus padres?-preguntó Eun-ji con cautela
-Se mudaron al campo cuando se jubilaron. No están solos porque sus vecinos son los padres de Jinyoung-comentó con tono despreocupado
-¿Jinyoung?
-¿Quién me llama?-el mencionado apareció con pollo frito y malteadas en mano. Jaebum lo miró con ligera desaprobación, arqueando una ceja-Oh vaya, hyung. Tienes compañía