Desde aquel día, el cielo se torno gris en todo el reino de Fairelly, innumerables los delitos que cometería obsesionado con la idea de ser el nuevo rey e imponer nuevas leyes que llevaría a una exterminación masiva de los ángeles, su sobrino tuvo que crecer a cargo de Blas, aunque en realidad él no tenía intenciones dejarle el trono a él, entonces que pensaba el nuevo rey ... por primera vez a los dioses no les agradaba como se mataban entre ellos, era verdaderamente repugnante ver esas alas de ángeles cubiertas de sangre y amontonadas como si fuera simple ropa sucia. Un día el rey, se encontraba predispuesto a irse a dormir cuando ante sus ojos se presentaría una mujer que se encontraba sentada en la cama.
-¿Quién te dejó entrar a mi habitación? -dice Blas contemplando a la mujer-
-Los guardias por supuesto, solo tuve que ponerlos a dormir... por los siguientes 1... 2 ... 3, bueno tal vez para siempre -dice la mujer con una sonrisa-
-Te dije que no sería bueno ... tu presencia, hago mi parte -dice Blas nervioso-
-Lo sé ... pero llegó a mis oídos que te vas a casar y supuse que no podría visitarte una última vez - la mujer procede a levantarse de la cama y a darle un beso al rey -
-El rey corresponde ante los deseos de la mujer-
-Scarlet, me casaré en unos días... no sería moral que sigas con esto ¿qué quieres? -dice Blas mientras aleja a la mujer-
-Tienes razón ... pero tú no eres lo que yo llamaría moral, cuando deseas poder... debo de admitir que lo logras -dice Scarlet mientras acaricia el pecho del rey-
-Déjate de juegos, si vienes aquí por ... -el rey es interrumpido por Scarlet-
-Shhhh ... ese niño ha crecido... empiezo a pensar de que su aroma es incluso más delicioso que el tuyo, sin duda se convertirá en un buen rey igual que su padre,¿ no harás nada con él? -dice Scarlet-
-¿Qué quieres que haga? ... si lo mató ... podrían empezar a dudar y en todo caso se levantarían en contra mí ... él tal vez si debería ser rey ... -dice Blas en voz baja-
-Bueno ... en ese caso ... -Scarlet le susurra al oído de Blas-
¿Cómo es que un miserable rey, puede ascender al trono y convencer a masas de personas de su inocencia? La respuesta a esto es Scarlet... una hermosa diosa que deseaba algo a cambio de todos los favores que le haría al rey, ella deseaba almas que podría devorar a su antojo y las almas más exquisitas eran la de los ángeles... fue ella la razón por la muerte de miles de inocentes... y la razón de tanta desgracia, pero esta diosa en realidad esta enamorada del rey.
-Tu plan es verdaderamente estupendo... si tan solo pudieras estar conmigo por el resto de la eternidad... -dice sarcástico Blas-
-Podría convertirte en inmortal si es lo que quieres ... podríamos gobernar este mundo -dice Scarlet mientras se acerca a los labios del rey-
-Realmente suena bien, te gustaría algo de beber... podemos pasar la noche aquí -dice el rey mientras se aleja de Scarlet-
El rey cuidando cada acto que hace frente a la diosa, toma una botella de whisky que tenía guardada y procede a traer dos vasos donde vertería el licor, se acercaría a la diosa para brindar con ella, sin saber lo que sucedería la diosa bebería del vaso sentenciándose a sí misma.
-Aghhh ... de verdad, Blas? lo envenenaste... quieres matarme o qué? -dice la diosa asqueada por el sabor del licor-
-Por supuesto que no ... tú no puedes morir de eso estoy seguro -toma el vaso de la diosa y procede a dejarlo en la mesa de noche de su habitación-
La diosa confundida por el contenido de la botella empieza a vomitar e intenta formular algunas palabras para hablar con su amado. Mientras tanto el rey toma una pequeña daga que oculta en su espada.
-Que mierda tenía lo que me diste! .. Blas! ... Blas! ... estoy segura que no quieres ver la ira de una diosa!!! -dice furiosa mientras toma asiento en la cama del rey-
-Tienes razón no es lo que quiero -Blas se arrodilla ante la diosa y toma su mano-
-Blas! ... todo el pecho me quema! mi cabeza no deja de dar vueltas! -dice desesperada la diosa-
-Lamento hacerte pasar por esto -el rey besa la mano de la diosa- pero creo que no debiste de olvidar que entre los humanos traicionarnos entre nosotros - entonces con la daga procede a realizar un pequeño corte en las venas de la diosa -
Entonces la diosa no logra reaccionar y cuando lo hace ya es muy tarde, el rey Blas al parecer lo que quería era la sangre de la diosa que había logrado extraer con éxito en el vaso de whisky. La diosa furiosa por tanta insolencia adopta una forma descriptiblemente horrenda, que asusta al rey quien opta por retroceder con cuidado protegiendo la sangre de la diosa que ahora poseía. La habitación en si misma parecía estar ahora cubierta de sangre que pintaba incluso las ventanas. La diosa procede a maldecir al rey:
Blas... por traicionarme! deberás de pagar por todos tus pecados, de hecho tu descendencia será maldita... todo y cada uno de los reyes que se sienten en el trono de Fairelly, será condenado a una muerte trágica... y eso te incluye a ti
-Al parecer resistes más de lo que creí ... -dice mientras intenta retroceder a la puerta de la habitación-
El veneno que le dio Blas a Scarlet era más letal de lo que parecía, lo había logrado extraer gracias a la ayuda de la sangre de los ángeles, era el veneno perfecto para eliminar la inmortalidad de los dioses y esto daría como resultado un profundo sueño en el que caería Scarlet; sin embargo, la maldición ya estaba hecha ... aterrado el rey, vio como la horrible entidad caía al suelo y recuperaba la forma de una mujer. Su entorno sangriento en un abrir y cerrar de ojos también parecía haber cesado.
¿Qué proseguía?
De ahí en adelante poco se sabe del destino de la diosa, se creía que ella había sido ahorcada en el bosque y que sus restos habían sido repartidos entre las bestias que ahí habitaban. La familia de los Delenfert continuó al mando, Blas intento hacerse un dios, pero el resultado fue una muerte trágica años después al intentar crear un brebaje que le haría poseedor de los poderes de la diosa, pero la sangre que había extraído sin duda fue mortal para él.
A su muerte el reino entero cayó su nombre, el rey Blas había muerto, paz entre las especies que habitaban entre Fairelly, pero por cuánto tiempo? ... nadie más quería contar la historia del rey que fue el protagonista de un genocidio por cuestiones narcisistas, nadie quería recordar y lo borraron de su historia. Fairelly solo tuvo un rey... el único Shion Delenfert, gracias a él se obtuvo una victoria y años de prosperidad... la corona real por supuesto oculto el secreto generación tras generación... nadie volvería a mencionar el nombre de Blas, desde ahí solo suplicarían el perdón a sus dioses.
ESTÁS LEYENDO
El Trono de la Reina Benevolente
خيال (فانتازيا)El fantástico reino de Fairelly se vuelve presa del desorden y el caos que sumergen a sus reyes a cometer inimaginables pecados generando el horror de sus dioses, quienes asqueados de la repugnancia de la humanidad deciden castigarles, pero su maldi...