Teenage Problems © |njh|

V E I N T I T R É S

"Tarde o temprano, el amor debe salir a la luz y darse a conocer. "

Aby

Había pasado una semana, la mejor semana de mi vida para ser exacta, y lo único que la hace increíble era Niall. ¿Quién diría que mi vida cambiaría por él?

Algo aún no cambiaba y era mi problema con mi cuerpo, pero lo bueno era que lograba olvidarlo cuando estaba a su lado, Niall me hacía sentir linda.

Me encontraba en mi casa luego de la escuela, Niall me había ido a buscar con un obsequio, un gesto que fue súper tierno. Una rosa de papel que el mismo había hecho.

—Bien, ¿Qué pediremos para almorzar? —Hablé apoyándome contra la mesada.

—Mmm... Se me antoja pizza. —El cerró sus ojos y abrió la boca mientras frotaba sus manos con deseo.

—Déjame adivinar, con extra queso. —lo mire con una sonrisa al saber su pizza favorita.

—Y pepearon. —me sonrió y yo reí, tome el celular y llame al delivery.

—Hola, una pizza con extra queso y pepperoni, si, para delivery. Si, gracias. —le di la dirección y corte la llamada. —vendrá en unos minutos. —Lo mire y vi cómo me sonreía. — ¿Qué sucede? —reí levemente.

—No puedo dejar de contemplar lo hermosa que eres. —no pude evitar morder mi labio. Niall era demasiado dulce y tierno cuando estaba a mi lado.

Se acercó y me tomó de las mejillas para mirarlo a los ojos.

—Eres muy hermosa y no importa como sea tu cuerpo, siempre serás hermosa Aby. —Mis mejillas ardían del calor que sentía, no lo dude y lo abrace con fuerza.

Sus palabras tenían un gran poder en mí, incluso podía decir que comenzaba a ganar confianza en mí, comenzaba a creer que sus palabras eran ciertas.

Me abrazo por la cintura y una corriente de inseguridad me recorrió.

«No tienes la cintura delgada, eres gorda y estas llena de grasa. Mira sus manos, no sabe por dónde agarrarte.»

Mordí mi labio y me negué internamente. Me aleje con rapidez de sus brazos y baje la cabeza, era muy difícil combatir aquel monstruo que vivía en mi interior.

— ¿Aby? —Trague saliva y suspire intentando calmar aquellas lágrimas que comenzaban a acumularse en mis ojos.

—Necesito ir al baño. Enseguida regreso. —Camine sin mirarlo hasta llegar al baño y me encerré en aquel lugar.

Me acerque al lavamanos y moje mi rostro.

—Contrólate Aby... —susurraba por lo bajo. —Contrólate por favor... —evite contacto con el espejo y tome la toalla para luego salir.

Camine a la sala y vi a Niall sentado en el sofá con la pizza abierta y los platos preparados.

—Acaba de llegar. —Me sonrió. — ¿Te encuentras bien? —me pregunto preocupado.

—Sí, solo... Fue un mareo. Olvidé tomar mis pastillas hoy. —Mentí mientras me sentaba.

—Oh pequeña. —Se acercó a mí lado y acaricio mi mejillas—Debes tomar tus remedios, es por tu salud. —yo asentí y sonreí.

—Lo sé, es solo que a veces me olvido y bueno, cuando tengo síntomas recuerdo que... —suspire. —no soy como las demás.

—Aby, amor. —Me aferro en sus brazos y las lágrimas nuevamente se acumularon en mi rostro. —Tener enfermedades no te hace diferente pequeña. Sé que no es agradable tener que tomarlas pero es por tu bien. No te hace una extraña por tenerlas.

—Lo siento... —Hablé secando las lágrimas que habían salido sin darme cuenta. —Mejor... Mejor comamos. No dejemos que se enfríe la pizza. —Hablé con una pequeña comida.

Claramente el estar en mis días me volvía más sensible, más insegura, más insoportable. Pero no era mi culpa, yo no controlaba mis hormonas.

Luego de comer tranquilos viendo la televisión nos recostamos en el sofá, él me tenía sujeta de la espalda pegada a su cuerpo, mi cabeza se encontraba sobre su pecho donde podía oír tranquila el hermoso ritmo de sus latidos. Me daban tanta paz, que incluso se habían vuelto mi sonido favorito sin duda alguna.

Él se encontraba muy tranquilo viendo un programa de golf, no me llamaba la atención pero si eran sus gustos claramente no lo interrumpiría, solo quería estar junto a él.

El me miró con una sonrisa y beso mi cabello para aferrarme más entre sus brazos.

—Adoro estar así contigo. —Habló cerrando sus ojos y dando un gran suspiro de satisfacción.

—Yo también adoro estar así contigo. —Lo mire a los ojos con una sonrisa y apoye mis manos sobre su pecho. —Sabes... Jamás he sabido lo que significaba estar enamorada. Y ahora que lo sé, puedo decir que es el mejor sentimiento que existe en este mundo. —Hablé con una gran sonrisa.

—Te amo Aby... En verdad lo hago, desde lo más profundo de mi corazón. —me tomo de las mejillas y planto sus labios sobre los míos. No sabía mucho sobre cómo besar, pero en aquella semana Niall me enseñaba día a día lo que era el beso perfecto.

Separe mis labios de los suyos y escondí mi rostro en su cuello.

Oí un auto estacionar y abrí los ojos con fuerza. Era mi padre. Rápidamente me levante de Niall y acomodé mi cabello.

Tanto el como yo habíamos acordado el día que nos volvimos novios que debíamos hablar con mi padre sobre nuestra relación pero necesitábamos conocernos más.

Él se acomodó en el sofá y yo tome las hojas de mi mochila dejándolas sobre la mesa. Me senté a su lado y la puerta se abrió.

— ¡Hija! ¡Llegamos! —Mire a la entrada al igual que Niall y mi padre nos miró sorprendido. —Oh, Niall. Que sorpresa verte tan temprano.

—Papá, Niall vino para ayudarme con mis deberes de biología. —Hablé alzando la hoja. —como él trabaja sabe mucho de los músculos y huesos le pedí ayuda. Espero que no te moleste.

—Para nada, dime Niall cuanto te debo y te pago.

—Oh no señor, tranquilo, no le cobraré, lo hago como un favor. No podría cobrarle a una amiga. —Hablo mirándome con una sonrisa.

—Bueno, en ese caso te invito a que te quedes a cenar esta noche. —Hablo sorprendiendo a todos. —Tú y Yazmín están invitados a cenar con nosotros.

—Muchas gracias pero... Yazmín ya no es mi novia. —Habló sonriendo de lado.

—Oh, no lo sabía. Lo siento, pues entonces tú. —Hablo y ambos rieron.

—Será un placer. —Hablo Niall.

Mientras él estaba entrenando a mi hermano yo me le acerque con disimulo para hablar sobre aquella noche.

—No creí que mi padre te invitaría a cenar. —Hablé mientras veía a mi hermano practicar.

—Yo tampoco, pero creo que sería un buen momento para... Ya sabes, decirle de nosotros. —Habló intentando tomar mi mano. Yo las entrelace y sonreí nerviosa.

—Estoy muy nerviosa Niall, no quiero que me aleje de ti. —Lo mire y el poso sus ojos sobre los míos.

—Nada malo pasará, te lo prometo. —Tomo mi mano y la beso con rapidez.—es hora de que nuestro amor de el siguiente paso.