C U A T R O

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"Nuevos integrantes habrán, tu mente cambiará, pero tu corazón oirás ya que las personas que amas siempre serán prioridad..."

Aby


—Quiero que me entrenes. —volví a repetir, el parpadeó varias veces y sonrió.

— ¿En que necesitas entrenar?

—Quiero hacer ejercicio, necesito... Necesito bajar de peso. —murmure por lo bajo.

—Pero... —me miro de pies a cabeza. —Bueno, tú no pareces estar pasada de tu peso, tal vez un poquito pero no creo que lo necesites, es decir... Yo te veo bien.

—No lo estoy. —Murmure —Por favor, necesito ayuda, quiero conseguir mi peso ideal y sé que no lo lograré sin ayuda. —El me miró no muy convencido.

— ¿Lo haces por tu salud? —se cruzó de brazos.

—Sí, ¿Por qué no? —Intente sonreír pero él me miró sabiendo que no era verdad. —Mira, hace tiempo que vengo pensando esto y de verdad quiero hacerlo.

—Aby ¿Tienes problemas con tu cuerpo? —no quería decirle la verdad, sabía que no me ayudaría. — ¿Has hablado con tu padre sobre esto? —agaché mi cabeza en respuesta y el suspiro. —Mira Aby, yo no puedo entrenarte a menos que tu padre lo autorice ¿De acuerdo? —asentí levemente y sobe mi nariz no podía evitar llorar. —Aby, no llores, yo...

—No... —lo mire a los ojos y sonreí débilmente —Gracias de todos modos. —Me di la vuelta y entre rápidamente a la casa.

Me encerré en mi habitación y me recosté sobre mi cama abrazada a mi almohada de emoji.

Jamás lograría cambiar, jamás lograría gustarle a alguien, jamás lograría ser una chica más normal.

(...)

Mi rutina se había vuelto poco corriente, no hacía más que ir al instituto y al regresar encerrarme en mi habitación, mi apetito había aumentado de una forma abrupta de un día para el otro, no podía dejar de comer, no tenía control sobre mí.

Las pesadillas que habían comenzado como algo normal se habían vuelto algo de todos los días. Mi sueño era inhumano y solo habían pasado 3 semanas.

Mi vida solo consistía en 3 cosas: el instituto, la comida y el dormir.

Era día sábado y no tenía instituto por lo que dormiría hasta tarde. Abrí los ojos y el sol pego en mi rostro como si fuese una linterna a mitad de la noche.

—Maldición. —bufé levantándome adolorida del estómago. Camine a la ventana y cerré las cortinas. —Mucho mejor.

Tome mi celular y vi la hora, eran las 13:00 hs. Luego de una ducha y un cambio de ropa baje las escaleras.

—Oh si, fue increíble, pero por fin estamos aquí. —Miré extrañada al oír una voz femenina en la casa. — Estoy ansiosa de conocerla bebe.

Camine a la sala y vi a una joven rubia sentada en el pequeño sofá, parecía de mi edad, llevaba maquillaje y era muy linda. Por otro lado, en el sofá mayor se encontraba mi padre abrazando a una mujer, también rubia, no muy distinta de la joven, pero de unos cuantos años más.

La rubia me miró y seguida de esta tuve la mirada de mi padre y su acompañante.

—Aby... —trague saliva y él se levantó, camino hacia mí y me abrazo.

—Hola... —lo mire. —Ellas... ¿Quiénes son? —lo mire confundida.

—Aby... Ellas... Son... Clarissa y Taylor. —asentí y la mayor me estiro su mano la cual acepte.

—Es un gusto conocerte por fin Aby. —Mire a mi padre y luego volví mi vista a la mujer.

—Clarissa, Taylor, les presento a mi hija, Aby.

— ¿Por qué mejor no nos sentamos? —Habló la mayor y todos asintieron.

—Ustedes... Son... ¿Amigas de mi padre?

—Aby... —Mi padre tomó mis manos. —Clarissa es... Ella es... Mi novia. —Me sonrió levemente.

No sabía cómo reaccionar ante ello, cuando mi madre aún estaba con vida él siempre tenía contacto conmigo y jamás me había hablado de una "novia", siempre me repetía que el amor por mi madre jamás se había ido.

No sabía cómo sentirme, sentía angustia y dolor, me había mentido, me había ocultado algo importante.

—Ella y Taylor vivirán con nosotros...

—Por eso las habitaciones...—susurre para mí misma. —Yo... —ellos me miraron expectantes. —Yo... Necesito salir un momento. —Me levante rápidamente y salí de la casa.

— ¡ABY! —La voz de mi padre parecía alejarse, la calle parecía oscurecerse cada vez más hasta que todo se volvió completamente negro. — ¡ABY!

(...)

—Bien, todo parece estar en orden. —el medico guardo sus útiles en su maleta. —Recuerda tomar tus medicamentos, te he aplicado la dosis que cubre todo el día. Recuerda estar tranquila y recomiendo que descanses un poco. —Yo asentí. —Bien, si tienes síntomas no duden en ir.

—Gracias doctor. —Mi padre estrecho su mano y el mismo salió de mi habitación. — ¿Cómo te encuentras? —se sentó a mi lado y tomó mi mano.

No podía decirle como en realidad me sentía, aunque la idea de una madrastra y una hermanastra no me agradaban, sabía que mi padre estaba dando su mayor esfuerzo por mí y no podía simplemente decirle lo que sentía, sabía que él era capaz de ser infeliz por mí y no era lo justo.

Asentí con una leve sonrisa y oí la unos pasos. Eran ellas.

—Aby, espero que te encuentres bien. —Clarissa me sonrió. —Con Tay te trajimos un regalo de Nueva York. —ella extendió su bolsa y me lo dio.

—Muchas gracias. —Sonreí.

Abrí la bolsa y me encontré con un vestido rojo muy ajustado, lo apoye sobre mi cuerpo y note la gran diferencia de talla. Había aumentado demasiado de peso en muy poco tiempo.

—Si lo usas con unos zapatos negros quedarás genial. —hablo Taylor mirándome con una sonrisa. —si no tienes yo puedo prestarte de los míos.

—Muchas gracias. —guarde la ropa con rapidez y les sonreí.

—Bien, iremos a preparar la cena. Los dejamos solos. —Clarissa depósito un beso en la mejilla de mi padre y se fue junto a su hija.

El silencio en mi habitación era tan incómodo, no sabía que decirle, no sabía cómo actuar, solo sabía que debía ocultar aquello que me molestaba.

—Aby yo... —Él quiso comenzar pero lo interrumpí.

—No debes decir nada papa. —tome su mano. —si tú eres feliz, yo también. —El me miró a los ojos y me sonrió.

—Te amo mucha princesa. —me abrazo con fuerza y le correspondí.

A veces hay que guardar nuestros sentimientos para hacer a otra persona feliz, no me importaba si me molestaba, solo quería ver a mi padre feliz,aunque yo no lo fuera del todo.   

👀👀👀
Hola bellezas

Para las que les extraña, esto es Teen Bible. La historia sigue siendo la misma solo con pequeños cambios, ejemplo, el título.

Espero que no les moleste. Nada más.

❤️Los amo ❤️

Teenage Problems © |njh|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora